“Aquí nadie se inventó nada nuevo”, ministro del Interior, Juan Fernando Cristo

Juan Fernando Cristo es el ministro de moda por la reforma al Equilibrio de Poderes; ha generado amores y odios, quizá más estos últimos, por lo que traerá para la Rama Judicial, pero él espera que quede lista este martes, cuando en el Senado se vote la conciliación que le falta.

Asegura que lo más importante es que se trata del cambio más ambicioso que se le ha hecho a la Constitución desde 1991, cuando se expidió. “Demostramos que el Congreso tenía las competencias y facultades para hacer una buena reforma institucional. Esta reforma restablece el equilibrio de poderes en el país, ajusta institucionalmente la justicia, permitirá recobrar la confianza y la credibilidad de los ciudadanos en sus instituciones”.

Sostiene que de los debates en el Congreso queda un texto sólido y blindado, con cero “micos” y sorpresas, como lamentablemente sucedía antes. “Si el Senado la vota a favor, se le entregará al país una cirugía institucional a fondo”.

De cal y de arena

- ¿La Rama Judicial dice que la reforma mata la justicia, qué piensa de esa aseveración?

No veo la Rama Judicial en contra de la reforma. Veo unos magistrados y funcionarios en contra, pero cuando se sienten a ver el texto final estoy seguro que la mayoría cambiará de opinión. Hubo un momento muy emotivo de tratar de plantear un choque y un pulso, que ni al Congreso ni al Gobierno le interesaban. Nunca vi una posición unánime de la Rama Judicial; Asonal, al final, estuvo apoyando varios aspectos, muchos jueces y magistrados también hicieron llegar sus voces al Congreso, incluso el Consejo de Estado hizo observaciones que fueron recogidas y quedaron tranquilos y satisfechos.

- ¿Son muchos los cambios que plantea?

El Gobierno, y creo que el Congreso, queremos hacer unas reformas que venía madurando la sociedad colombiana desde hace 10 o 15 años, nadie se inventó nada nuevo. Desde que nació el Consejo Superior de la Judicatura se ha venido hablando de que hay que acabarlo, porque tener magistrados administrando recursos de la Rama era un despropósito. La Comisión de Acusaciones, llevamos años diciendo que no sirve para nada; la prohibición del tu me elijes, yo te elijo, ya incluso había jurisprudencia del Consejo de Estado que había que elevarla a norma constitucional prohibiendo una práctica que le hizo mucho daño a la justicia; la puerta giratoria generó también un sinnúmero de dificultades a la justicia; la eliminación de todas las reelecciones, acabamos con los todopoderosos del país, que ha sido de instituciones y no de caudillos, y restablecemos el equilibrio de poderes del Congreso y de la Justicia frente al poder presidencial.

- ¿Se mantuvo la autonomía y la independencia de la Rama Judicial?

Desafío a quien me busque una línea de la reforma que afecte la autonomía y la independencia de la Rama Judicial, no hay una sola, fue un discurso al aire, unos fuegos artificiales, un pretexto para oponerse. Ahora, que la reforma cambia la manera de administrar la justicia, creo que tenemos que hacerlo; que la reforma establece controles a los aforados en el ejercicio de sus funciones, que hoy no lo tienen, claro; que crea unos magistrados en una comisión de aforados para investigarlos, y no lo que sucedía, unos dirigentes políticos que en sus tiempos libres se dedicaban a revisar expedientes y algunos a aprender derecho, pues eso lo cambia, y es importante para el equilibrio de poderes y para que funcione bien la justicia en el país. Ahora viene una nueva etapa, la reglamentación de la ley estatutaria en la que debemos participar todos para seguir mejorando la administración de justicia.

- ¿Le queda alguna frustración?

Sí, no haber sido capaz de convencer a los congresistas de la Unidad Nacional ni a los partidos minoritarios, porque el Polo también estuvo en contra, del tóxico que significa para la democracia del país el voto preferente combinado con la circunscripción nacional. Es una figura que le hace mucho daño al sistema político, será un tema que volverá a discusión del Congreso, más temprano que tarde. Traté de sacarlo adelante, mantuvimos la criatura con respirador artificial hasta el sexto debate en la plenaria del Senado, pero luego tocó aplicarle la eutanasia y desconectarla.

Ahorros

- ¿Cómo será el desmonte del Consejo Superior de la Judicatura, que plantea la reforma?

Hay una transición, sigue funcionando en los próximos meses. A partir de cuando se promulgue la reforma constitucional habrá dos meses para que se conforme el Consejo de Gobierno Judicial, y este tendrá dos meses para nombrar a los expertos de la rama de la Administración y después otros dos meses más para que nombre al gerente de la rama. Cuando terminen los seis meses de transición desaparece la Sala Administrativa del Consejo Superior de la Judicatura y asumen el Consejo de Gobierno y la gerencia la administración de la Rama Judicial.

- ¿Qué pasará con quienes laboran con la Judicatura?

Tendrá que definirlo el Consejo de Gobierno Judicial, garantizamos los derechos de quienes están en carrera. No se trata de hacer borrón y cuenta nueva, el problema de administración de la Rama no era tanto de los funcionarios, seguramente hay mucha gente calificada, es el esquema. Se garantiza, por ejemplo, que los magistrados de las salas administrativas seccionales que estén en carrera judicial deben ser reubicados en alguna otra área de la justicia, y los empleados de carrera seguirán cumpliendo su tarea. Habrá algunos funcionarios de libre nombramiento y remoción que seguramente cambiarán. Lo más importante es que evitaremos duplicidades, lo que hacía la Sala Administrativa y lo que hacía el gerente era lo mismo, y eso generaba unos gastos desbordados.

- ¿Cuánto se ahorrará el Gobierno con ello?

No tengo la cifra, la están haciendo, y se reflejará en el presupuesto del 2016 la eliminación de la Sala Administrativa. Liberaremos plata de burocracia, no quiere decir que se le va a quitar presupuesto a la justicia, se invertirá en capacitación, en recurso humano y en tecnología.

- La reforma también plantea mayor participación de la mujer, ha sido un anhelo ver más mujeres en la política, ¿cómo garantizan que se cumpla?

Quedaron unos principios: alternancia, paridad y universalidad, es decir que podamos tener esa participación de la mujer no solo en el Congreso sino en todas las corporaciones públicas. Se trata de seguir explorando más liderazgos femeninos en la política. A esa meta se llegará con el trámite de una ley en la que se determinen las reglas para las corporaciones públicas y eso esperamos hacerlo a partir del 20 de julio.

Políticas

* Sobre la legalización de la participación política de funcionarios públicos.

“Ha sido un debate permanente, pero en el trámite de las iniciativas al final surge cierto pudor. Tenemos un tabú porque muchas veces se presta para abusos. Confieso que nunca he tenido claro cuál debe ser el camino, porque si uno abre esa posibilidad no sé si generan más oportunidades para abusar de la norma y de los presupuestos, la prohibición genera restricciones y controles”.

* Trashumancia electoral.

“Me duele y me indigna la práctica del trasteo de votos. No hay fenómeno más aberrante en materia electoral que trastear a unos ciudadanos para imponer a un gobernante que no tiene la mayoría, hay mafias dedicadas a eso que hay que combatir. No solo vamos a anular las cédulas, tenemos establecidos los 80 municipios en los que se generalizó esa práctica, especialmente en Meta y Atlántico. El mensaje para quienes hacen esto es que van a perder su platica”.

* Enfrentamientos con el superministro Néstor Humberto Martínez

“Él fue un gran apoyo para avanzar en la agenda legislativa. No tuvimos, como dicen las señoras, un sí y un no hasta que surgieron las diferencias frente al nuevo sistema de gobierno y administración de la Rama, que superamos muy rápidamente porque no eran muy de fondo”.

Víctimas

103 mil víctimas tiene Caldas, un departamento de un millón de personas, lo que representa un 10%. Hay quejas de que no tienen la suficiente atención psicológica del Gobierno para superar su problema.

“Tienen toda la razón, donde estamos más quedados en reparación a víctimas es en la rehabilitación psicoterapeútica. Esa tarea le corresponde al Ministerio de Salud, no hemos avanzado suficientemente, pero sí lo hemos hecho en restitución de tierras, en los censos, en participación; las víctimas se sienten reconocidas, entienden que son sujetos de derecho y no objetos de limosnas”.