Estudiantes de la Normal de Caldas viajaron al corazón de María en la Hacienda El Paraíso

ANDREA GÓMEZ Y SAMANTHA FRANCO

LA PATRIA | MANIZALES

Los rosales, la sombra de los samanes, la cama y los recuerdos de un amor idílico de María y Efraín en las letras de Jorge Isaac. De cerca al romanticismo colombiano estuvieron los estudiantes de octavo de la Escuela Normal Superior de Caldas.

La experiencia fue en la Hacienda El Paraíso, en el municipio El Cerrito (Valle del Cauca), en donde sucedieron las escenas la novela colombiana María.

Antes de la visita pedagógica los alumnos habían leído la novela, que está incluida en el currículo de este grado. Luego vieron una película, dibujaron una historieta y participaron en un foro sobre los problemas sociales abordados en el libro.

El profesor Héctor Fabio Arroyave es el encargado de la actividad: "Es una experiencia inolvidable para los educandos, conocen, experimentan cosas nuevas, socializan y están en un mundo diferente para ellos. Entran a comparar el libro con la realidad plasmada en la Hacienda El Paraíso".

Este ejercicio pedagógico ayudó a reflexionar sobre la novela y el contexto social en el que se escribió.

Recorrido

Los estudiantes disfrutaron de un desayuno en Buga, después visitaron al Señor de los Milagros y compraron en tiendas religiosas.

Hacia el mediodía fueron a la Hacienda El Paraíso y conocieron el lugar en una visita guiada durante dos horas. El almuerzo fue sancocho de gallina y chuleta valluna. El viaje terminó con un chapuzón en las piscinas naturales, contiguas a la hacienda.

En la Feria del Libro de Manizales que se realizó en agosto presentaron 200 años, 200 libros de la historia de la Independencia de Colombia. 106 personas participaron en la selección de los libros, en la lista la novela María (publicada en 1867), de Jorge Isaacs, es la cuarta. El primer libro es la Vorágine, de José Eustasio Rivera; la segunda es Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, y el tercero es La tejedora de Coronas, de Germán Espinosa.

Juliana Valencia: Fue de mis mejores experiencias porque me sentía como si hubiese entrado al mismo libro. No me alcanzaron las palabras para describir lo maravilloso que fue.

Miguel Andrés Motta: Un viaje fantástico e inolvidable. Todo el recorrido muy bueno; la comida los paisajes, la entrada a Buga, la visita guiada a la hacienda y las piscinas naturales. Qué aprendizaje tan espectacular.

José Luis Velásquez: Podemos ver datos que no se encuentran en el libro y ver piezas importantes. Ver cómo vivían los personajes y resolver las dudas que nos dejó el libro.

Mariana León: Fue extraordinario. Encontramos paisajes muy hermosos. La ida a la hacienda estuvo llena de datos interesantes. Al final estuvimos en piscinas de aguas naturales, donde tuvimos la oportunidad de meternos.

Samara Mendoza: Me pareció una experiencia muy bonita. Conocer los detalles, los lugares y los objetos en los que se desarrolló la novela. Cuando te enamoras de un escrito, lo amas como me sucedió con María.

Samuel García: Pudimos convertir un libro en la vida real. Se conoció toda la casa de María, su cuarto, el oratorio, el cuarto de Efraín. También conocimos la Basílica de Buga, el parque, sus tiendas, con todo lo que tenga que ver con la religión.

Tatiana Rodríguez: Mis expectativas se cumplieron. Nunca se me olvidará. Compartí con compañeros, pasé de algo irreal a una realidad vivida en la hacienda. Muestra todo lo que vivimos presencial.

Mariana Cardona: Me pareció una experiencia importante para nuestro aprendizaje literario. La salida nos ayudó a comprender y a analizar mejor el libro. Es increíble ver cada rincón y espacio.

Isabella Ramírez: La salida pedagógica es una vivencia que puedo describir como entretenida, diversa y como una oportunidad para poder conocer un poco más sobre la historia y las características del lugar visitado.