Estados Unidos vive nueva ola de tensiones raciales

 Los disturbios y protestas de más de una semana en Ferguson, Missouri, y en otras ciudades de Estados Unidos, por la muerte de Michael Brown, un joven afroamericano de 18 años de edad, han puesto en evidencia la persistencia de las tensiones raciales en la sociedad estadounidense.

La declaración de un toque de queda, decenas de arrestos, enfrentamientos violentos entre manifestantes y policías, lanzamiento de bombas Molotov, saqueos, cientos de heridos y el despliegue de la Guardia Nacional hicieron recordar los disturbios ocurridos en 1992 en Los Angeles por la golpiza que un grupo de policías propinó al ciudadano afroamericano Rodney King.

Veintidós años después, Brown, quien estaba a unos días de comenzar la escuela técnica, murió en Ferguson el 9 de agosto tras ser baleado supuestamente por el oficial de policía Darren Wilson.

La segunda autopsia practicada al cadáver de Brown, a petición de su familia, mostró que recibió seis disparos. Los hallazgos del forense también indican que al parecer el joven, ya herido, se había rendido pero aun así recibió dos tiros en la cabeza.

La población reaccionó a la muerte del joven y a lo que consideró falta de transparencia de las autoridades sobre los hechos con manifestaciones que pronto se volvieron violentas.

DOS VERSIONES

Existen dos versiones del tiroteo que ha generado tantas tensiones y ha reavivado el debate racial en Estados Unidos. La policía de Ferguson acusó al joven, quien iba desarmado, de robar en una tienda antes de que el oficial Darren Wilson le disparara.

En un informe de la policía obtenido por Xinhua se indica que Wilson no tenía antecedentes disciplinarios y que respondió a una llamada al servicio de emergencias realizada desde una tienda donde se encontraba Brown en compañía de un amigo.

Después de una búsqueda de dos horas, Wilson encontró a Brown y a su amigo. Uno de los dos jóvenes trató de tomar el arma del oficial de policía mientras era subido al vehículo. Luego hubo un breve forcejeo y Brown empezó a correr. El vocero de la policía indicó que el oficial disparó a Brown a unos 10 metros del vehículo.

De acuerdo con la segunda versión, presentada por los testigos, el forcejeo comenzó cuando Wilson se encontraba dentro del auto. Después, los jóvenes afroamericanos salieron corriendo y cuando Brown escuchó los disparos se puso de rodillas para rendirse, pero fue abatido por el oficial.

FERGUSON, UNA CIUDAD DE CONTRASTES

Ferguson es una ciudad que tiene cerca de 21.000 habitantes. En su mayoría, 60 por ciento, son afroamericanos, pero las principales autoridades y prácticamente todos los oficiales de policía locales son blancos. Esto ha generado un clima de tensión constante, agravado por las detenciones recurrentes de que son objeto los jóvenes afroamericanos.

Además, los índices de pobreza y desempleo entre la población negra son superiores a los de la gente blanca. Cerca de 47 por ciento de los hombres afroamericanos de entre 16 y 24 años de edad están desempleados o carecen de oportunidades de estudio. En contraste, el porcentaje del mismo grupo de edad de la población blanca es de 16 por ciento.

RESPUESTA DE OBAMA

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, encargó al Departamento de Justicia y al FBI la indagatoria sobre la muerte de Michael Brown. Las dos instancias trabajarán de forma paralela a las autoridades locales. Además, decidió enviar al fiscal general Eric Holder para que encabece la investigación federal.

Holder dijo que utilizará todos los recursos disponibles en su departamento para esclarecer los hechos. Incluso se tiene previsto realizar una tercera autopsia al cuerpo del joven.

Obama declaró que aunque entiende "las pasiones y la ira a raíz de la muerte de Michael Brown, ceder a esa ira saqueando o portando armas e incluso atacando a la policía, sólo agrava las tensiones y provoca el caos. Socava, en lugar de promover la justicia".

El presidente enfatizó el respeto a la libertad de expresión, reunión y prensa y se pronunció en contra del uso excesivo de la fuerza por parte de la policía. Además, se refirió a la desconfianza que existe entre los residentes locales y las autoridades de seguridad.

Éste es el segundo incidente racial que enfrenta la administración Obama. En febrero de 2012, Trayvon Martin, un adolescente afroamericano, murió en el estado de Florida a causa de los disparos hechos por un vigilante vecinal, George Zimmerman, quien fue absuelto del cargo de asesinato. En ese entonces, Obama dijo que "si hubiera tenido un hijo, sería como él... Trayvon Martin podría haber sido yo hace 35 años".

PIDEN MODERACIÓN A ESTADOS UNIDOS

Egipto exhortó a las autoridades de Estados Unidos a que ejerzan la moderación en el manejo de las protestas en Ferguson. "El Ministerio de Relaciones Exteriores egipcio está siguiendo de cerca la escalada en Ferguson y pide a las autoridades estadounidenses que traten a los manifestantes de acuerdo con los estándares internacionales", señaló el vocero egipcio, Badr Abdel-Aati.

El secretario general del Consejo de Europa, Thorbjorn Jagland, también expresó su preocupación por el uso de una fuerza policial "excesiva" en Ferguson.

"Estoy preocupado... por el reportado uso excesivo de la fuerza por parte de la policía en contra de manifestantes pacíficos y por su arresto, incluyendo el de periodistas que cubrían los eventos", indicó.

Karin Wang, vicepresidenta de Asian Americans Advancing Justice, la mayor organización para la defensa de los derechos civiles y legales de asiático-estadounidenses, hawaianos nativos e isleños del Pacífico de Estados Unidos, dijo a Xinhua que las minorías de Estados Unidos deben hacer oír su voz. Sólo así se podrá impedir que la policía realice su labor a partir de perfiles étnicos.

De acuerdo con Wang, Los Angeles está más diversificada y la policía aprendió la lección de los disturbios de 1992. Desde entonces, la policía de las diferentes ciudades tiene programas de proximidad con las comunidades locales para reducir las tensiones y buscar el entendimiento mutuo entre los agentes del orden y los grupos étnicos.

Sin embargo, también señaló que la policía abusa de los integrantes de las minorías que padecen problemas mentales o que no entienden el inglés.