El exjugador del Once Caldas, marcado por un capitán campeón del mundo

Osvaldo Hernández

LA PATRIA I Manizales

Fabio Cannavaro es una figura del fútbol mundial. Fue el capitán del seleccionado italiano que levantó la Copa Mundo en Alemania 2006. Ese logro, más su figuración le permitió obtener el Balón de Oro, la máxima distinción que en esa época daban conjuntamente la revista France Football y la FIFA.

Jhon Jairo Carmona fue un futbolista antioqueño que actuó 15 años en la rama profesional y después se hizo técnico. Su carrera la hizo con Once Caldas, Medellín, Santa Fe y Nacional.

Carmona, cargado de sueños e ilusiones, llegó a Parma (Italia), donde se encontró y conoció a Cannavaro, que apenas despegaba en el fútbol siendo defensor central del Parma.

Jhon Jairo, que jugó con el Once Caldas entre 1977 y 1981, arribó allí gracias a Faustino Asprilla. Ambos coincidieron en el Atlético Nacional, ganando la Copa Libertadores de América de 1999.

Ya como técnico, fue a ver los trabajos de los equipos italianos e hizo muy buena relación con Nevio Scala, técnico en ese entonces del Parma. A su lado vio varios trabajos y participó de algunos.

Un día cualquiera llegó al entrenamiento con Asprilla y se encontraron con Cannavaro. "El Tino" se puso a conversar con el defensor italiano y Carmona se retiró por respeto a ambos.

Esperó unos minutos hasta que Asprilla lo llamó y lo involucró en la conversación. Carmona recuerda lo que le dijo el atacante vallecaucano: "Cómo te parece lo que está diciendo este loco, que quiere ser el mejor jugador del mundo". Carmona recuerda que Asprilla lo dijo de una manera coloquial, espontánea, pero irónica.

Siete años después, Fabio Cannavaro levantó la Copa Mundo como capitán de la selección italiana y Jhon Jairo Carmona recordó aquel episodio en las afueras del campo de entrenamiento del Parma.

"Es una lección, uno debe ser de metas en la vida, sin temores y confiado en sus capacidades".

Carmona tiene hoy 63 años y vive en Medellín. Fue campeón con Atlético Nacional en 1991 y 1994; en la Copa Libertadores de 1989, en la Copa Merconorte y la Copa Interamericana. Fue campeón con el Once Caldas, como asistente técnico en el 2009 al lado de Javier Álvarez.