Arte oculto en la montaña: obras de Guillermo Vallejo

LISET ESPINOZA

LA PATRIA | Manizales

Mundos paralelos es un trabajo que elaboró el artista Guillermo Vallejo y que exhibió en el 2008 sobre la Avenida Santander de Manizales. La obra conformada por 52 esculturas llamó la atención en ese entonces no solo por estar expuesta en la principal vía de la ciudad, sino también por el tamaño y los llamativos colores de las figuras.

12 años después, las piezas se mudaron de lugar y tomaron otro tono, pues los colores se mezclaron con el verde de la montaña que conduce a la residencia de Vallejo y la humedad, la exposición al sol y al agua, más otros factores ambientales, hicieron de las suyas provocando que el arte se mantenga oculto en medio de la vegetación que abunda en el lugar.

“Tengo todas las obras que estaban sobre la Santander menos nueve. Ocho de ellas están en el Teatro Azul de Armenia, en donde hice una exposición, y otra la tiene un amigo”, expresó Vallejo mientras señalaba una Manuela Beltrán y una Rosalía Santos cubiertas por una amplia capa de musgo.

Otro mundo

El autor recordó que las obras se instalaron allí por petición del entonces alcalde Juan Manuel Llano. Los moldes fueron pintados y pegados con fibra de vidrio y el pago por el alquiler de cada escultura era de $150 mil mensuales. Sin embargo, después de un tiempo, las obras requerían de mantenimiento y por ello, el autor se las llevó para su casa y desde entonces conviven con la naturaleza.

El ataque biológico en ellas es evidente y perceptible. Es decir, hay presencia de algas, musgos y líquenes que han alterado el estado original de las esculturas, pero no han camuflado la belleza artística de las mismas. “Parece que hubieran sido concebidas así”, entonó el artista, quien a diferencia de otros expertos, no utilizó ninguna técnica para crear ese efecto, simplemente dejó que el ecosistema se mutara en ellas.

Datos

*Las obras fueron desmontadas en el 2011

*$307 millones fue el costo de la obra. La distribución fue así: $130 millones por el componente artístico (obras), $68 millones por los pedestales (elementos que sostenían las esculturas) y $109 millones por la instalación, transporte de las figuras y cimentación de los pedestales.