Es común observar en las calles de Manizales, cuando uno se desmonta de su vehículo, que alguien se le acerque y le diga "bien cuidadito". Esos personajes que abundan se están apoderando de nuestra ciudad, y si no se les da dinero, entonces, actuando como bellacos, hacen estrías en la pintura del coche con una puntilla.
Lo anterior puede ser una secuela de la podredumbre que padece nuestro país, pues estos "ciudadanos" actúan con el más cínico desacato a la ley, y con un desdén absoluto hacia las autoridades y por las personas de bien. Más preocupante es el hecho de que ellos consideran que lo que hacen es "justo". Todo esto es muy peligroso, pues resulta de una visión torcida de la realidad; ellos creen que el rompimiento de la ley es permisible si beneficia a quien la quebranta. Tenemos la obligación de educar a esos sujetos, pues esto lleva a una creciente descomposición y por ende al aumento del crimen. Solo con educación se puede lograr que esas actitudes cambien y que nuestra sociedad recupere los principios de ética y convivencia social, los cuales se están evaporando.
¿Cuál podría ser el punto de apoyo para transformar a nuestro país? Arquímedes de Siracusa decía: "Dadme un punto de apoyo y una palanca y moveré el mundo". ¿Cuál sería la palanca que nos puede mover hacia un mejor destino?
Entre los múltiples problemas que nos aquejan, es imposible separar las causas de las consecuencias. Miseria, impunidad, ignorancia, violencia, inseguridad... Son muchos los males que impiden el bienestar común, siendo muy difícil indagar si existe una verdadera solución para todos los problemas.
Las nuevas tecnologías y el mundo cibernético pueden ser una ayuda para solucionar los problemas de cualquier país, ofreciendo soluciones insospechadas, pero... debe existir voluntad de cambio y cultura. Un ejemplo sería, si a través de las redes de comunicaciones que ofrece el Internet, conectásemos a toda la población con la dimensión virtual del mundo, entonces sería posible evaluar y analizar el crecimiento económico de los diferentes países, incluido el nuestro; de esta manera se analizaría la contratación laboral, que a su vez demandaría bienes y servicios, generando mayor producción y por lógica más empleo.
Aunque, para abastecer las necesidades de capital humano resulta imprescindible y necesario capacitar, en eso estamos en pañales. Con Internet, resolveríamos parcialmente el problema de la educación, -elemental, media, técnica y superior-, cambiando de paso nuestra mentalidad tercermundista.
Si contáramos con esa conectividad, la seguridad pública sería distinta, organizándonos de manera más efectiva, siendo posible para la ciudadanía acompañar los procesos para la impartición de una justicia más diáfana y transparente, con dinamismo para la resolución de los juicios. ¡No creo que esté hablando "pendejadas"! Por si esto fuera poco... la gran mayoría de colombianos, se podrían mantener informados del diario acontecer nacional, apalancando con acciones específicas las necesidades más importantes. Por eso, la educación y la evolución tecnológica, representan una oportunidad única para transformar nuestra realidad.
Nuestra economía marcha bien; el gobierno aun no ha claudicado en la responsabilidad de determinar las directrices del manejo económico de nuestro país, pese al dinero fácil de los corruptos y del narcotráfico. Necesitamos con urgencia el acceso de todos los colombianos, al nuevo mundo digital a través de una buena "banda ancha", con un costo, cantidad y calidad que justifiquen la inversión. Se requiere también de una política que promueva la inversión en infraestructura y en telecomunicaciones, generando de paso unas condiciones favorables para la sana competencia. Necesitamos supercarreteras de la información. Por eso, bienvenida la televisión digital.
Es necesario legalizar e impulsar el desarrollo de grupos mediáticos en diferentes áreas, que atiendan las diversas comunidades, especialmente las más apartadas y desconectadas. Aunque... ¿no será que la gran falla de la educación, está en que los educadores, a pesar de sus títulos, no saben educar?
Por último, creo que el Ministerio de Transporte debe dividirse en varios viceministerios, pues las necesidades y responsabilidades son muchas y al Ministro no le alcanza el tiempo.
P.D.: Algunos funcionarios públicos no toman café, porque eso los desvela en la oficina.
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