EFE | LA PATRIA | CARACAS
Nicolás Maduro, que desestimó la acción del opositor Juan Guaidó, quien se autoproclamó el miércoles como presidente, acudió ayer al Supremo, donde los magistrados le remarcaron su respaldo, solo minutos después de que lo hicieran los militares, un sector que, según el antichavismo, representa el principal soporte de la llamada revolución bolivariana.
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino, denunció que la autoproclamación de Guaidó constituye un "golpe de Estado" y un hecho "reprochable" que atenta "contra la paz de todos los venezolanos", dijo ante periodistas y acompañado por otros altos mandos militares.
Padrino, que habló en nombre de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), acusó a "factores desquiciados" de la oposición venezolana de querer "irrumpir de una manera violenta" al propiciar un Gobierno de facto que, auguró, "no va a ser victorioso".
El titular de Defensa aseguró que los militares garantizarán la "paz ciudadana" y evitarán enfrentamientos entre venezolanos, en medio de las protestas antigubernamentales que se han desatado esta semana -casi todas de noche y en barriadas- y que han dejado unos 26 fallecidos, según cifras no confirmadas por el Gobierno.
"No vamos a tolerar hechos vandálicos o terroristas", agregó el ministro.
El mismo apoyo ofreció el Consejo Nacional Electoral (CNE) al exigir "respeto a la ley que regula los procesos" de votación del país y asegurar que Guaidó desconoce la Constitución al pretender asumir las competencias de la primera magistratura.
"En nuestro país, los cargos de representación popular son electos por el pueblo", dijo la jefa del órgano, Tibisay Lucena, al leer una declaración ante periodistas.
En tanto que el titular de la Fiscalía, Tarek Saab, condenó "la vergonzosa pretensión" de Guaidó de "dar un golpe de Estado y querer formar un gobierno paralelo al legal y legítimamente constituido", sin anunciar acciones legales contra el opositor, como ha sugerido Maduro que deben proceder los órganos de justicia.
En su pronunciamiento, Saab criticó que el Parlamento no reconozca "la legalidad y legitimidad del resto de los poderes públicos", un hecho que inició en 2016 cuando el Supremo declaró a la Cámara en desacato, pocas semanas después de que la oposición se hiciera con la mayoría de los escaños.
"Miembros de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) han venido solicitando ilegalmente la intervención de gobiernos extranjeros que son enemigos del pueblo (...) a fin de desconocer al gobierno legal y legítimamente constituido de Nicolás Maduro", dijo el fiscal al leer un comunicado ante periodistas.
Maduro aseguró que está "de acuerdo" en retomar los diálogos con la oposición, una propuesta que lanzaron el miércoles los Gobiernos de México y Uruguay.
"El Gobierno de México y el Gobierno de Uruguay han propuesto que se cree una iniciativa internacional para promover un diálogo de las partes en Venezuela (...), les digo públicamente (que) estoy de acuerdo", dijo Maduro en el discurso que ofreció ante el Supremo.
Maduro se impuso con holgura en las elecciones de mayo del 2018, a las que no se presentó el grueso de la oposición por considerarlas "fraudulentas".
Por ello, el antichavismo considera que el líder chavista "usurpa" la Presidencia ya que su segundo período de 6 años es "ilegítimo", y que por tanto el Poder Ejecutivo recae en el jefe del Parlamento hasta que sean convocadas nuevas elecciones, según la interpretación que hacen de artículos de la Carta Magna.
Pero el CNE arguyó ayer que el sistema de votaciones en el país es "transparente, confiable (y) rigurosamente verificable en todas sus fases", razón por la cual Maduro "ejerce de manera legítima" la Presidencia.
Ayer Guaidó no hizo apariciones públicas y una fuente de su equipo de trabajo dijo que está a "buen resguardo" pero mantendrá "en reserva" el lugar de su ubicación.
División
China y Rusia, países que han hecho inversiones en Venezuela y que tienen como garantía las reservas petroleras del país suramericano, expresaron su respaldo a Maduro y rechazaron toda injerencia en los asuntos internos.
EE.UU., que fue el primer país en reconocer a Guaidó como presidente de Venezuela, lo que llevó a Maduro a romper las relaciones diplomáticas, solicitó una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU para mañana sobre la crisis en el país suramericano.
Además, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, volvió a advertir a Maduro sobre cualquier decisión para "usar la violencia y reprimir una transición pacífica".
La Organización de Estados Americanos (OEA) abordó ayer la situación en Venezuela en medio de un clima de máxima tensión y división en la región, en la que 16 países, de los 34 que integran el ente, pidieron que se garantice la seguridad de Guaidó y de toda la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) venezolana, de mayoría opositora.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015