Jalisco lindo y querido

Manizales tiene potencial en aquellas cosas que hicieron famoso a Silicon Valley, afirmó recientemente uno de los economistas y columnistas más reputados del país. También concluye el analista, que para lograrlo, es necesario un tejido social proactivo con el que únicamente cuentan regiones como Antioquia. Silicon Valley es una región al norte de California, famosa porque es hoy el origen de gran parte de la tecnología que utilizamos día a día. Facebook, Ebay, Apple, Yahoo y otras importantes compañías tienen sus casas matrices en esta región de los Estados Unidos.

Pero como uno aspira a llegar al cielo y finalmente llega a las estrellas, podríamos decir que el cielo es Silicon Valley y las estrellas Jalisco, el recientemente llamado Silicon Valley Mexicano.

¿Porque Jalisco?

Hace pocos días, un colega amigo me contaba de su reciente experiencia en un viaje al estado mexicano. Contaba esta persona de lo impresionante que se ha convertido Jalisco en materia de innovación originada en las TIC (Tecnologías de la Información y Comunicaciones). En los últimos 15 años, a esta ciudad han llegado todo tipo de gigantes de la informática. Intel, Hewlett-Packard, Dell e IBM, Tata Consultancy, entre otras, han decidido montar monstruosas plantas en el estado mexicano. Pero estas compañías no solo han llegado, en la última década han multiplicado sus ventas y los empleos que generan.

¿Por qué? Han hecho lo que toca. Han sabido concebir y hacer realidad algo tan poco tangible y complejo como es la innovación. Los jaliscienses saben que quien innova son las empresas y, por lo tanto, hay que incentivarlas para que al hacerlo generen beneficios para toda la sociedad.

Importante destacar algunos elementos de la transformación que ha sufrido esta ciudad mexicana.

Entre el año 2000 y el 2010 el porcentaje de hogares con acceso a computador pasó de 11% a 29%. Además, en los últimos años, Jalisco ha creado agresivos programas con el propósito de aumentar el uso del Internet para todos los ciudadanos.

Esta ciudad mexicana ha logrado disparar el crecimiento del gasto en ciencia, tecnología e innovación. En 2007 éste era 0,013% del PIB, mientras en el 2011 llegó a 0,4%. Más significativo aún, entre 2006 y 2010, el gasto total en innovación (pública y privada) pasó de 0,56% a 1,2% del PIB. Tres cuartas partes de este gasto son hechos por el sector privado.

Mientras en el 2001 los programas de Jalisco para el sector de TIC no generaban ni 10 empleos al año, en el 2011 creaban 7.400. Es decir, entre el 2001 y el 2011 por cuenta de las TIC se han generado 24.000 empleos nuevos. Para ponernos en perspectiva, 7.000 empleos es la cantidad de gente que emplean los tres Call Centers más grandes de Manizales.

Entre el 2004 y el 2012, la industria dedicada al desarrollo de software en Jalisco ha crecido 14%, representa el 23% de la producción del sector en todo México.

También cabe destacar que Jalisco se ha convertido en el motor fundamental de la sofisticación de la industria electrónica mexicana, pasando de maquilas a bienes con alto valor agregado y diseño. Por ejemplo, en 1968 Motorola escogió el estado mexicano para instalar su primera planta de semiconductores en Latinoamérica. Hoy, en Jalisco están ubicados ocho de las cien compañías más importantes del mundo de la electrónica. No en vano, el estado se ha convertido en potencia mundial para el diseño de los semiconductores, tanto que hoy representa alrededor del 20% de la capacidad mundial en el diseño de estos sofisticados aparatos.

Hacia allá debe ir Manizales. Las últimas noticias sobre el gran potencial que tenemos en la materia son alentadoras. Pero hay que seguir trabajando y ambicionar con convertirnos en el Sillicon Valley colombiano.

¿Cómo lo hizo Jalisco y qué reflexiones podemos hacer en Manizales? Ese será el tema de mi próxima columna.