Clovis Velásquez en el homenaje que recibió ayer en la Plaza de Toros de Manizales.

Foto | Darío Augusto Cardona | LA PATRIA

Clovis Velásquez en el homenaje que recibió ayer en la Plaza de Toros de Manizales.

PREGONERO | LA PATRIA

Clovis Velásquez nació en Tibaná (Boyacá) y cumplió 34 años siendo picador profesional en los festejos taurinos en Colombia, Venezuela, Perú, Panamá y Ecuador. Ayer puso sus últimas varas integrando la cuadrilla del peruano Andrés Roca Rey. También recibió un homenaje por toda la Plaza de Toros de Manizales en el día de su retiro.

LA PATRIA tuvo la oportunidad de hablar con él para conocer más sobre su trayectoria. Según cuenta, el toro en su vida significa lo mejor.

¿Cómo se inició como picador?

Soy de un pueblo que se llama Tibaná, en Boyacá, pero me trajeron muy pequeño a vivir a Mosquera (Cundinamarca) y me crie por los alrededores de la finca de Mondoñedo. En los tentaderos iba a ver torear y luego me entró esa afición de las corridas. A los 14 años, para entrar a la Santamaría en Bogotá, me iba con los caballos de picar. Posterior a eso, les comenté a Ánderson Murillo y a Freddy López, que para ese entonces ya estaban picando, que me enseñaran, que quería ser picador, y me empezaron a llevar a los tentaderos.

¿Por qué picador y no torero o banderillero?

Porque desde pequeñito he sido gran aficionado a los caballos. Entre 1979 y 1985 no quise nada de ser picador y me fui a correr caballos al Hipódromo de los Andes. Duré seis años allá hasta que lo cerraron y volví a los toros.

¿En qué ganaderías trabajó?

Trabajé en Vistahermosa cuando era de Francisco García, y en Pueblito Español.

¿Cómo ha sido su experiencia como picador?

La experiencia ha sido buena. Empecé con Ánderson Murillo tentando y luego me afilió a la Unión de Toreros de Colombia (Undetoc), me consiguió la ropa porque no tenía dinero para comprarla y me metió de picador. Cuando me afilié había muchas corridas nivel nacional. Como era plaza de segunda, Murillo me hacía poner como reserva y ahí empecé a picar.

¿Al servicio de qué toreros ha estado en todo este tiempo?

He estado de servicio con todas las figuras, como Joselito, Enrique Ponce, el Juli cuando era novillero, con Roca Rey cuando empezaba a venir como novillero y hasta el año pasado le picaba a él. De los colombianos empecé en la época en que la figura era Gitanillo de América, estuve con César Rincón, con el Cali y con Jorge Herrera.

¿Qué siente ahora que tiene que dejar esta vida de picador?

Le da a uno nostalgia y mucho sentimiento. Me siento preparado para continuar picando, pero ya por la edad ya no me dejan.

¿Qué les ha dado el toro a usted y a su familia?

Todo el futuro de mis hijos, la educación, todo. He vivido del toro, todo lo que tengo lo he sacado de ahí, porque he tenido mucha suerte, he toreado bastante, he ganado dinero y lo he sabido aprovechar.

¿Cuál es el futuro que le ve a la fiesta de los toros?

La veo muy complicada, ya se está como reactivando, pero tenemos muchos enemigos y está complicado.

El dato

La primera vez que se vistió con el traje de luces fue en una feria en Sogamoso (Boyacá). Salió a picar como reserva y en el primer turno estaba Pepe Cáceres. "Pepe me llevó al toro para que lo picara, el primer toro que piqué fue Monín, el que le pegó la cornada y lo mató", indicó Clovis Velásquez.