La recuperación de los precios del café es evidente, y al parecer, sostenible. En los meses recientes hemos visto cómo las cotizaciones externas e internas han reaccionado favorablemente, al mismo tiempo que las cifras de producción se han incrementado hasta niveles que han recuperado la credibilidad en la caficultura. Al cierre de abril se llegó a 3 millones 545 mil sacos de 60 kilos, y en el último año corrido, se llegó a los 11 millones 342 mil sacos.
El mal momento de la actividad cafetera va quedando atrás. Es cierto que hace dos años la situación de los cultivadores del grano era muy mala y no había expectativas de mejora cercana, pero hoy, y en lo que va de este año se observa un panorama que permite ser optimistas. Es fundamental que el buen momento sea aprovechado para fortalecer las bases de la actividad y que hacia el futuro no haya nuevos riesgos de que una nueva crisis amenace con desaparecer las motivaciones para el cultivo del café.
Hoy es un hecho que la producción ha llegado a niveles similares a los de hace seis o siete años y que hacia el futuro existe la posibilidad de seguirla mejorando, siempre y cuando se dé un trabajo disciplinado de renovación y de fertilización, logrando que se consoliden cafetos fuertes, sanos y vigorosos que lleven a Colombia a retomar el liderazgo en los niveles de oferta y a hacer más sólida su calidad. Frente a lo que ocurre con los cafés de Centroamérica y los de Brasil, por ejemplo, afectados por enfermedades y condiciones climáticas adversas, el café colombiano tiene oportunidades nada despreciables.
Además, resulta clave que la Federación Nacional de Cafeteros y el Gobierno Nacional se enfoquen a trabajar en iniciativas que apunten a darle valor agregado a nuestro producto, de tal manera de las grandes utilidades no se queden en los intermediarios extranjeros, sino que sea la industria colombiana la beneficiada con los resultados de procesos que pongan en el mercado internacional nuevas presentaciones del café colombiano, que con seguridad serán valoradas por los consumidores en los cinco continentes.
No es descabellado, entonces, pensar en que se pueda llegar y hasta superar las expectativas de producción de 11,3 millones de sacos de café este año. De hecho, aún sin una inyección de recursos similar a la que recibió en el 2013 de manos del Gobierno Nacional, todo indica que los cafeteros van a estar muy bien y que las expectativas para los años siguientes también son positivas.
Sin embargo, hay que prestar gran atención a lo que ocurre con el dólar, moneda frente a la cual el peso viene en proceso de revaluación este año y que puede afectar gravemente las exportaciones, si no se implementan a tiempo las medidas para que la Tasa Representativa del Mercado (TRM) no se vaya a pique, gracias a la llegada de grandes capitales de inversión, debido al buen momento que vive nuestra economía.
También es necesario que nuestra atención se fije en lo que pasa con el clima, y que se tomen las decisiones que nos permitan superar los problemas planteados por fenómenos como el del Niño que, según los expertos meteorólogos, se aproxima. Ante una posible ola de calor, o ante las crudas lluvias, los cultivadores ya saben que hay medidas químicas y prácticas culturales que ayudan a evitar efectos negativos.
El foco de la caficultura colombiana debe estar en el procesamiento del producto, con el fin de consolidar una oferta exportadores de cafés tostados, molidos y empacados, que deriven en mejores beneficios para los cultivadores y procesadores locales. El programa que en este sentido impulsa el Ministerio de Agricultura nos parece bien enfocado, y deja atrás la dependencia de llevar al exterior solo café verde, que no ofrece niveles de rentabilidad que sean en realidad generadores de riqueza. Caldas debe jugársela toda por este camino.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015