Ejército sirio propina un duro golpe a los rebeldes de Guta Oriental

EFE | LA PATRIA | El Cairo

Las fuerzas gubernamentales sirias asestaron hoy un duro golpe a los rebeldes del enclave de Guta Oriental, a las afueras de Damasco, dividiendo en dos el bastión opositor y aislando su principal población, Duma, del resto de las zonas que aún controlan las milicias islamistas.

Según la ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos, las tropas leales al presidente sirio, Bachar al Asad, han aislado las localidades de Duma, Harasta y las granjas de Al Rihan del resto de Guta Oriental, objetivo de una ofensiva militar del régimen sirio.

El Observatorio precisó que, además, los soldados, que cuentan con el apoyo de Rusia, consiguieron cortar las comunicaciones entre Duma y Harasta tras tomar de manera efectiva gran parte del territorio que separa ambas localidades y de tener el resto de las zonas al alcance de su armamento.

De esta manera, estas dos localidades quedan aisladas entre ellas y del resto del enclave, del que las fuerzas islamistas armadas controlan menos del 50 por ciento.

La agencia oficial de noticias SANA informó de que el Ejército sirio logró hoy nuevos avances contra los rebeldes, a los que denomina "terroristas".

SANA indicó que las tropas avanzaron por los alrededores de la localidad de Mesraba, al sur de Duma y en las granjas de Afatris. Asimismo, agregó que las operaciones militares se centran en el frente de Mesraba y Madira, una población cercana a la primera.

La agencia siria también indicó que las tropas del Ejército siguen manteniendo un corredor para la salida de civiles y denunció que las fuerzas rebeldes mataron a una mujer y a tres niños que intentaban salir de las zonas cercadas por el régimen.

Estos avances se han producido en medio de "intensos combates" entre las fuerzas leales a Damasco y la facción islamista Ejército del Islam, que han estado acompañados de bombardeos aéreos.

Según la ONG, desde el 25 de enero al menos 146 soldados progubernamentales han fallecido, así como 118 milicianos de las facciones islamistas.

Desde entonces, Guta Oriental sufre una ofensiva terrestre del Ejército sirio y de sus aliados, que previamente aumentaron sus bombardeos y disparos de artillería en una escalada que se ha cobrado la vida de un millar de personas, de acuerdo al Observatorio.

Por otra parte, en el enclave kurdo de Afrín, en el noroeste de Siria, y controlado por la milicia kurdosiria Unidades de Protección del Pueblo (YPG), el Ejército turco y las facciones opositoras sirias aliadas de Ankara se hicieron hoy con el control de nueve poblaciones y se situaron a las puertas de Afrín capital, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Según la ONG, las fuerzas turcas ya dominan casi el 38% del total de los pueblos de Afín, entre ellos cinco localidades importantes: Yindiris, Rayu, Al Sheij Hadid, Sharran y Bolbola.

Con este nuevo avance, aumenta a 130 el número de localidades controladas por las fuerzas turcas desde el inicio de la operación militar denominada "Rama de olivo", que arrancó el 20 de enero.

El Observatorio agregó que han continuado los intensos combates entre las fuerzas turcas y sus aliadas contra la milicia kurdosiria YPG en las afueras del noreste y noroeste de Afrín, así como en el este y suroeste de la ciudad en un intento de cercarla por completo.

Tras el nuevo avance, las fuerzas turcas y opositoras sirias están solo a "unos cientos de metros" de la entrada noreste de Afrín, tras haberse hecho con el control de la cercana colina de Quibar.

Según la ONG, al menos 12.000 personas originarias del enclave kurdo de Afrín, han huido de los combates desde el comienzo de la ofensiva y unos 205 civiles han fallecido, entre ellos 32 menores.

Desde el inicio de la ofensiva, al menos 409 combatientes de la operación "Rama de Olivo", como Ankara ha denominado el ataque, han muerto, entre ellos 71 soldados turcos, dijo el Observatorio.

Además, 359 milicianos de las YPG, entre los que hay un español, han perecido, así como 81 de las fuerzas de Defensa Popular, milicias progubernamentales sirias que han acudido a defender Afrín del ataque turco, tras un acuerdo entre el Gobierno de Damasco y las milicias kurdosirias.