Hay que educar es a los dueños de las mascotas, concluyen en sesión del Concejo de Manizales

Los excrementos en vía pública siguen siendo queja entre los ciudadanos. Fernando Vinazco, líder del barrio La Enea, dijo ayer que el tema es de cultura ciudadana.
Compartieron el criterio representantes de la comunidad, de Emas y de la Policía Ambiental que aceptaron la convocatoria que les hizo la Comisión Tercera del Concejo de Manizales para debatir el tema.
Vinazco señala que como líder les ha llamado la atención a personas que incurren en esa práctica, pero le responden que él no es autoridad y que el espacio público no es de nadie.

A punta de bolsas
En la sesión estuvo el secretario municipales de Medio Ambiente, Juan Carlos Barrera, afirmó que el deber de esta dependencia es sensibilizar y educar para que se haga una buena disposición de excrementos, lo que están cumpliendo con la campaña Recoger es querer, relacionada con la ubicación de 45 dispensadores de bolsas gratis para heces de mascotas, 16 que están junto a CAI, 15 en zonas verdes y 9 en avenidas.
La campaña empezó el pasado 12 de mayo, y asegura que que los ciudadanos le han dado buen uso. Son rollos de 2 mil bolsas y solo se ha acabado uno, el de El Cable porque por allí pasa la ciclovía.
Al preguntarle por qué no sancionan a los infractores con el Comparendo Ambiental, dice que primero piensan en la aplicación de la norma para generar cultura ciudadana. Agrega que la Ley 746 determina las sanciones para quienes hagan una mala disposición de residuos de caninos, pero que es la Policía Ambiental por medio de la Inspección Cuarta, la que debe adelantar esos procesos.

Sin educación
El gerente de Emas, Pablo Felipe Arango, coincidió en que falta es educación ciudadana, pues contando los 45 dispensadores de bolsas gratis, la ciudad tendría 500 dispositivos, pero que la realidad es otra.
"Lastimosamente los 450 cestos que tenemos ubicados se han convertido en puntos críticos. La comunidad los emplea para depositar residuos ordinarios, cuando no tienen la capacidad de recibirlos. El problema del aseo es de cultura ciudadana", recalca.
Agrega que hace unos tres años entregaron rollos de bolsas para excremento de perros a vigilantes de edificios en los barrios La Estrella y Palermo, y nadie las solicitó.

Contaminante y nocivo para la salud
El secretario de Salud de Manizales, Carlos Humberto Orozco, fue enfático ayer en el Concejo: "La deposición de los animales contamina, y es un problema de salud pública en varios países".
El riesgo de tener heces de perro en estas zonas públicas es que contienen parásitos intestinales, que representan peligro, especialmente para los niños. La contaminación se puede dar por vía respiratoria, cuando el excremento se seca por el sol y emana olores; oral, porque a través de balones o con el roce de las manos tocan los desechos, y transcutánea, pues por los pies las larvas pueden pasar al conducto sanguíneo y de allí a órganos vitales.
"La obligación de todo tenedor de mascotas es desparasitarlas y educarse sobre cómo y dónde deben evacuar los animales. Además, cada que se recojan excrementos con bolsa, la persona debe lavarse las manos".