Por qué es importante una inmobiliaria avalada en tiempos de pandemia

En el contexto de la pandemia del coronavirus, se han documentado nuevas formas de fraude en el sector inmobiliario a través del uso de herramientas tecnológicas que, en estas circunstancias, ha crecido.

El problema es que algunos de los pasos que siguen en el proceso para comprar o vender una vivienda se hacen online por las diferentes restricciones existentes para evitar la propagación de la COVID-19

Algunos de estos fraudes son:

Suplantar la identidad

No es nada nuevo, pero ahora se hace mucho más. La inmobiliaria está ligada, por desgracia, a la suplantación de identidad, que se puede hacer ahora a través de muchos medios en Internet.

Cuentas falsas, comunicación normal pero de forma remota y estafa hecha. 

Por ese motivo, es importante que las personas confíen en inmobiliarias avaladas, como es el caso de B&R Inmobiliaria en Bogotá con el que cuentas una asesoría continua y un acompañamiento legal en todos los pasos de este proceso, que piensas que puede ser complejo, aunque con una inmobiliaria será más fácil de lo que piensas. 

Falsificación de documentos

La falsificación de los documentos es uno de los fraudes más comunes. Esto ocurre porque en muchos procesos tanto de compra como de venta se hacen de manera informal sin que intervengan actores principales en este camino, como puede ser el de la inmobiliaria o del notario.

Lo cierto es que la gente que falsifica documentos no es amateur, sino todo lo contrario: son realizadas por personas experimentadas por lo que los compradores o vendedores tienden a no percatarse del fraude.

Propiedades inexistentes

Nuevamente por la tecnología, ahora se recrean recorridos virtuales en los buscadores de vivienda. Pero el problema viene cuando se hace dicho recorrido en una casa que no existe.

El comprador busca en las webs y caen en la trampa ya que ahora todo se hace de forma remota, por lo que no saben si la vivienda está en construcción o si siquiera existe.

Por ese motivo, lo mejor es contactar con una inmobiliaria para que te guíe en este proceso. Además, es la propia inmobiliaria quien acudirá al lugar donde está la vivienda para cerciorarse de que existe.