Crecen las dudas por posible traslado de planta de destilación

JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES

La propuesta de trasladar la planta de destilación de la Industria Licorera de Caldas, se convirtió ayer en el principal reclamo de los sindicatos y algunos diputados, que siguieron cuestionando la celeridad para aprobar la reforma de estatutos de la destilería regional.
Ayer se aprobó este proyecto en segundo debate en plenaria, lo que evidencia que el proyecto en definitiva será un hecho, pues en los próximos debates ya no se tendrían más cambios de fondo, sino de forma. Varios corporados y dirigentes sindicales volvieron a salir incómodos de la Asamblea departamental.
Pese a que el jueves pasado en la noche, la Comisión Tercera aceptó varios cambios que propusieron los sindicatos, hecho que los motivó, pues resaltaron que los estaban escuchando, ayer su optimismo se redujo al no lograr que se cambiara el numeral 5, del artículo 5.
En él reza: "Adecuar, mejorar, adquirir, instalar o trasladar las plantas que permitan la producción de alcohol etílico y de licores, para el desarrollo de sus actividades".
Esto prendió el debate de varios de los empleados, que aseguraron que esto ratifica el interés de dejar cerrada definitivamente la planta de destilación, y comenzar a pensar no solo en la compra continua de alcoholes, sino incluso en llevarse la planta para otra región.
"Hasta ayer en la mañana teníamos la idea de que nos estaban colaborando y estaban a favor de hacer algo bueno en la ILC. Sin embargo, al decidir no cambiar esa parte del artículo, el resto de lo que cambiaron no sirve para nada", aseguró el presidente de Sintrabecólicas, Carlos Aníbal Loaiza.

No más cambios
El gerente de la Licorera, Jorge Iván Orozco Hoyos, salió al paso, e indicó que fueron suficientes los cambios, pues la empresa no puede seguir amarrada para tomar decisiones.
Aseguró que es una decisión de Gobierno de mantener medidas y propuestas como el traslado, pues  en algún momento, si se llega a demostrar con base en los estudios técnicos, que el proceso de destilación no se puede seguir efectuando en la planta de la ILC, quedaría la opción de buscar un nuevo negocio con la planta de destilación.
Por lo pronto este año dicha planta seguiría cerrada, y terminando el año se definirá qué pasara en el 2015, con base en el camino que muestren los estudios estudios técnicos.
Sí recalcó que no se está hablando de trasladar la fábrica de producción de licores, sino el proceso de destilación de alcoholes.

A favor y en contra
El grupo de diputados que estuvieron en contra se redujo de cinco a cuatro, contra 10 a favor.
Esto, debido a que finalmente Paula Marcela Osorio, del MIRA, votó a favor la mayoría del articulado, excepto el punto sobre del traslado, pues consideró que en general había más claridad y quedan más tranquilos frente a las buenas intenciones que tiene el gobernador para mejorar la ILC.
Caso contrario fue el del liberal Jorge Hernán Aguirre, quien insistió que es el resultado de una decisión apresurada, pues la historia muestra que otros proyectos sí tuvieron todo el tiempo de análisis, caso el Estatuto de Rentas, que se demoró 12 meses de estudios y debates.
Frente a la famosa palabra del "traslado", sostuvo que es un hecho grave que se suma a la serie de dudas y preocupaciones que hay en la ILC y que podrían llevar a desmantelarla.
El también liberal Luis Guillero Velásquez insistió en que de las carreras no queda sino el cansancio, con la alerta adicional frente al riesgo que se corre, ante las posibles investigaciones que se pueden venir por las decisiones apresuradas tomadas en la corporación.
"De buenas intenciones está lleno el purgatorio, aquí tenemos que ser muy concretos y serios frente a las decisiones que debemos tomar", indicó.   
El diputado Félix Alejandro Chica, conservador sierrista y ponente de la reforma de la ILC, insistió que el único interés fue modificar los estatutos, luego de 15 años sin ser actualizados y revisados. "No se trata de permitir la venta, ni la privatización, esto se ha dicho hasta la saciedad, por lo menos en manos de nosotros", aseguró.   
Un concepto similar emitió el también conservador sierrista, Jorge Luis Ramírez, quien sostuvo que  aunque hubo cambios de forma, el fondo del articulado se mantuvo, en busca de mejorar y fortalecer la competitividad de la destilería regional.
Sostuvo que pese al estigma que se ha generado, la meta es tener un mejor beneficio. "La ILC no está hoy cumpliendo su objeto social que es producir utilidades para la salud y la educación, por eso queremos darle un empujón a ese barco que está encallado para que arranque y rápidamente comencemos a ver utilidades", indicó.
 

En frases
"Los 10 votos a favor muestran que estamos entregando un mensaje de confianza a los trabajadores,   y que hemos hecho un ejercicio transparente".

Gerente de la Licorera, Jorge Iván Orozco Hoyos,

"Los cambios que hicieron eran dulces que nos estaban dando, pero en el fondo quieren dejar la empresa como una embotelladadora".

Carlos Aníbal Loaiza, presidente de Sintrabecólicas.