Raquel Godos
EFE|LA PATRIA|WASHINGTON
La falta de independencia judicial y la "tremenda" concentración de poder que existen en Venezuela serán difíciles de desarmar en caso de que la oposición gane a Hugo Chávez en las elecciones del próximo octubre, aseguró ayer a Efe el director para las Américas de Human Rights Watch (HRW), José Miguel Vivanco.
HRW presentó ayer un informe sobre la situación de los derechos humanos en Venezuela en los últimos cuatro años, a falta apenas de tres meses para las elecciones presidenciales que enfrentarán a Chávez con el líder de la Mesa de la Unidad de Democrática (MUD), Henrique Capriles.
"Es un enorme desafío, será necesario entonces contar con los votos por ejemplo en la Asamblea Legislativa que permitan revisar la composición de la Suprema Corte. La Suprema Corte hoy día ha sido completamente domesticada, controlada por el gobierno actual. Un triunfo de la oposición no necesariamente garantiza que la situación cambie", aseveró Vivanco.
El informe, que recoge la situación y los "abusos de poder" en Venezuela desde el 2008, resalta que en los últimos cuatro años el país ha sufrido un incremento en la acumulación de poder en el Ejecutivo, así como la eliminación de las salvaguardas institucionales y la erosión de las garantías de los derechos humanos.
El director para las Américas de HRW subrayó además el caso de la institución Conatel, encargada de regular el ejercicio y las licencias de las televisiones y radios venezolanas, que cuando no se ajustan a la agenda del gobierno son sancionadas por la entidad.
Conatel aplica una cláusula mediante la cual penaliza aquellas noticias que "causen zozobra y angustia en la población", lo que, según explicó Vivanco, deja un amplísimo margen para cancelar la licencia a cualquier medio.
"Conatel tiene la facultad de sancionar a los medios antes, incluso, de que logren entregar su información, y puede cancelar las concesiones y las licencias cuando resulte conveniente a los intereses de la nación", dijo en relación a la libertad de expresión, que según el informe cada vez está siendo más mermada.
Vivanco también advirtió de la precaria situación de las organizaciones no gubernamentales (ONG) en suelo venezolano, como la suya propia.
Debido a las restricciones impuestas por Chávez para operar en el país, los miembros de HRW no son "bien recibidos" en Venezuela, motivo por el cual el informe, titulado "Concentración y abuso de poder en la Venezuela de Chávez", no ha sido presentado en territorio venezolano.
"Una razón por las que no estamos haciendo esta rueda de prensa en Venezuela, como es práctica de HRW en todas las partes del mundo, salvo en Cuba (y otros países) es porque la Asamblea legislativa promulgó una ley específica que establece que aquellas ONG locales que inviten a un extranjero y que puedan ofender a las instituciones o autoridades venezolanas se exponen a profundas sanciones", agregó.
Según subrayó Vivanco, "el abuso de poder hoy día en Venezuela no tiene salvaguardas. No existen instituciones que puedan defender las libertades públicas".
Vivanco comparó la estrategia gubernamental de Chávez con la del expresidente de Perú Alberto Fujimori (1990-2000), debido a que ambos mantuvieron una "legitimación de origen en unas elecciones", pero luego ejercieron para "conservar una fachada democrática, con las instituciones propias de un régimen democrático pero con un control muy fuerte para mantener el éxito de la agenda del gobierno".
"No hay ninguna institución o autoridad que pueda ejercer el poder de acuerdo a la constitución política en términos independientes de lo que sean los deseos o los designios o la voluntad del ejecutivo", aseveró Vivanco, que consideró además que la "única salida a esta situación está en manos de la ciudadanía".
Los 11 partidos que buscan la reelección del gobernante de Venezuela, Hugo Chávez, y que forman parte de la alianza Polo Patriótico (PP), ocuparán la parte superior del cartón electoral que se usará en las presidenciales de octubre próximo, mientras que la oposición lo hará en la inferior.
El portavoz de la alianza Mesa de la Unidad Democrática (MUD), el diputado opositor Juan Carlos Caldera, dijo a los periodistas que así se decidió en el Consejo Nacional Electoral (CNE) y que para ello se tomó en cuenta la cantidad de votos obtenidos en elecciones precedentes.
La MUD, integrada por 22 partidos y otras organizaciones que apoyan al candidato de unidad de la oposición, Henrique Capriles (foto), ocuparán la parte inferior de la papeleta, en la que figuran las organizaciones políticas que individualmente han manifestado su apoyo a un candidato.
La elección de los lugares dejó su cuota de controversia debido a que, según el portavoz de la MUD, el representante de uno de los partidos opositores, denominado Va Pa'lante, escogió figurar en la parte superior de la papeleta electoral, lo que fue impugnado por la alianza chavista.
Según las encuestas, Chávez aventaja a Capriles con un margen que oscila entre 5 y 30 puntos porcentuales de cara a las elecciones de octubre, en las que alrededor de 19 millones de venezolanos decidirán al presidente que dirigirá el país entre 2013 y 2019.
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