LA PATRIA | MANIZALES

Julián es tan hábil para los cuchillos como para los revólveres, dicen quienes lo conocen. Cualquiera se le viene bien a la hora de ajustar las cuentas pendientes, añaden.

El sujeto entró al radar de las autoridades en el 2011, cuando un juez lo condenó a un año y un mes por hurto calificado, tras hallarlo culpable de robarle a un tercero con arma blanca, en el barrio El Paraíso.

Un año después de esa condena, y nuevamente en ese barrio, Julián, con un arma de fuego, le disparó a Jhonatan Estiven Jurado Morales. Lo dejó tendido en vía pública tras varios impactos de bala. 10 años de prisión fue la pena que le dio el Juzgado Séptimo Penal del Circuito de Manizales, por homicidio y porte ilegal de armas de fuego. Su segunda estadía en la cárcel duró cuatro años, cuando un juez de ejecución de penas le concedió la prisión domiciliaria en el 2018.

Pese a estar en su residencia y aunque tenía permiso para trabajar, Julián se movía a sus anchas por las calles de Manizales, especialmente las de Comuneros. Se hizo a otra arma de fuego para protegerse de sus enemigos, quienes querían venganza por el muerto de siete años atrás. Se sentía perseguido.

Siguió

La prisión domiciliaria no fue problema para que Julián, nacido hace 30 años en esta ciudad, cometiera dos nuevos hechos de sangre en el 2021.

En uno la víctima vivió para contarlo, pese a las nueve puñaladas que le propinó, en compañía de un compinche. Fue en la noche del 21 de marzo, cuando se desplazaba por el barrio La Cumbre. Con patadas y puñal trataron de quitarle la vida. Pese a las múltiples heridas, la víctima sobrevivió.

Siete meses después, cuando sintió que sus enemigos le respiraban muy cerca por el muerto del 2014, decidió adelantárseles. El 21 de septiembre, sobre las 11:30 de la mañana, el sector de El Nevado, cuando el flujo vehicular era constante, los niños salían de las escuelas y los talleres del sector estaban abarrotados de motos y clientes, desenfundó un arma y sin temblarle la mano se le acercó a Martín Felipe Jurado y le propinó tres disparos en la cabeza.

La víctima no tuvo tiempo de mirar hacia atrás cuando su atacante le llegó. Huyó del sitio en un carro que le esperaba más adelante. Al conductor lo agarraron ese día.

Audiencia

El actuar criminal de Julián, al parecer, llegó a su final. Al menos por un tiempo. Un Fiscal de la Unidad de Vida de Manizales reunió las pruebas suficientes y lo judicializó por estos dos casos de este año.

Le imputó cargos por tentativa de homicidio agravado, por las nueve puñaladas del mes de marzo, y de igual forma por homicidio agravado en concurso con porte de armas de fuego, de hace 20 días. En ninguno aceptó cargos. A petición de la Fiscalía, un Juez con Función de Control de Garantías le impuso medida de aseguramiento en centro de reclusión.