Tercer intento para el cobro de plusvalía en Manizales

JUAN CARLOS LAYTON

LA PATRIA | MANIZALES

El pasado sábado el secretario de Planeación, Daniel Quiceno, socializó en el Concejo de Manizales un nuevo proyecto de acuerdo en el que se propone revivir el impuesto de Plusvalía, frenado dos veces en esta Administración.

Esta vez se presentó con una propuesta que en el Concejo, que calificaron de tentadora, pues plantea reducir el cobro del 50% al 30% y autorizar al alcalde para expedir los ajustes en la reglamentación e implementación.

De entrada la propuesta fue bien recibida entre algunos ciudadanos, al considerar que una reducción de 20 puntos es importante, justo en medio de la actual situación económica de la ciudad y del país y del impacto que dejó la pandemia.

Sin embargo, la reducción de este impuesto no es lo único que se espera (ver recuadro: ¿Qué es la plusvalía?). También confían en que esté acompañado de un estudio diferente y con varios ajustes frente al reciente que se quiso aplicar.

Habitantes como Jorge Mejía Arango, exsecretario de Obras Públicas y miembro de la Junta de Camacol, insistió que el actual estudio tiene tarifas exageradas. "Por eso rebajar el impuesto del 50% al 30% con el actual informe no tiene sentido, pues quedó demostrado que tiene una serie de inconsistencias. Además es importante que socialicen la nueva propuesta, antes de sacarla en firme, para hacerle las observaciones del caso", planteó.

Las críticas

La misma Secretaría de Planeación reconoció el mes pasado que el estudio que entregó el contratista Jorge Eliécer Gaitán, no refleja los valores reales por concepto de liquidación, ni se encuentra ajustada a los postulados normativos que regulan la materia. "Es claro que para esta Secretaría que el ejercicio allí realizado no cumple con la finalidad prevista en su objeto", planteó.

También llamó la atención que el informe "se presta para generar confusiones en los ciudadanos beneficiados con dicha participación, por cuanto los criterios tenidos en cuenta para calcular y liquidar esa participación no son claros ni comprensibles para el titular del predio beneficiado...".

Eso motivó a que la Alcaldía tomara la decisión de revocar por acto administrativo este cobro, pues según el

el secretario de Planeación, Daniel Quiceno, el objetivo es tratar de sanear este proceso, ante las falencias que plantearon varios usuarios en diferentes recursos de reposición, debido a la falta de varios aspectos técnicos.

La nueva oferta

De acuerdo con el secretario de Planeación, el nuevo proyecto que se presentó tiene dos propósitos: la propuesta de ajuste y la necesidad de igualar a Manizales con otros municipios del Eje Cafetero y en general del país, cuyo cobro es del 30%. Eso además de darle facultades al alcalde para realizar los ajustes del decreto reglamentario de plusvalía y que adoptó el estudio técnico.

A la par se trabaja en la validación de las inconformidades que hoy existen y se le presentaron las quejas al consultor Jorge Eliécer Gaitán para que dé respuesta al trabajo que hizo. Sin embargo, el secretario advirtió, que si no da una respuesta adecuada para actualizarlo, se revisará la opción de un nuevo estudio para la ciudad.

A hacerlo de nuevo

En el Concejo también hay expectativas del nuevo proyecto que se comenzaría a discutir la próxima semana.

El concejal ponente César Augusto Díaz Zapata, del Partido Liberal, sostuvo que aunque entienden el fondo del proyecto y el interés de rebajar el monto, para lo cual están facultados como Concejo, persisten varias inquietudes.

Una, es dónde está el estudio técnico que lleva a esa rebaja y si se va trabajar con el mismo informe de Gaitán. "Entendemos los obstáculos jurídicos que se presentaron en el 2020, 2021, y 2022, especialmente con el proceso de liquidación, pero pedimos una solución definitiva a estos inconvenientes. El cobro se necesita, pero bien sustentando y con un estudio de fondo", dijo, por lo que no sabe si presentará esta ponencia positiva o negativo reconoció. Mientras tanto la secretaría confía que en octubre de este año se empiece a aplicar el impuesto de plusvalía en la ciudad.

¿Cuál es el malestar?

* El reclamo en la ciudad es que si alguien vende un lote para un mayor aprovechamiento del suelo, se hace un traspaso de rural a urbano o incluso si se recibe alguna herencia, por ejemplo, el lote se valorizaba más de lo que antes costaba.

* El problema es que con ese nuevo valor, el propietario tenía que pagar inicialmente el 50% de lo que se valorizó, por lo que si el predio costaba $800 millones más, el pago del impuesto sería de $400 millones.

* También se reclamó por los supuestos que quedaron en el informe, como por ejemplo que todos los lotes son urbanizables, sin tener en cuenta la topografía de esta región.

* Por esta razón se ha frenado dos veces en esta administración. Aunque en julio del 2020 se optó por aplazar la decisión, para hacer una revisión y un proceso de socialización, en mayo se inició el nuevo proceso.

¿Qué es la plusvalía?

Es un impuesto que grava el aumento de valor de un inmueble durante los años de posesión hasta su transmisión por su aprovechamiento, ya sea por compraventa, donación o herencia. El POT, aprobado en el 2017, precisa que hay cuatro hechos generadores:

1. Cambio de suelo rural a expansión urbana.

2. Cambio de suelo rural a suburbano.

3. La autorización de un mayor aprovechamiento del suelo en edificación.

4. La ejecución de manera directa o indirecta por el Municipio de las obras públicas.

Algo de historia

* El proceso ha sido esquivo desde el 2003, por razones que van desde la falta de estudios técnicos, el impacto en el bolsillo de los propietarios, hasta los costos de operar el cobro y la poca claridad jurídica para su aprobación.

* Inicialmente el estudio que se realizó entre el 8 de octubre del 2018 y el 31 de enero arrojó que había 3 mil 954,02 hectáreas de predios o zonas susceptibles de plusvalía, para 455 lotes, 58 urbanos y 397 rurales.

* En el 2020 se bajó a solo 340 y el año pasado la cifras era de 298 predios, 42 menos de lo que se estimó en el 2020.