MARTHA LUCÍA GÓMEZ
LA PATRIA | MANIZALES
Un problema en doble vía atraviesa la escombrera pública Malabar-Aranjuez, única habilitada en Manizales para depositar material.
Los constructores se quejan de que solo están recibiendo 10 volquetadas diarias por proyecto, y la comunidad denuncia que están echando tierra en el sitio del deslizamiento ocurrido hace 42 días.
Constructores dicen que por falta de lotes, que debe definir la Alcaldía, algunos proyectos están quedados, y que el cupo autorizado para botar por obra representa entre el 33,3% y el 12,5%, según el tamaño del proyecto; algunos sacan unas 30 volquetadas diarias y otros 80. "Es una capacidad muy restringida", aseguran.
Las otras escombreras públicas, La Playita y Villacarmenza, están cerradas porque colmaron su capacidad.
La semana pasada en una sesión del Concejo Municipal, el secretario de Obras Públicas del Municipio, Hernán González, manifestó que trabajan para cerrar La Playita y cubrir el terreno con vegetación, y que Villacarmenza lleva cuatro meses de obras para solucionar las aguas represadas por un hundimiento del terreno en diciembre pasado, lo que quedaría listo en unas dos semanas.
Con esto podrían intervenir el box coulvert (alcantarilla de cajón) que hay en el lugar, para seguir recibiendo material, aunque requieren $3 mil 500 millones. No obstante, Corpocaldas le respondió que después de reparar la estructura y reconformar taludes, deben cerrar esa escombrera.
La única opción habilitada es Malabar-Aranjuez, a la que le queda un mes y medio de vida útil.
El secretario respondió ayer a LA PATRIA que la capacidad de esta escombrera, por la longitud del box, permite hacer una ampliación, estimada en unos 15 metros para ofrecer mayor disposición. "Esto significaría unos dos o tres meses adicionales de operación. La obra cuesta $90 millones que aporta la Alcaldía. Las obras deben estar empezando hoy -ayer-", informó el secretario.
De otro lado, los vecinos de esta escombrera están aterrados. Justo donde se inició el pasado 17 de marzo un gran deslizamiento, que bajó con flujo de tierra y lodo hasta el sector poblado La Paz, están depositando material por grandes cantidades.
A la gente le inquieta saber si con las fuertes lluvias de los últimos días puede haber un peligro más grande. Ven filas de 30 y 40 volquetas esperando para dejar material. Fuera de eso se quejan de las consecuencias para las vías cercanas: si hace sol, no se aguantan el polvo, y si llueve, abunda el pantano.
El secretario de Obras afirma: "La comunidad puede tener la tranquilidad de que, dentro de las posibilidades de la escombrera, se trabaja de la manera más técnica, y si se ve un movimiento grande en el sitio del derrumbe es para poder aliviar el terreno, compactar y continuar con el recibo de material".
Agrega que las semanas posteriores a este incidente atendieron el sitio, al que se le puede depositar material sin problemas. "Garantizar que nada suceda es difícil, pero lo que se hace es con procedimientos adecuados".
Esta escombrera la opera el Consorcio Quiróga y Ropero, de Manizales. "Pocas veces se ha tenido operando una escombrera con un tren de maquinaria tan amplio. Hay dos retroexcavadoras y un bulldozer. Generalmente se hace con un solo bulldozer".
De los residuos en las calles, el secretario informa que martes, jueves y sábados, como mínimo, al cierre de actividades de la escombrera, Bomberos debe limpiar, y regrese si es necesario. Sin embargo, la comunidad dice que a algunos les toca salir con pala para recoger la tierra que dejan regada.
El pasado 19 de marzo LA PATRIA publicó un informe sobre la falta de escombreras, que lleva por lo menos siete años. La Alcaldía dijo que la opción más clara era habilitar La Cumparsita, lote de la vereda Agua Bonita (antigua vía a Chinchiná). El interés de operar este lugar, como escombrera de privados, es de la firma Triturados MPS S.A E.S.P.
La Alcaldía explicó hace una semana en el Concejo que la firma abrirá hacia junio y que tramita en Corpocaldas los permisos ambientales. Corpocaldas dijo que el inicio de operación depende del proponente, que debe entregar diseños estructurales de chimeneas y de ocupación de cauces, precisar el área de compensación ambiental y definir el uso del terreno cuando finalice su vida útil.
Esta opción está amparada en un proyecto de acuerdo que le aprobó el Concejo a la Alcaldía el 23 de mayo del 2013 para identificar lotes públicos y privados que cumplan con requisitos (Resolución 541), e incorporarlos como escombreras.
El ponente de este proyecto fue el concejal Manuel Orlando Correa, de la U. Ayer dijo que la autorización se dejó abierta mientras aprueban la modificación del Plan de Ordenamiento Territorial, iniciativa que estaría llegando para las últimas sesiones de este año (1 de octubre al 30 de noviembre).
Otros lotes propuestos por la Alcaldía son: Casa Roja, por la Estación Uribe; cerca a la Terminal de Los Cámbulos; curva del Kumis, por la Panamericana; curva Rimula, a un kilómetro de la Estación Uribe; Eucaliptus, por la Ruta 30, y La Rosa, vía al Bajo Tablazo. No obstante, Corpocaldas indicó que algunas presentan inestabilidad geológica o están en zonas de protección.
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