Comerciante afronta la crisis económica con ingenio

Julián García

LA PATRIA | MANIZALES

En Chinchiná desinfectan carros y motos con creatividad.

Este es el caso del negocio Belleza sin Límites de la familia Mora, que se ha dedicado a vender productos para el cuidado personal, tintes, champús, esmaltes y polvos para el rostro.

Debido a la cuarentena por la pandemia del coronavirus sus ventas bajaron en el 80%. Esto fue el punto de partida para que la familia Mora migrara a otro sector de la economía, como es el de la desinfección manual de vehículos. Eso sí, sin dejar de ofrecer sus cosméticos, los cuales entregan a domicilio.

Desinfecta

Adrián Ramírez, empleado de Belleza sin Límites, empezó a prestar los servicios de limpieza el lunes de la semana pasada, cuando dieron los permisos para abrir otras actividades económicas. Usa un overol amarillo y carga una pequeña máquina de aspersión, con la que asea los carros, lo hace sobre la carrera séptima, donde está el almacén de cosméticos.

José Mora Cruz, propietario del negocio, dice que presta este servicio de desinfección para obtener ingresos adicionales y poder sostener a sus seis empleados. “No ofrezco fumigación porque se requieren unos permisos, lo que se hace es una limpieza o desinfección superficial”, aclaró.

Principio

A un lado del almacén de cosméticos está un salón de belleza, que lo administraba su esposa, Carolina Gómez. Este permanece cerrado desde mediados de marzo y Carolina guarda la esperanza de reabrirlo en los próximos días.

José paga $5 millones de arriendo mensual por los dos locales y la nómina de sus empleados y los servicios públicos asciende a los $3 millones. Estos gastos lo obligaron a rebuscarse, dijo.   

Las oportunidades se dan a la vuelta de la esquina. Observó cómo en Chinchiná había abiertas farmacias y ventas de productos químicos, entonces viajó al Valle del Cauca, donde adquirió cuatro canecas de 200 litros de alcohol antiséptico al 96% y las vendió entre sus amigos. “Esos cuñetes no duraron nada, en el pueblo no había alcohol hace dos meses, abastecí a muchos negocios”, comentó.

Ideas

Compró el alcohol en Pereira y le sumó al negocio tapabocas, mascarillas, gel y jabón antibacterial. “No se abusa en los precios, competimos con mayoristas”.

Comentó que observó cómo en Manizales limpiaban los automotores y trajo la idea a Chinchiná, ya que, según él, el municipio no cuenta con un sitio de desinfección de carros.

José y su esposa esperan la orden para reanudar labores en el salón de belleza, dijeron que tienen todo listo y aseado para recibir a sus clientes.