26 años de intentonas contra Barco y Yepes

LA PATRIA | MANIZALES 

Por lo menos 26 años duró la lucha de movimientos políticos para tomar el poder en la Gobernación y la mayoría de alcaldías en los municipios de Caldas. Desde 1987 se gestó el contrapeso a la coalición de Víctor Renán Barco y Ómar Yepes.
Aunque hay un antecedente importante en Manizales con la creación en 1982 de la Corporación Cívica, promovida principalmente por empresarios, luego de los escándalos del llamado Robo a Caldas para ayudar a vigilar los recursos públicos, su capacidad para hacer frente a las maquinarias era mínima.
Por este motivo, la historia de cambio se inicia cuando se ve la posibilidad de alcanzar el poder no por nombramientos, sino en las urnas. En 1987, en La Dorada, ganaderos inconformes porque Barco les había incumplido algunos pactos, se alían con el narcotraficante Jairo Correa Alzate y crean el movimiento Paz, Progreso y Cultura (PPC) para hacerle  contrapeso al denominado senador estrella.
Wadis Echeverri Correa, poeta y quien militó en el movimiento, expresa que empezaron a llegarles a las personas con cultura y poesía y con la idea del movimiento de Los alzados en almas. Su sede era una casa que fue pintada de verde y se ubicaba en el centro del puerto caldense.
"Las concentraciones eran gigantes. La gente nos seguía y la ola se estaba regando por el Magdalena Medio y por el país. Todos los cansados de esa hegemonía se nos unieron y el movimiento cultural era grande", comenta Echeverri.
Un año después de la creación del PPC se estableció la elección popular de alcaldes y gobernadores -antes lo hacían por decreto el presidente y los gobernadores-.
Así nace formalmente, para aspirar a cargos de elección popular, la coalición Barcoyepista, junto con Luis Guillermo Giraldo (33% para cada uno), con la cual estos caciques deciden alternarse el poder en la Alcaldía de Manizales y, posteriormente, en la Gobernación de Caldas. Retirado Giraldo, quedan Barco y Yepes con el poder para decidir sobre los puestos burocráticos en entidades como la Licorera y la Chec, nada se mueve sin su consentimiento y su coalición es llamada también un pequeño Frente Nacional.

Golpe a Barco
El PPC sigue en sus campañas y en 1988 le dan el primer golpe a Barco. "Logramos ganar las elecciones para Concejo de La Dorada poniendo siete concejales. Ya éramos mayoría y la gente vio que sé se podía contra la coalición", recuerda Echeverri.
15 días después fue capturado por el grupo élite de la Policía, Jairo Correa, en una oficina del centro de La Dorada. Siempre se señaló a Barco de promover esa detención. Correa Alzate pagó cárcel y logró un acuerdo se sometimiento a la justicia. Así alcanzó pronto su libertad. Lo recibieron unas 20 mil personas en La Meseta Dorada y luego se pierde su rastro.
Barco se pone a trabajar en la elección de alcaldes de 1990 y gana la Alcaldía con Fabián Ordóñez. Esta vez el golpe es para el PPC que no deja la batalla y trabaja para la elección de 1994. Paz, Progreso y Cultura, con otros apoyos, se vuelve el Movimiento del Pueblo y logra que el padre Nicolás Gómez Montes gane la Alcaldía. De nuevo golpe a Barco que pierde en su fortín.

En Pensilvania
A la par del Movimiento del Pueblo en La Dorada, en Pensilvania se generaba otro movimiento para hacerle contrapeso a la coalición Barcoyepista. En las décadas de los 60 y 70 el poder político en Pensilvania lo ostentaba el Partido Conservador (línea de Ospina Pérez) en cabeza del abogado Bernardo Quintero, quien tenía amplias mayorías en el Concejo.
Alfonso Hoyos Giraldo, de la línea conservadora de Rodrigo Marín Bernal (Laureanista), poco a poco fue obteniendo más concejales hasta dominar. Ante el auge de Hoyos en Caldas, sus contradictores políticos les pusieron el remoquete de Chonchos (por Alfonso) a sus seguidores. El movimiento desde entonces se conoce coloquialmente como chonchismo.
Ante la muerte de Alfonso Hoyos, en septiembre de 1987, y el asesinato de varios dirigentes de esa agrupación, su hijo Luis Alfonso tomó las riendas del movimiento, cuando apenas era un muchacho que regresaba de sus estudios en Francia. Lideran un movimiento y logran que el 13 de marzo de 1988 Jaime Alonso Zuluaga sea elegido primer alcalde popular de Pensilvania, según él mismo recuerda, y el chonchismo empezó a manejar además la mayoría en el Concejo.
En el ínterin entre la muerte de Hoyos padre y el ascenso de Zuluaga, el yepobarquismo tomó las riendas administrativas del municipio, pero una vez derrotado, el alcalde siempre fue de los que llegaron en esa oportunidad, a pesar de los diversos nombres que ha tenido el movimiento: Unidad Conservadora, Compactación Conservadora, Movimiento Cívico por Pensilvania, Actitud Renovadora, Movimiento Cívico por Caldas luego Movimiento Cívico Independiente, Democracia Viva y Partido de la U.
Esta alcaldía la recuperaron los yepistas en el 2011, con la elección de Jairo Antonio Ríos Carmona, quien tomó una ventaja de 234 votos sobre el candidato propuesto por Luis Alfonso Hoyos, votos insuficientes para alcanzar mayorías en el Concejo.
Zuluaga también recuerda que en 1991 Adriana Gutiérrez se lanzó a la Gobernación como primer intento de un grupo independiente en Caldas. Ganó Pilar Villegas de Hoyos por unos 15 mil votos, pero las fuerzas diferentes al yepobarquismo siguieron creciendo por los municipios.

Los quíntuples de la Asamblea
De 1994 a 1996 se generó un grupo de oposición en la Asamblea de Caldas con los llamados quíntuples. Se trataba de los diputados Vicente Fernán Arango (segunda votación en Caldas, el primero fue Ferney Tapasco), del Movimiento del Pueblo; Jaime Alonso Zuluaga (ya estaba en la Corporación) y Gilberto Posada, de Actitud Renovadora; Luis Roberto Rivas, de Salvación Nacional hoy sierrismo; y Pedro Nel García (MOIR).
"Hicimos una oposición a la maquinaria que tenía montada Ferney Tapasco en la Asamblea. Lo más importante fue un estudio sobre la Licorera en el que destapamos esa olla tan horrible y una reforma a la Contraloría del departamento en donde salieron casi 150 empleados", dice Vicente Arango.
Agrega que para este grupo era duro hacer un debate, presentar una ponencia y hasta pedir la palabra. "La batalla en la Asamblea era beligerante, se hablaba un lenguaje de revólver en mano, Tapasco lo ponía encima de la mesa. A diputados les llegó a pegar. O uno pedía la palabra y no la daba".
Por otra parte, el hoy senador Jaime Alonso Zuluaga recuerda que este trabajo fue y ha sido duro. "Estar en un escenario político con Ómar Yepes, Renán Barco y Luis Guillermo Giraldo era difícil. Buscamos dar la pelea y hacer oposición y dimos mucho qué decir".  
Este grupo se gestó durante la gobernación de Ricardo Zapata (yepista), y estuvo durante dos años en la Asamblea. Trataron de hacer debates sobre la corrupción que había en entidades de Caldas y a su vez ejercer un control político. "Era muy tenso porque a Ferney Tapasco como presidente de la Asamblea se le combinaron muchas cosas: la presión de las columnas de Orlando Sierra y la pelea con él, la presión en los pueblos y en la Asamblea. Esa coalición estuvo muy combatida del 95 al 97 y se merma en el 98 con la renuncia de Ferney", comenta Vicente.

Otro round
Un nuevo round entre la coalición Barcoyepista y los movimientos de oposición se dio en 1997 con las elecciones para alcaldías y Gobernación. Por el poder departamental se enfrentan Tony Jozame Amar (liberal avalado por el senador Víctor Renán Barco) y Jorge Robledo, que fue respaldado por Acción Cafetera y
Caldense. Como tercero estuvo el  librero Germán Velásquez Ángel, en representación del movimiento Actitud Renovadora, que lideraba el entonces senador Luis Alfonso Hoyos Aristizábal. Gana Jozame con 137 mil 908 votos, con casi 50 mil votos por encima de Robledo.
El triunfo Barcoyepista fue contundente. Víctor Renán Barco obtuvo las
alcaldías de Palestina, Supía, Aguadas, La Dorada, Marmato, Pácora, Villamaría,
Neira, Chinchiná, Victoria y Risaralda. El Partido Conservador ganó las alcaldías de Viterbo, Manzanares, Riosucio,
Marquetalia y Aranzazu.
La Dorada volvió a ser de Renán Barco. El profesor Orlando Echeverri
ganó la Alcaldía.
Las únicas alcaldías con las que no se queda la coalición son la de Manizales, que gana el médico Jorge Enrique Rojas, avalado por el movimiento Convergencia Popular Cívica, de Carlos
Parra Cifuentes, y la de Pensilvania, que obtiene Fabio Augusto Maya.
Gilberto Cardona Rodas, de Actitud Renovadora, era candidato en Manizales. Es la derrota en la alcaldía de la ciudad para Barco y Yepes, cuyo candidato era Hernando Arango Monedero. No han vuelto a recuperar el poder en Manizales, pues buena parte de las fuerzas políticas que acompañaron a Luis Guillermo Giraldo tomaron partido en favor de las nuevas propuestas, liderados en esta ciudad por Germán Cardona y un sector del empresariado.
El triunfo de Rojas, que terminó mal, renunciado y condenado por actos de corrupción, incentivó a las contras de la coalición a incrementar sus votantes.
En el 2002 Óscar Iván
Zuluaga llega al Senado y Adriana Gutiérrez a la Cámara. Zuluaga asume este liderazgo después de que Luis Alfonso Hoyos pierde su investidura en el Consejo de Estado, tras una demanda que siempre se ha dicho se promovió desde las oficinas de Ómar Yepes. De hecho un antiguo colaborador de Hoyos, Luis Alberto Franco, es hoy la mano derecha de Yepes y acompaña por estos días al gobernador designado, Juan Martín Hoyos.
En cambio, por lo menos cuatro procesos de pérdida de investidura que se promovieron contra Yepes no prosperaron.
Desde el 2002, con la Presidencia de Álvaro Uribe, se fortalecieron quienes lo acompañaron desde un principio, como Luis Alfonso Hoyos, Óscar Iván Zuluaga y Adriana Gutiérrez, hoy parte de la llamada Coalición B, de la que excepto en la elección de 2004, siempre la acompañó el senador Luis Emilio Sierra, quien ha arañado poco a poco el liderazgo conservador a Yepes, hasta el punto que hoy tiene dos representantes a la Cámara, mientras el Director Nacional del Partido no tiene ninguno, tras el encarcelamiento de Jorge Hernán Mesa, que espera una decisión judicial.

El noqueo
Si la política fuera la guerra se podría decir que esta se ganó la semana pasada, después de muchas batallas. En ella estuvieron personajes que participaron en esos movimientos populares desde 1987 hasta ahora. En las últimas elecciones se fueron estrechando los márgenes entre las coaliciones hasta que en el 2011 quedaron a solo ocho mil votos, tendencia que se demuestra con el amplio margen por el que ganó Julián Gutiérrez: 34 mil votos. Allí se consolidó la caída del poder para la vieja coalición en la Administración Departamental.
En este triunfo, que para Zuluaga es todo un proceso de varios años en los que se han generado oportunidades para nuevas personas, también estuvieron Luis Emilio Sierra, Adriana Gutiérrez, entre otros personajes que han estado en la contracorriente a la coalición de Barco, ya fallecido; de Tapasco, en la cárcel; y de Ómar Yepes, retirado del Congreso y con minorías en el Concejo de Manizales y en la Asamblea de Caldas. Pasaron 26 años para que se cumpliera la consigna que se dio en La Dorada en 1987: "A Barco y Yepes sí se les puede hacer contrapeso".