En Toros y Ciudad: Tarde de ritmo y alegría

LA PATRIA | Manizales

“El toro fue de menos a más y pude disfrutar lo que hice”. Lo dijo el joven torero paisa Luis Miguel Castrillón, en medio de una sonrisa inconfundible que contaba por sí sola su éxito con el segundo toro de la tarde de ayer, en la corrida de cierre de la XXII Feria de Toros y Ciudad.

Tras una faena honesta, larga y meritoria, Luis Miguel indultó, por petición del público, a Jornalero, de 446 kilos del hierro local de Ernesto Gutiérrez.

El encierro, dentro de los típico, tuvo visos de bondad y otros ejemplares estuvieron distraídos y limitados en la casta. El quinto fue más que los otros, pero el segundo le caló más al público asistente. No obstante, la tarde aclaró, como el mismo cielo, el sol se asomó y el público presente de disfrutó completamente una tarde que tuvo música y una gran cuota de alegría y emoción.

Valor

Los toreros Sergio Blanco y David Martínez lograron una oreja, cada uno. La lucharon, la sintieron y entregaron lo mejor de sí. El listón había quedado muy en alto desde el segundo, con el indulto, pero Sergio, en el tercero, no se intimidó y se acercó más de la cuenta. “Quise hacer lo que para mí es el toreo puro: pecho; por delante y torear por debajo”, contó Sergio . David, por su parte, con su componente de banderillero, logró aumentar la temperatura de los tendidos. Castrillón, Martínez y Blanco pueden tener méritos para ser tenidos en cuenta, eventualmente, para la temporada de enero.

Mala suerte

Santiago Naranjo, torero local que abrió la tarde, tuvo mala suerte con la espada. Finalmente, el público le reconoció sus esfuerzos. Franco Salcedo puso todo en la arena; recibió al toro con los largas cambiadas y fue el más colorido con el capote. Su espada le valió la mejor estocada de la tarde. Sebastián Cáqueza tuvo unas de cal y otras de arena. No se dejó apagar por la fatiga de la jornada y, aunque falló en el último tercio, demostró que tiene fundamentos.

La novillada

Poco o nada hay que contar de la novillada. La ganadería de Paíspamba trajo a Manizales un encierro que careció completamente de casta, pese a la buena presentación de los ejemplares. Muchos de los participantes perdieron un poco la paciencia ante la dificultad de las circunstancias. Pese a todo ello, por momentos demostraron que su alma de novillero los lleva a tener un arrojo amplio y querer comerse el ruedo. Se destacaron las ganas de Simón Hoyos, Mikel Ramírez y Eduardo Contreras.

Observaciones:

* Lamentable el desempeño del puntillero en ambos encierros.

* El inspector de plaza debe prestar más atención a los elementos propios de la fiesta. No está bien visto, ni es seguro, que el público reciba las banderillas en los tendidos.

Triunfadores

Mejor novillero: Desierto

Mejor torero: Luis Miguel Castrillón

Mejor estocada: Franco Salcedo

Mejor ganadería: Ernesto Gutiérrez

Sergio Blanco hizo una buena exhibición de capa.

David Martínez volvió a emocionar los tendidos con su presentación en banderillas.