Óscar Veiman Mejía y Jorge Iván Castaño
LA PATRIA | Manizales
El transporte escolar para siete niños de la vereda El Corozo, de Neira, es un dilema. En el caserío hay una escuela, pero los padres no quieren que estudien allí. Prefieren que vayan a la primaria de la Institución Educativa Llanogrande a 15 minutos en carro o a casi una hora a pie. El colegio dice que, al tener una oferta educativa cerca, no tienen derecho al transporte subsidiado por el Estado.
Por eso, varios pequeños caminan por la carretera, trochas y cafetales para ir a estudiar y para retornar a la casa. "Tenemos derecho a escoger la mejor institución para nuestros hijos", dice una señora.
Asegura que algunos padres de familia estaban inconformes con la docente de El Corozo, que este año ya no está. "No enseñaba lo suficiente, había maltrato. Entonces, llevamos a los niños a Llanogrande, donde hay mayor calidad, enseñan más. Los queremos dejar allí, pero necesitamos el transporte".
Indica que el año pasado, cuando estaba la docente, sí tenían transporte. "Ahora hay padres que llevan a los niños en moto, otros se van caminando. Y eso cuesta plata. También arriesgamos perder la coloca (trabajo) en las fincas porque tenemos que sacar tiempo para acompañar a nuestros hijos y no dejarlos solos en estos caminos".
En secundaria
El rector del colegio Llanogrande, Germán Céspedes, respondió que está claro que el transporte escolar rural es para los de bachillerato. "A los niños se les tiene escuela en las veredas y cuando terminan la primaria se les ofrece el servicio para ir a la secundaria".
Añade que si los padres quieren matricular a sus hijos en otra sede, lejos de la vereda, deben asumir el transporte. Con el rector coincide Diana Cardona, profesional especializada de la Secretaría de Educación de Caldas, quien maneja estos asuntos.
Hernán Patiño, fiscal del sindicato Educadores Unidos de Caldas, conceptúa igual. Sin embargo, hace una salvedad. "Como son muchos niños, cinco, seis o siete, el rector tiene la obligación de analizar qué está pasando en la sede, es posible que haya algo irregular".
Céspedes asegura que las profesoras que ha tenido en El Corozo, en ocasiones hasta dos, han sido competentes. "Son profesionales universitarios y han pasado nuestras evaluaciones. Tenemos 25 niños y puede ocurrir que unos cuantos padres no estén satisfechos".
Una madre señala que lo que hacen los funcionarios es lavarse las manos. "Hemos puesto las quejas por el bullying de los profesores y porque dejan de enseñar y no nos ponen cuidado".
Dice el alcalde
El alcalde de Neira, Luis Gonzaga Correa, explica que el Gobierno nacional prohíbe que se brinde transporte a estudiantes que cuentan con oferta educativa en las veredas. "Es como si les pagáramos transporte a alumnos de la zona urbana de Neira para que estudien en Manizales, teniendo colegios aquí. Si un padre se quiere dar el lujo de llevar a su hijo a una escuela lejos de donde vive, pues debe asumir los costos. Nosotros brindamos la sede con maestros y todo lo demás, así ocurre en la vereda El Corozo".
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