Osvaldo Hernández
LA PATRIA | Manizales
A los hinchas del Deportes Quindío los sacaron del estadio Palogrande faltando 15 minutos para finalizar el partido que le ganaron 1-2 al Once Caldas, el único que han celebrado en la Liga Postobón. No pudieron festejar la victoria de su equipo porque los sacaron arreados del estadio.
"Eso no debería ocurrir si todo está planeado y presupuestado", dice Gustavo Morelli, representante de seguridad de la Federación Colombiana de Fútbol.
Pero ocurrió. A la luz de la norma se violó el artículo noveno del Estatuto del Aficionado en Colombia, creado el 16 de mayo del año pasado mediante el Decreto 1007. Ese artículo es claro: "… el aficionado tiene derecho a permanecer en el estadio o en las instalaciones deportivas donde se realice el partido de fútbol hasta que el evento finalice por completo, salvo que el mismo incurra en alguna infracción contemplada en la normatividad vigente".
¿Y por qué se creó el Estatuto del Aficionado? Porque así lo ordena la Ley 1270 por medio de la cual se creó la Comisión Nacional para la Seguridad, Comodidad y Convivencia en el Fútbol.
Desconocimiento
Otro hecho que muestra la improvisación en las determinaciones o el desconocimiento de la norma ocurrió el pasado fin de semana en Manizales, en el juego Once Caldas - Santa Fe. El Protocolo, que apenas se firmó el 1 de abril pasado, cuando ya se habían jugado tres fechas de la Liga en el Palogrande, indica que sí podían entrar menores de 14 años al partido.
El documento ordena que menores de 14 años no pueden entrar a la tribuna de norte, pero a las otras pueden acceder los menores de 10 siempre y cuando vayan acompañados de un adulto.
Lo grave fue que quien lo propuso fue el mismo Club (Nicolai Salazar) y no algún organismo de seguridad o control.
Hoy, cuatro años después de haberse firmado, la Ley del fútbol y los decretos reglamentarios se cumplen a medias. Quizá lo que todos los actores reconocen (dirigentes, directivos y organizadores) es que están articulados los procesos que permiten detectar las responsabilidades que se tienen en el desarrollo de un partido.
Sin embargo, no faltan los peros. Arbitrariedades como la citada con los seguidores del Quindío en Manizales, la no carnetización de las barras, la falta de prevención y atención, la fragilidad de la justicia con los infractores y la falta de inversión en escenarios son los lunares que se advierten.
Un proceso lento y seguro
Gustavo Morelli, de la Federación Colombiana de Fútbol, dice que implementar la ley 1270 y los decretos reglamentarios es un proceso. Incluso, pregunta que si en Inglaterra se demoraron 12 años, ¿por qué en Colombia no se pueden demorar lo mismo? "Han pasado cosas muy buenas: la creación y las articulaciones en todas las plazas donde hay fútbol en Colombia. Además, se crearon programas como Goles en paz e Hinchas por la paz", indicó.
Agregó que: "tenemos planes de emergencia y contingencia, prevenimos e intervenimos. Con el paso del tiempo tendremos que profesionalizar a todas las personas que trabajan con el fútbol". Admite que si hay un lunar es la judicialización: "no es fácil".
Al aterrizar la Ley a cifras indica que antes de entrar en vigencia tiene antecedentes de 18 incidentes en los estadios, y que hoy, con todo articulado, entre el 2011 y 2012 suman 12 incidentes: 9 fuera de los estadios y 3 en ellos.
Paula Andrea Sánchez, secretaria de Gobierno de Manizales, explicó la semana antepasada que nacionalmente se ha avanzado poco: "por eso decidimos, por orden y seguridad, carnetizar a las dos barras".
Jhon Jairo Vásquez, líder de Holocausto Norte, asegura que la Ley no opera: "hay muchas fallas, se toman determinaciones arbitrarias y son diferentes en cada plaza".
Para Vásquez, la Policía no va más allá del control normal de un partido: "no hace nada, ni nos capacita, ni se capacita. Ahora los clubes tampoco hacen nada con la carnetización".
La Ley dice que habrá una comisión proveniente de las comisiones séptimas del Senado y de la Cámara de Representantes que evaluará cada año el proceso. El año pasado lo hicieron.
En términos generales se coincide que falta conocimiento para aplicar y desarrollar las normas.
Autor reconoce lunares
El exsenador antioqueño Mauricio Parodi Díaz fue el autor y ponente de la Ley 1270. Ahora presidente de la Liga Antioqueña de Fútbol dice que "hay áreas para valorar o evaluar". Primero, la organización de los partidos, porque permitió ordenar y detectar los actores en cada juego y sus funciones en el mismo. "En eso avanzamos mucho y ordenamos las cosas, independiente de las fallas que se tengan en la toma de las determinaciones".
Al político antioqueño le preocupa la gran cantidad de policías que se destinan para cada partido: "se dejan de cumplir con otras obligaciones para atender un partido. He visto Policía de Popayán yendo hasta Pasto para ayudar en un partido".
Otro detalle es la inversión que se les debe hacer a los escenarios para darles garantías a los aficionados: "ahora resulta que los estadios son escenarios del Estado y el fútbol, privado".
Por eso le propondrá al Ministerio del Interior que los estadios sean cedidos o construidos mediante concesiones: "esto le permitiría a los privados hacer la inversión y recuperarlo en el tiempo".
La no carnetización de los integrantes de las barras es otro hecho que deja mal parada a la Dimayor.
Todos recalcan la importancia de crear el Plan Decenal de Seguridad, Comodidad y Convivencia 2013-2023, el cual busca ser una herramienta de diálogo que ayude de manera efectiva a preservar convivencia y la seguridad ciudadana en los estadios del país.
Sin carné y sin limosnas
Hace 15 días LA PATRIA contó que las barras de fútbol debían estar carnetizadas hace un año. Este tema es sensible porque los grupos consideran que detrás hay un gran negocio, dada la cantidad de personas que se deberían aceditar en el país. Sin embargo, tanto la Dimayor como los clubes dicen que aún no hay nada definido porque la idea no es hacer un carné para identificar, sino crear un mecanismo de control y una opción para crear mercadeo alrededor de todos los fanáticos.
Otro hecho que se tratará los próximos días será el problema en los alrededores de los estadios, donde se estacionan muchachos pidiendo plata para ir al juego: "muchos de ellos no van al partido, por eso haremos una campaña para que nadie les regale un peso y, si no tienen dinero, que no vayan al estadio", dice Jhon Jairo Vásquez.
Holocausto, líder en programas
Toda la semana pasada estuvo reunido en Bogotá el Colectivo de Barristas Colombiano, creado por Juan Manuel Bermúdez, padre de Luis, un hincha asesinado por las Autodefensas.
Lo integran todas las barras colombianas, excepto Los de Sur, del Nacional, para que el barrismo sea reconocido y no estigmatizado, como, según ellos, ocurre en muchas partes.
Jhon Jairo Vásquez, de Holocausto Norte, asegura que su barra es pionera en el país en programas como Hinchas por la paz, el club deportivo, la apertura de fronteras sin agresión y otros aspectos.
Por eso dice que el Eje Cafetero servirá para hacer una prueba piloto: "la idea es determinar una idea en cuanto al protocolo de los partidos". Planean hacer una reunión en la ciudad el 31 de mayo con la presencia de los comités de Pereira, Armenia y Manizales.
El protocolo de un partido de fútbol lo definen el alcalde local, el secretario de Deportes, el comandante de la Policía, el presidente de la liga de fútbol, el presidente del club y el director local de Prevención y Atención de Emergencias y Desastres. En Manizales nunca han invitado a la Liga.
Van, con voz y sin voto, el administrador de los escenarios deportivos, el director del programa de convivencia en el deporte del gobierno local, los organismos de socorro, el delegado de la Personería y un delegado de las barras organizadas.
"Estamos construyendo": Mininterior
Diego Fuentes, de la subdirección de seguridad y conviencia ciudadana del Ministerio del Interior, explicó algunas de las inquietudes que se plantean hoy en el país con las normas del fútbol.
"Estamos construyendo los decretos y creando las comisiones para operar como debe ser".
Explica el funcionario que mediante el Plan Decenal de Conviencia en el Fútbol, proyectado a 10 años, harán el diagnóstico y crearán el plan de acción para mejorar el comportamiento de todos los actores del fútbol.
Sobre los excesos de la Policía indicó: "eso lo hablamos acá en Bogotá y es de lado y lado, sin embargo, hay compromiso para mejorar, tanto de las barras como de los organismos de control".
Ratificó lo dicho por la Dimayor en el sentido de emitir un carné único y funcional en todo el país, pero además, que no solo sirva como un documento de control, sino de servicios para todos.
"Hoy, mientras no hayamos encontrado otras soluciones, debemos poner la cantidad de agentes que sea posible para coordinar un partido, lo contrario, es correr riesgos", indicó Fuentes sobre la declaración de Mauricio Parodi por el exceso de policías en los estadios.
Confirmó que se han hecho capacitaciones en todo el país y que puede ser normal que funcionarios que hacen parte de las comisiones desconozcan lo que se debe aplicar a la hora de realizar un protocolo.
"Lo demás es ajustar, mejorar, socializar la ley y los decretos, y conciliar".
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