El paisaje y la rutina cambiaron por la covid-19 en Manizales

FREDDY ARANGO

LA PATRIA | MANIZALES

Los manizaleños completan hoy 17 días de confinamiento debido al toque de queda, decretado por la Alcaldía de Manizales, y a la cuarentena obligatoria, por el Gobierno Nacional.

Estas medidas cambiaron el panorama de las calles y lugares de la ciudad. En varios recorridos que se realizaron la semana pasada, LA PATRIA recogió este material gráfico sobre cómo el coronavirus ha impactado en las rutinas de los ciudadanos, empresas, entidades públicas y  la vida nocturna.

Fotos/Freddy/Arango/LA PATRIA

De la calle al balcón, ninguna excusa para dejar de entrenar en esta cuarentena. Así se evidencio esta semana en el sector de Los Cerezos.

La típica imagen de las manos al desgranar los frijoles en el sótano de La Galería cambió, ahora están cubiertas por los guantes, que se volvieron un artículo de primera necesidad para evitar el contagio del virus.

Se efectúan controles en La Cabaña, donde se les pregunta a los conductores para donde van y a qué.

El sube y baja de los restaurantes, a puerta cerrada y solo a domicilios es la forma de despachar los alimentos.

De a uno es mejor: eso indica este aviso en una agencia de envíos de mensajería en la carrea 22. 

El párroco Germán Álvarez de la iglesia Espíritu Santo, del barrio El Guamal, sale a recorrer las calles en medio de la soledad, y bendice a los feligreses.

Así toman la temperatura a los conductores y campesinos en la Terminal Mixta de Manizales.