El colombiano Esteban Chaves es líder de la Vuelta a España

EFE | LA PATRIA

El colombiano Esteban Cháves, del equipo Orica, es el primer líder oficial de la Vuelta a España al imponerse en la segunda etapa disputada entre Alhaurín de la Torre y Caminito del Rey, de 158,7 kilómetros, en la que los favoritos establecieron las primeras diferencias.

Cháves arrancó en los últimos metros para imponerse por delante del holandés Tom Dumoulin (Giant) y del irlandés Nicolas Roche (Sky), con un tiempo de 3h.57.26.

En la lucha de los favoritos Joaquim "Purito" Rodríguez (Katusha) fue el más fuerte y junto al colombiano del Movistar Nairo Quintana cruzó la meta a 26 segundos del ganador, pero 5 segundos por delante de Alejandro Valverde y Chris Froome.

El primer final en alto afectó más al italiano Vincenzo Nibali (Astana), que cedió más de un minuto, lo que le aleja ya de la general, en la que Chaves tratará de defender "todo lo que pueda" el maillot rojo.

La jornada comenzó con una fuga de 6 corredores; Przemyslaw Niemiec (Lampre), Davide Villella (Cannondale), Walter Pedraza ( Colombia), Bert Jan Lindeman (LottoNL-Jumbo), José Gonçalves (Caja Rural) y Matteo Montaguti (Ag2r). La cabalgada no tuvo frutos, pues el Movistar y el Katusha la mantuvo a raya en todo momento y, a falta de 11 kilómetros de meta, el sexteto ya formaba parte del pelotón.

Unos 20 kilómetros antes, una caída masiva estremeció al pelotón. El australiano David Tanner (IAM), equipo que ya había perdido por otra caída italiano Pelucchi, fue trasladado al hospital en ambulancia, así como el polaco del Lampre Przemyslar Niemiec (Lampre), quien antes había sido alcanzado.

El accidente le costó caro a Nibali, uno de los grandes favoritos. El "Tiburón" echó pie a tierra y enseguida perdió contacto con el pelotón. Al paso por Álora, a 18 de meta ya había cedido 1.30 minutos, por lo que tuvo que darse un buen "calentón" para enlazar con el grupo principal a falta de 11, cuando ya el pelotón rodaba compacto.

La aproximación al Alto de la Mesa fue un duelo entre el Movistar de Valverde y el Katusha de "Purito", que tenían marcada la etapa con un final a la medida de sus características, sobre todo del murciano.

El primero en arrancar fue Nairo Quintana, pero no pudo evitar que se le pegaran a rueda Dumoulin y Roche, con quienes abrió hueco. Más tarde se unió a ellos Esteban Cháves, quien tenía marcada la etapa para estrenar su palmarés en una carrera grande.

"El Chavito" le ganó el duelo al holandés y se vistió de rojo, el primero de verdad de la 70 edición. Los favoritos midieron las fuerzas y las diferencias fueron más significativas de lo esperado. Aún sin grandes márgenes, alguno salió escaldado. La Vuelta empieza cuesta arriba para Nibali. El resto en un puñado de segundos.

Mañana, se disputa la tercera etapa entre Mijas y Málaga, de 158 kilómetros.