Brasil seguirá negociando con Rusia la adquisición de unos sistemas de defensa antiaérea para sus Fuerzas Armadas, operación calculada en unos 1.000 millones de dólares y en discusión desde hace más de tres años, informaron hoy ambos países.
La decisión de mantener las negociaciones fue plasmada en un documento firmado por ambos Gobiernos en el marco de una reunión de trabajo sostenida hoy en Brasilia por la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, y su homólogo ruso, Vladimir Putin.
La operación se refiere a la posible adquisición, por parte de Brasil, de cinco baterías de misiles antiaéreos rusos, tres del tipo Pantsir-S1 y dos del tipo Igla.
Además, se incluirían los correspondientes vehículos auxiliares y armamento completo, que supone una dotación de misiles tierra-aire y cañones de 30 milímetros.
En el marco de la visita de Putin también fueron firmados otros siete acuerdos en las áreas de comercio e inversiones, educación, cooperación energética, gas, salud y ciencia y tecnología.
En un pronunciamiento junto a Putin, Rousseff destacó el acuerdo en el área de comercio e inversiones mutuas, sobre el cual dijo que permitirá alcanzar el objetivo de ambos Gobiernos de duplicar en un medio plazo el intercambio bilateral, que en 2013 llegó a 5.560 millones de dólares.
Tras la reunión de trabajo, Rousseff y Putin almorzaron junto a las delegaciones de ambos países y luego tenían previsto viajar a la ciudad nororiental de Fortaleza, donde mañana participarán en la VI Cumbre de los BRICS, grupo que ambos países integran junto con China, India y Suráfrica.
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