Los aciertos y desaciertos del pacto de reactivación económica de la Alcaldía de Manizales

MIGUEL ORLANDO ALGUERO

LA PATRIA | MANIZALES

Luego de los bombos y platillos del pacto de reactivación económica que firmó la Alcaldía de Manizales, llegan los cuestionamientos, aciertos y dudas a este documento técnico que expone las necesidades de la ciudad en plena pandemia. Eso incluye las obras, proyectos, inversiones y fuentes de financiación para recuperar el tejido social y empresarial.

Los expertos consultados aplauden la iniciativa de la Administración porque intentaron una conversación entre gremios, universidades, movimientos sociales, empresarios y políticos. Sin embargo, hay metas poco claras o viables.

Articulación

Alejandro Barrera Escobar, economista y profesor de la Universidad de Manizales, en su columna Comentarios al pacto por la reactivación de Manizales, menciona que dicho plan empieza con una narrativa de pactos con aliados y fuerzas vivas de la ciudad, con una intención participativa y de trabajo colectivo y articulado.

"Es quizás lo que muchos denominan la 'carreta', que se piensa como un tema obvio, pero en la realidad no se genera. Todavía existen egos institucionales, donde la foto es fundamental, pero hace falta mayor diálogo entre sectores".

En la línea de articulación, Camilo Vallejo Giraldo, gerente de la Corporación Cívica de Caldas, ve como positivo que se busque sincronizar el Plan de Desarrollo 2020-2023 con el pacto de reactivación, como una forma de responder a la coyuntura a través del ordenamiento urbanístico, espacio público y medios de transporte alternativos, como la bicicleta.

"Eso habla bien de este pacto y es una forma de planeación de la ciudad a corto plazo".

Metas

En el componente de metas, Barrera Escobar puntualiza que la de empleo es muy ambiciosa y retadora (llegar al 2024 con más de 205 mil empleos). "Se comprende que sirven de movilización y motivación sistémica de los actores y grupos, pero empíricamente requerirá suerte. Lo más cercano a dicha meta fue entre mayo y diciembre del 2015, con un máximo de 196 mil empleos y entre junio y diciembre del 2017 con 193 mil ocupados".

Para el economista, ese cumplimiento está en el pilar de Fortalecimiento del ecosistema empresarial, porque son las empresas quienes más generan empleo, participando con el 68,1% en 2021; 52,7% en 2022 y 64,6% en 2023, donde el acceso a financiamiento, la transformación productiva y el emprendimiento generarían el 71% de empleos en tres años.

"Es normal que eso suceda, pero como es una macrometa no son claros los microrresponsables. Dependerá de lo que se dé entre los convenios de la Alcaldía con otras entidades y que se exijan resultados materiales de empleo y no un simple indicador de que se hizo tal programa o convocatoria".

Precisa que muchas propuestas plasmadas en el pacto ya se realizan en la ciudad desde por lo menos 10 años. ¿Cómo exigirán resultados de impacto, si a muchos de esos programas les ha costado generar empleo a corto plazo?, se pregunta. "La tienen dura y ellos confían en que se repita el buen periodo económico del 2012 - 2015, pero sin claridad en los detonadores para lo que viene".

Obras

El economista cataloga este pacto como un Plan de Desarrollo versión dos porque de proyectos estratégicos, como la línea tres del Cable Aéreo, la PTAR y la Ciudad Universitaria, se habla desde hace tiempo y representan el 60% de la torta de la inversión.

"Se la están jugando por la ejecución del desarrollo urbanístico, dejar su sello y no está mal. Lo que se debe tener claro es que la ciudad ya venía discutiendo esas obras, había alivio tributarios y programas empresariales, no es algo nuevo como lo quieren hacer ver".

También le preocupa que se miren estas obras como una reacción a la coyuntura a corto plazo y no se tenga en cuenta la de largo plazo. "Tener la visión a 15 y 20 años es pensar en competitividad y desarrollo de los sectores de la economía, para que sean detonantes de crecimiento. Jugársela por estas grandes obras, pero desconocer sus impactos a largo plazo es un riesgo. Dudo de que ese impacto y esa derrama económica sea como ellos lo mencionan con base en lo que nos ha mostrado la pandemia".

Siguiendo en esta misma línea, al gerente de la Corporación Cívica de Caldas también le preocupa que la Administración no haya logrado los apoyos necesarios del Gobierno nacional para sus proyectos estratégicos.

Sobre el Cable Aéreo

Camilo Vallejo sostiene: "Al no tener apoyo nacional, obligó a los proyectos a depender de reforma del Estatuto Tributario, que es el peor escenario en pandemia. Recurrir a deuda pública, que es impopular en los sectores políticos; y a vigencias futuras, que es lo más común. Presentar estos proyectos de acuerdo para subir impuesto y endeudar a la ciudad en una pretemporada electoral será complejo".

Agrega que tanto la tercera línea del Cable como la Ciudad Universitaria impactarán la movilidad, pero no es claro cómo serán estos dos proyectos con un Sistema Integrado de Transporte. "El Municipio está tomando un riesgo alto con estas políticas de movilidad porque no sabemos si el Sistema Integrado las potenciará u obstaculizará más tarde".

No obstante, Vallejo Giraldo ve como un acierto que el plan de obras no tenga como foco el vehículo particular, sino las intervenciones en el espacio público que tiene como centro a los peatones y a las bicicletas. "Es una propuesta interesante que articula la reactivación con el mejoramiento de la calidad de vida"

Asegura que a la Alcaldía le ha faltado claridad a la hora de explicar estos proyectos a la ciudad, en especial a los sectores más interesados como los transportadores, que no los han tenido en cuenta".

Sí y no

Para el economista Juan Martín Dussán, los proyectos son adecuados y necesarios para la ciudad, menos la línea tres del Cable por las dudas de financiarlo. "Estas obras y programas no son nuevas, ya estaban en el POT del 2017 y en el Plan de Desarrollo 2020-2023, con pacto o sin pacto se debían ejecutar. Lo que hace el alcalde es meter todo en una misma bolsa para aprobar a pupitrazo en el Concejo los recursos para el Cable, porque necesitan esa plata, es una forma de camuflaje. Si uno quita el Cable del pacto, no habría que pedir un crédito tan alto y sobraría plata".

Indica que al 2023 la deuda de la ciudad crecerá en un 60% con el empréstito de $125 mil millones que cursa en el Concejo y quedará al límite de su máximo de sostenibilidad, que es saldo total de la deuda sobre ingresos corrientes. "Esto es una advertencia porque no es seguro que aumenten los ingresos corrientes y la próxima Alcaldía no se podrá endeudar más y si los ingresos bajan se podría entrar en ley de quiebra".

Otras consideraciones

Alejandro Barrera Escobar, economista y profesor de la Universidad de Manizales:

Es meritorio el pilar de Alivios tributarios, en especial lo referente al no cobro de industria y comercio a micronegocios. Será un respiro a las unidades más vulnerables y posiblemente favorezca su permanencia, pero no hay ninguna mención a una mejora en el plan de vacunación local y metas, por ejemplo, de superar la velocidad de vacunación del promedio nacional o estrategias en ocupación UCI. Al Concejo de Manizales hay que pedirle una revisión juiciosa y ágil de la viabilidad técnica-financiera de los proyectos, desde la responsabilidad de planificación de la ciudad.

Camilo Vallejo Giraldo, gerente de la Corporación Cívica de Caldas

Hay "mala leche" de ciertos sectores políticos al decir que esta Alcaldía quitará un carril de la Santander, cuando es un son propuestas de alcaldías anteriores. Se presenta un dilema: los gremios y la sociedad civil piden reactivación, pero a la par no quieren que el Municipio se endeude. Hay que encontrar un punto medio. La Alcaldía presentó este pacto con un mensaje de pulso político con sus críticos, como "todo o nada". Como pulso tiene varios riesgos. Uno partidista con el Concejo y otro técnico, esto hará que los estudios sean las armas y no las luces del debate.

Juan Martín Dussán, economista y asesor de desarrollo económico

Teniendo en cuenta los pilares, en obra pública cada empleo que se genera costaría $110 millones; por alivios tributarios, $460 mil cada puesto de trabajo; y del ecosistema empresarial costaría $3 millones 300 mil, y sin el crédito de Bancoldex ($26 mil millones), bajaría a $2 millones. Hay que precisar que esa línea de crédito es para subsidiar la tasa de interés y dar garantías a las empresas, pero al final los empresarios tienen que pagar. La evidencia ha mostrado que esa estrategia es para mantener los empleos que hay y no para generar nuevos. El pacto dice nuevos, pero lo dudo.

Pilares

El pacto tiene una inversión total de $788 mil millones en los siguientes tres años, con el fin de generar 34 mil empleos.

1. Alivios tributarios

$3 mil 640 millones para beneficiar al 37% de las empresas de la ciudad. Exoneración en industria y comercio para comerciantes, cero sanciones, descuento del 12% por pronto pago en predial.

2. Fortalecimiento del ecosistema empresarial

$70 mil millones, se beneficiarán 5 mil empresas. Serán 15 programas de financiamiento y acompañamiento con focos de inversión: femenino, ciudad inteligente, creativas y culturales, mesas de competitividad, y economía circular, negocios verdes y turismo, con 4 ejes: transformación productiva, emprendimiento, financiación y enganche laboral.

3. Inversión en obra pública

$713 mil millones para generar 6.503 empleos. Estas obras están clasificadas en cuatro grupos. Están las denominadas proyectos detonantes con una inversión de $480 mil millones que garantizarán la sostenibilidad de la economía a mediano plazo. Segundo, las pequeñas grandes obras o complementarias por $193 mil millones. Las obras a demanda como el mantenimiento vial con $36 mil millones. Obras de intervención barriales por $3 mil millones.

4. Ajustes institucionales

$400 millones para facilitar la actividad económica. Se reducirán trámites, fortalecimiento de empresas para que sean proveedores del Estado, aplicación de instrumentos de política para facilitar la actividad de sectores.