Asociatividad, clave para controlar el HLB

JUAN CARLOS LAYTON

LA PATRIA | MANIZALES

Si hay una palabra que hoy tienen que utilizar los citricultores más que nunca para controlar la enfermedad de los cítricos o enfermedad amarilla HLB (Huanglongbing, tal como lo conocen los chinos), es la asociatividad.

Aunque hoy Caldas tiene unos 62 citricultores afiliados y, según Fedecítricos y Citricaldas, hay coordinación para trabajar en equipo, el informe del ICA destaca que el promedio de citricultores asciende a 130 en el departamento, lo que evidencia que se requiere más integración.

El mayor problema es que Colombia tiene el insecto que transmite la enfermedad de los cítricos, conocido como Diaforina Citri, la cual se encuentra en cinco departamentos: La Guajira, Atlántico, Cesar, Bolívar y Magdalena.

El riesgo es que de las 83 mil hectáreas de cítricos que se tienen sembradas en Colombia, el 30% está en el Eje, y alrededor de 6 mil 200 hectáreas, el 7,4%, en Caldas.

Por esta razón Luis Fernando Gómez Ochoa, ingeniero agrónomo egresado de la Universidad de Caldas, agricultor y asistente técnico, promovió una charla la semana pasada, después de su visita a México, para conocer los avances para controlar esta enfermedad.

Durante la conferencia que se efectuó, bajo el nombre de "Alerta Naranja", el experto resaltó el objetivo de aprender de sus experiencias y prepararse ante un problema que, al igual que la broca en el café, llega para quedarse, motivo por el cual la principal y única tarea es controlar.

Integración

- ¿Qué deben hacer los citricultores para controlar el HLB?

Trabajar más unidos, con el fin de estar preparados, combatiendo esta enfermedad que no tiene control. La tarea que nos queda es estar atentos al insecto vector, que transmite la enfermedad. Además tenemos muchos problemas de comercialización, falta de industria y de un mayor enfoque hacia la exportación.

- ¿Qué tan bien está Colombia y el Eje Cafetero en asociatividad?

Podríamos estar mejor. En nuestro departamento está Citricaldas, con varios asociados del Quindío y Risaralda, además de otras nacionales que existen como Citrieje y Citricauca, pero el interés es avanzar más en investigación, tecnología e integración. Por eso queremos más productores comprometidos, pues estamos en el momento justo para preparar nuestros cultivos y a nuestra gente, y afrontar un problema que se nos vino encima. Un mal vecino se convierte en un problema para todos, porque no solo se trata de controlar el HLB, sino de mejorar en comercialización y producción.

- ¿El reto es cuál?

Primero que todo se tiene que pensar en mayor capacitación, formación de evaluadores y montar cuanto antes las Áreas Regionales de Control (Arco) para monitorear el insecto que transmite la enfermedad, de tal forma que todos podamos detectar las zonas más afectadas por la enfermedad y determinar las presencias más altas en las diferentes zonas del país.

Mercado

- ¿Qué retos se vienen en comercialización?

Es imperativo que montemos unas casas de empaque que nos compre la fruta, que la homogenice y que mueva volúmenes importantes al exterior, a mercados especializados, a las grandes superficies.

- ¿Cómo se hace hoy en día?

Tenemos un problema serio. Los agricultores estamos atomizados y dispersos, bajo el lema de sálvese quien pueda, mientras que los comercializadores están unidos en la Central de Abastos de Medellín, en Corabastos en Bogotá. Todos se hablan, tienen redes de información y grupos Whatsapp, con lo que simplemente nos dan duro a los productores. Por eso, hay que buscar nuevos sitios, montar industrias para producir jaleas, mermeladas y demás tareas que impliquen mayor organización.

- ¿Cómo va la tarea para exportar cítricos?

Colombia no ha incursionado seriamente. Se ha exportado algo a las Antillas, incluyendo Martinica y Guadalupe, además de el Ecuador, pero aún hay mucho por hacer, pues el comercio no supera el 10% de la producción nacional (110 mil toneladas anuales).

- ¿Y Estados Unidos?

Es un reto, pero tenemos algunos problemas. Como estamos en el trópico, frutas como la naranja no tiene un color atractivo para exportar al mercado fresco, aunque reúne todas las condiciones en contenido de jugo, azúcar y demás aspectos para la producción de jugos y concentrados.

- Con el HLB se complican esas proyecciones de exportar?

Es posible, la enfermedad no solo va a llegar, sino que nos va a castigar en productividad y calidad, por eso el reto es concientizar a todos los productores de que nos unamos para que de la mano de Corpoica, Asohofrucol y demás asociaciones, afrontemos los problemas que se nos vienen encima.

- Usted planteó que el HLB ya no es un problema fitopatológico, sino social

Sí porque el temor grande es que cuando llegue la enfermedad se eliminen árboles de manera indiscriminada y con manejos poco acertados, por eso nos toca preparar a los agricultores y a sus equipos para saber cómo monitorear y evaluar la enfermedad, necesitamos que la citricultura siga siendo un negocio sostenible.

La enfermedad

La enfermedad HLB está asociada a tres clases de bacterias: Candidatus Liberibacter asiáticus, africanus y americanus. En Colombia se encuentra el más agresivo, el asiáticus. La plaga ataca la planta. Colombia tiene el insecto que la transmite (Diaforina Citri) desde el 2007.

La afectación

La plaga afecta naranjas, mandarinas, limones, entre otros cultivos, y ya hace presencia en toda América Latina, menos Perú y Uruguay.

Cómo controlarla

1. Adquiera el material de siembra en establecimientos registrados por el ICA.

2. Haga monitoreos permanentes en el campo, revise cada 8 o 15 días.

3. Capacite continuamente al personal de su finca, y haga planes de trabajo asociado con otros productores. Nada se logra si el vecino no realiza estos planes de control.

4. Tenga cuidado con la swinglia o el mirto, plantas que se utilizan para cercar, pues el insecto se esconde en este lugar mientras fumigan los árboles, y después vuelve a atacar. Se estima que hoy en Colombia hay unas 240 mil hectáreas en swinglia, por lo que se ha pedido suspender su siembra.

5. Produzca su material de siembra en casas de malla o invernaderos, pues se evita la entrada de la enfermedad y facilita la siembra de árboles sanos.

6. Los cultivos con la enfermedad se deben erradicar de inmediato, para evitar su dispersión.

Frase

"Todos los citricultores tenemos que estar sincronizados para compartir experiencias y estar unidos con las universidades y demás entidades que nos permitan evitar que el problema sea catastrófico".

Luis Fernando Gómez Ochoa, ingeniero agrónomo egresado de la Universidad de Caldas, agricultor y asistente técnico.