Óscar Veiman Mejía
LA PATRIA | Manizales
En la escuela la Unión Baja, del colegio de la vereda El Placer (Marquetalia) las falencias llegaban al colmo. Así lo muestra la fotografía de las antiguas baterías sanitarias, publicada en esta nota. Las cosas cambiaron con la inversión de la Gobernación de Caldas, la Alcaldía y la Institución Educativa. Ahora los baños, como se expone en otra foto, son mejores.
Los 36 alumnos, de transición a noveno, se beneficiarán de las reparaciones desde el 20 de enero cuando lleguen de vacaciones. El rector, Carlos Hugo García, añade que el establecimiento no tenía restaurante ni cocina. También requería de otra aula.
Comenta: "Si hay buenos ambientes escolares, mejoran el servicio de educación y el aprendizaje. Antes no había unidades sanitarias dignas, eran dos tacitas, nos daba hasta pena. Y los alumnos almorzaban en el andén".
El rector enfatiza en que los colegios reciben poco dinero por la gratuidad en la matrícula. Por tal motivo, es necesario que hagan bolsas de recursos con las administraciones Departamental y Municipal. "Solos no podemos", dice.
Origen y destino
Cuando los estudiantes vuelvan a clases a la Unión Baja podrán disponer de un salón nuevo, que será utilizado para sistemas. "Destacamos el compromiso de la Secretaría de Educación de Caldas y de la Alcaldía. Y con nuestros ahorros de varios años logramos entre todos invertir $80 millones 124 mil".
El dinero se utilizó en pintura, cerramiento, baterías sanitarias, cocina, aula, cubierta, entre otros espacios de una sede que llevaba, según el mismo rector, 12 años sin gastos para su infraestructura.
En el caso de la Gobernación, la plata corresponde a los siete mil millones de pesos que de recursos propios destinó para construir o reparar en colegios de los 26 municipios, diferentes de Manizales. Los aportes son mediante convenios con las alcaldías y resoluciones con rectores.
Para completar, al centro educativo también llegará mobiliario, menaje para el restaurante escolar y un televisor, como parte del programa de dotación que el departamento entregará a las sedes rurales.
Escrituras para colegios
Las comunidades educativas de la Escuela Normal Superior Nuestra Señora de la Candelaria y del colegio Juan XXIII recibieron con agrado las escrituras de estos planteles. Las propiedades pasaron de la Curia al Departamento, eso significa que ya pueden ser objeto de inversiones con recursos del Estado, por ejemplo para reparaciones.
De acuerdo con una reseña histórica, hace unos 60 años el padre Antonio María Hincapié, en nombre de los habitantes, recibió autorización para la construcción de estos planteles.
La compra, explica la Gobernación quedó en 1.200 millones de pesos y se adelantan 200 millones de pesos para las escrituras. El proceso continúa con el contrato de compraventa una vez se tengan los certificados de tradición a nombre del departamento de Caldas.
Marcelo Gutiérrez, secretario departamental de Educación, manifestó: “Con la compra de estos predios se benefician 379 estudiantes de la Escuela Normal y 320 de la Juan XXIII para un total de 699 niños y jóvenes que pronto podrán tener mejoramientos en la planta física de sus instituciones, toda vez que anteriormente no se podían hacer adecuaciones, pues los terrenos no eran del Departamento y se podía incurrir en detrimento al patrimonio”.
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