Jugar como local en el comercio de Estados Unidos es la clave

Miguel André Garrido | Enviado especial 

COLPRENSA | LA PATRIA | MIAMI

Con la presencia de seis expertos en el tema de inversión dio inicio este lunes en el hotel Lowes de Miami, Florida (Estados Unidos), la conferencia a la que asistieron más de 500 empresarios colombianos quienes esperan acercar sus productos al mercado estadounidense.

Este encuentro se dio en la celebración del primer aniversario del Tratado de Libre Comercio suscrito entre Colombia y Estados Unidos y que este miércoles, 15 de mayo, llega a su día 365.

Muchas fueron las dudas acerca de cómo proceder legalmente en el mercado de Estados Unidos para poder, como lo recomendaron los expertos, “jugar de local” y así no sólo alcanzar las tiendas en el país del norte, sino también llegar a tener asiento en este país.

Julián Rubio, ejecutivo de Ameriword, resaltó la importancia de la estrategia de venta a la hora de comercializar productos en los Estados Unidos. Y es que en el mercado del país norteamericano se debe tener claro que “los estadounidenses son consumidores natos, eso es lo que hacen los fines de semana”. En ese sentido recomendó que cada comerciante, para este caso los colombianos, esté presente, físicamente, en Estados Unidos, esto como una alternativa para poder crecer. Y es que para el consumidor local tiene mucho valor el respaldo que se dé por contar con una empresa u oficina en el territorio americano.

Ese es, precisamente, un argumento para que los empresarios colombianos confíen en llegar a Estados Unidos y ubicar sus oficinas allí. En ese sentido, señaló que tras llegar a uno de los Estados de la unión se puede llegar a crecer, en muy corto tiempo, el 40 por ciento. “No les dé miedo”, dijo Rubio.

George Mencio, abogado estadounidense de Holland & Knigth, una firma ubicada en Colombia, señaló que otra ventaja en los Estados Unidos es que las leyes cambian muy poco, y la referencia tiene que ver con el manejo legal en distintos Estados de ese país. En ese sentido Mencio hizo referencia a la manera como se dan los contratos comerciales en territorio estadounidense, los cuales dijo que sí son muy estrictos, pero fáciles de cumplir si se observa con precisión cada uno de los requisitos que se exigen.

La experiencia de la firma Sandler & Travis a la que pertenece Lenny Feldman, abogado de aduanas de esta oficina con representación en 14 países del mundo, le permite señalar como necesario que al llegar al mercado americano se pueda reconocer de manera clara y específica cada uno de los fabricantes, lo mismo que otros intervinientes en el proceso. Esa misma importancia la tiene el cumplir los requisitos de las facturas, lo mismo sucede con detalles como el origen y el valor de la misma.

Otra de las recomendaciones es poder conocer el país de origen del producto y en ese sentido tener presente si clasifica en alguno de las preferencias arancelarias, como las que se establecen con el TLC, para de paso establecer el porcentaje de los descuentos que se tienen para cada producto.

Las licencias y los permisos también son claves a la hora de cruzar la frontera, y más aún si se trata de comidas y bebidas. Así pues, antes de llegar al mercado estadounidense es necesario cerciorarse de que dichos productos estén avalados por las autoridades americanas.

LAS ADUANAS

Germán Muñoz, de una compañía de intermediación aduanera, consideró que “es bueno prevenir antes que lamentar”, así que la recomendación más importante fue que cada exportador colombiano se cerciore de que sus mercancías sí cumplan con los porcentajes a los que se hace referencia en el Tratado de Libre Comercio (TLC) y añadió que hay muchos productos cuyas partes deben contar con normas de sanidad.

De la misma manera, recomendó que cada producto esté adecuadamente descrito, de manera concisa y clara, para que las autoridades tengan muy presente qué es lo que se quiere ingresar al mercado americano.

Manuel A Mencia, de Enterprise Florida INC, señaló al respecto: “ustedes son nuestro cuarto socio comercial en el mundo”, esto lo señaló al resaltar el papel de Colombia en el comercio de los Estados Unidos. De ahí la importancia del TLC entre ambas naciones, que dará frutos para ambas partes en el mediano plazo, como dijo el experto. 

“En 2012 yo encabecé la misión empresarial de Estados Unidos que visitó Colombia”, dijo Mencia al añadir que una de las recomendaciones que él le ha dado a los industriales de su país es poder llegar a Colombia, no sólo con productos, sino que allí se debe hacer presencia de alguna manera. “Es bueno que los ejecutivos de los más altos niveles hablen español”, señaló y enfatizó en la importancia de los dos mercados.

“La Florida tienen muy buena estructura y es donde más se conoce el mercado latinoamericano”, señaló, no sin dejar de afirmar que esa es una razón por la cual la Florida es la puerta por la que muchos empresarios pueden entrar a los Estados Unidos para instalarse allí y crecer. “La Florida es un lugar ideal para ustedes, y el Gobierno local es extremadamente amistoso para los negocios”, dijo al destacar las normas que cada vez disminuyen más las cargas arancelarias y los tributos para los empresarios.

Ismael Cifuentes, de HBF, con más de 20 años de experiencia en el mercado americano, consideró que una estrategia de su compañía de asesorías legales es apoyar al empresario hispano. La educación al empresario, cómo registrar una empresa, cuáles son los contactos y cómo hacer el mercadeo, son algunos de los servicios gratuitos que presta HBF para los empresarios. “Lo que queremos es ayudarle a evitar errores”, añadió que una de sus especialidades es precisamente conocer los retos y las estrategias que deben implementar los empresarios latinos, lo mismo que los planes de negocios para llegar al comercio en Estados Unidos.

“Lo importante aquí es el acompañamiento”, coincidieron los expertos quienes recomendaron “no se vengan solos (sin asesoría)”. Esta es pues la manera que según el foro les permite a los empresarios nacionales jugar de locales en un mercado tan basto e importante como es el de los Estados Unidos.

El dato

- El registro de una marca en Estados Unidos toma seis meses, en algunos casos menos, dependiendo del detalle de la información consignada en la planilla entregada a la oficina de marcas y patentes que está en Washington.