Vamos bien, pero falta mucho

El desempleo en Colombia terminó el 2012 con un índice del 10,4 %, muy cerca de la meta de un dígito, pero aún lejos de que esa tendencia en caída pueda profundizarse y llegar a niveles que sean aceptables en el contexto internacional. En Manizales, que hasta hace poco estuvo en los primeros lugares, el índice de desempleo se ubicó en 10,1 %, menor que el promedio nacional, y con el nivel más bajo de la década en la ciudad, pero tenemos que ser conscientes de que hay que seguir trabajando en la generación de nuevos y mejores puestos de trabajo.

En Estados Unidos, país que avanza muy lentamente en su recuperación económica, el 2012 cerró con un desempleo de 7,9 %, lo que significa que en todo el año pasado se generaron 2 millones 172 mil empleos, de tal manera que poco a poco se superan las heridas dejadas por la reciente crisis, pero aún le falta mucho para recuperar la senda del crecimiento real.

En la Eurozona el 2012 también cerró con un desempleo récord del 11,4 %, donde países como España alcanzaron el 26,1 % en dicho indicador, lo que muestra la gravedad del estado de su economía. El 2013 tampoco será fácil allí, y se calcula que el año terminará con 5 millones más de desempleados en el mundo, para ubicarse en 202 millones de personas desocupadas en total, la mayoría jóvenes.

Frente a estos parámetros, y cuando en América Latina y el Caribe el promedio del desempleo en 2012 se ubicó en 6,4 %, de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), alcanzando un punto histórico, salta a la vista que en Colombia aún falta mucho para que podamos decir que se venció este flagelo. Otros países de la zona nos llevan mucha ventaja: Chile con 6,4 %, Perú con 7,9 %, México con 5,2 % y Brasil con 4,5 % son cuatro ejemplos. Además, aún predomina la informalidad, la escasa estabilidad laboral y las limitaciones en los derechos laborales de miles de trabajadores, así como los riesgos de que nuestra economía se contagie por la crisis mundial.

Hay que reconocer que en Manizales se han hecho bien las cosas en materia de empleo en los años recientes, y que eso ha significado que hoy estemos en el puesto 15 en la lista del desempleo por ciudades. La estrategia de los centros de llamadas ha dado buenos resultados, y sectores como los de la construcción y la industria han tenido nuevos impulsos que se reflejan en nuevos puestos de trabajo y en mejora general de los indicadores de la economía.

Esto es mucho más claro cuando se aprecia el fenómeno de las otras dos capitales del Eje Cafetero, Pereira y Armenia, que con 15,5 % y 15,3 %, respectivamente, se ubican primera y tercera en la tabla de desocupados. Eso indica que en la capital caldense se están llevando a cabo procesos que le han dado una nueva dinámica a su economía y un número mayor de empleos. Es un hecho que hoy se tienen trabajando mil personas más que el año pasado y que el actual indicador es la cifra más baja desde el 2007, con 20 mil desempleados.

Debemos admitir que la Tasa Global de Participación (TGP), si bien descendió, sigue siendo muy alta en Manizales, con el 59,2 %, lo que también muestra la necesidad de generar más empleo, situación que no será fácil este año. El propio Fondo Monetario Internacional (FMI) afirma que en el 2013 en Colombia, en lugar de descender, el desempleo podría irse en alza. Esperamos que dicho organismo mundial esté equivocado.

De todos modos, lo importante es que con nuevos y mejores empleos se generen las condiciones para estimular el consumo, abrirle el paso a nuevas inversiones y lograr avances en la lucha contra la pobreza y la desigualdad, y que el crecimiento económico que podamos alcanzar lo transformemos en progreso y justicia social.