Culminó la estabilización en el barrio Bajo Rosales de Manizales

MARTHA LUCÍA GÓMEZ
LA PATRIA | MANIZALES

Pararon los movimientos de las laderas en el sector de Bajo Rosales. Así lo reportó Corpocaldas al entregar un balance de lo que fueron las obras de estabilidad en este punto, que se desarrollaron durante 10 meses, de los 15 previstos.
La reducción en tiempo la logró el contratista debido a que permitió abrir varios frentes de trabajo y tuvo personal y el equipo suficientes para la obra, dijo Jhon Jairo Chizco, subdirector de Infraestructura de Corpocaldas.
El funcionario explicó que el contrato tuvo por objeto construir obras de estabilidad de taludes, hacer manejo de aguas lluvias y controlar la fuerza del cauce de la quebrada Olivares. Los trabajos en este punto se iniciaron en julio del 2011 y culminaron la semana pasada, tuvieron un valor de $4 mil 502 millones.
De acuerdo con los diseños elaborados por la firma Aquaterra y por el ingeniero Carlos Enrique Escobar Potes las obras comprendieron la estabilización del movimiento en masa que se venía presentando en este sector y que estaba comprometiendo la estabilidad de unas viviendas del conjunto Prados de La Colina, la vía por la carrera 20 y la conducción de agua a presión en tubería de 16 pulgadas de Aguas de Manizales.
"El riesgo en la zona se ha sido mitigado a valores aceptables, lo cual se ha ratificado con los resultados de unas instrumentaciones topográficas adelantadas en el sector", sostuvo el funcionario.

Detalles de esta obra
Chizco señaló que las obras se concentraron en cuatro grandes grupos:
1. Construcción de obras de drenaje profundo con drenes subhorizontales entre 40 metros y 70 metros.
2. Conformación de terrazas en el talud para mejorar su geometría y permitir la construcción de obras de manejo de aguas lluvias, eliminar irregularidades y materiales geotécnicamente incompetentes.
3- Construcción de zanjas colectores, canales y pantallas (muros) para el manejo de la fuerza del agua en toda el área intervenida.
4. Construcción de estructuras ancladas, bloques aislados y muros de protección lateral sobre la margen izquierda de la quebrada Olivares mejorando la estabilidad general de la ladera.