Migración y remesas, momento crítico

LA PATRIA | MANIZALES 

La mayor cercanía que tenemos con la migración parte de ver a tantos venezolanos en las calles colombianas, en los diferentes lugares que frecuentamos a diario. La covid-19 generó un nuevo impacto en este fenómeno que se había reducido en un 1,6%
mensual desde marzo hasta agosto del 2020.
Sin embargo, en los últimos dos meses esta cifra volvió a subir, con los venezolanos de regreso
a Colombia ante la crisis en el suyo. “Diariamente ingresan a Colombia cerca de 200 migrantes venezolanos de manera irregular”, calcula Migración Colombia.

El impacto 

Valentina González tiene 23 años, y Colombia es el tercer país en donde vive. Antes estuvo en Bolivia, pero su familia migró de regreso a Venezuela por problemas económicos.
Después de esto decidió venirse sola a Colombia hace dos años. “Con toda la pandemia estuve pensando en devolverme, pero la inseguridad en mi país hace que sea imposible estar allá”.

Como su mantenimiento siempre se derivó de trabajar como fotógrafa, durante todo esto tuvo que encontrar otros ingresos como la venta de postres. Ella espera traerse a su hermana pequeña y cree que después de esto la migración seguirá igual o aumentará, porque la falta de recursos hace que sea obligado migrar fuera de su nación.

“Migrar es un derecho, pero debe hacerse respetando las normas de cada país y aún más, sin poner en riesgo nuestra integridad, nuestra vida”, afirma Juan Francisco Espinosa Palacios, director de Migración Colombia, en un boletín de prensa.

La inversión extranjera en el país podría continuar por debajo de los niveles que estaba antes de la pandemia

Menos remesas
Según un estudio de octubre del 2020, realizado por el Banco Mundial, para el 2021 la cantidad de dinero que los migrantes envían a sus países de origen bajará en un 14% comparado con el 2019.

A juzgar por las experiencias de la gripe española hace un siglo, no se puede descartar que en los principales países que acogen migrantes se realicen nuevos cierres en el 2021.

Las corrientes de inversión extranjera directa hacia los países en vía de desarrollo han disminuido constantemente desde el 2013 (con excepción del 2018), y podrían permanecer por debajo de los niveles prepandémicos hasta el 2021.
Los principales factores que impulsan la disminución de las remesas en el 2020 y el 2021 son el débil crecimiento económico y la incertidumbre laboral en varios países de altos ingresos
que acogen a migrantes como los Estados Unidos y los países europeos.
Se prevé que las corrientes de remesas hacia América Latina y el Caribe alcance los 96 dólares en el 2020, una disminución de -0,2% frente al 2019.

Descenso
Este es el primer decrecimiento desde la crisis financiera del 2009. Se prevé que la caída de las remesas sea del 8% este año en todo el mundo. La desaceleración mundial relacionada con el coronavirus y Las restricciones de viaje también afectarán a las migraciones y es probable que esto mantenga las remesas reducidas incluso en el próximo año. 
De acuerdo con el Decreto 1550 del 28 de noviembre del 2020, hay un cierre de todos los pasos terrestres y fluviales del país, se prolongarán hasta el primero de marzo de este
año, para evitar la propagación del virus.
El secretario General de la ONU, Antonio Guterres, subrayó: “Nadie está seguro hasta que todos estén seguros”. Por lo tanto, el cuadro de indicadores de la nueva herramienta sobre la coherencia de las políticas para la migración y el desarrollo (PCMD) es fundamental para abordar varios de desafíos actuales que enfrenta la política pública sobre migración durante la pandemia.