Nibali celebra y toma ventaja

EFE | LA PATRIA

El italiano Vincenzo Nibali logró ayer su tercera victoria en el Tour de Francia al imponerse en la decimotercera etapa, con final en la estación de esquí de Chamrousse, el primer final de alta montaña de la edición, por lo que consolidó su liderato.
El siciliano agrandó la ventaja con sus rivales, el principal de ellos, el australiano Richie Porte, que era segundo de la general, sufrió una crisis en el ascenso al puerto final y dijo adiós a sus opciones de victoria al perder casi nueve minutos en la meta.
La segunda posición pasa a estar ocupada por el español Alejandro Valverde, que ayer fue cuarto, a 50 segundos del ganador. El murciano consolida sus opciones de lograr el podio de París.
Nibali dio un golpe de efecto casi definitivo al Tour. Respondió al ataque de Valverde en las rampas de Chamrousse a falta de 10 kilómetros para el final y, cuando quedaban seis, dejó plantado al ciclista del Movistar y al francés Thibaut Pinot, el único que estaba con los mejores.
El italiano del Astana alcanzó a dos fugados, el polaco Rafal Majka (Tinkoff) y al checo Leopold Koning (Netapp), con quienes rodó unos kilómetros, hasta que a falta de tres se marchó solo a buscar su cuarta victoria de la temporada y la trigésimo tercera de su carrera.

20 años de gloria para Cacaíto
El ciclista caldense Nelson Cacaíto Rodríguez recuerda como si fuera ayer la hazaña de hace 20 años cuando ganó la etapa 17 del Tour de Francia en la estación de Val Thorens. La fecha memorable se cumple mañana.
“Fue un día de mucha alegría y el cual recuerdo siempre. Fue una etapa difícil con mucho trayecto en ascenso. Sin embargo, se pudo ganar y ante un ciclista como el ruso Piotr Ugrumov, quien hasta ese momento era el segundo de la general”, explicó Cacaíto.
Por esos días, el manizaleño estaba radicado en Italia y corría para el equipo ZG Movile. En esa edición del Tour, el pedalista que se alzó con el título ue el español Miguel Induraín, mientras que Cacaíto se ubicó en la casilla 16 de la general.
Nelson aspira a que en el futuro otros pedalistas logren algo similar: “Por el poco apoyo a los ciclistas de Caldas es difícil, pero uno espera que sí se pueda dar”.