El jueves pasado el colectivo Estoy con Manizales (ECM) realizó la presentación de su propuesta de un Modelo de Desarrollo Basado en Conocimiento. Un tema muy pertinente en una ciudad que se ha caracterizado por un especial interés por la educación y en donde las personas tienen una forma de pensamiento especial y una valoración por los temas relacionados con el conocimiento, la ciencia y la innovación. Con frecuencia escucho a la gente de afuera reconociendo esto de los manizaleños, algo que de verdad me produce orgullo y felicidad.

Quiero dar un poco de contexto sobre Estoy con Manizales porque aunque muchos pueden conocerlo, he renunciado a la obviedad y prefiero explicar. Lo que hoy llamamos ECM, es un proceso de construcción colectiva que busca acuerdos sobre un norte para la ciudad de la mano de sus habitantes, lo que implica construir desde distintos imaginarios con respeto por la diferencia, aunque es mucho más difícil.

La historia de este grupo empezó en 2006 cuando se llamaba Manizales 2019. Desde allí se creó un semillero que ha mantenido encendida la llama de construir una visión de ciudad de manera colectiva; 2019 tuvo una época muy fructífera, entre otras y en mi opinión, generada por un espacio donde hablar desde lo que cada quien pensaba ya no era mala educación, aunque estuviera "Fuera de la Caja" y eso acercó de una manera muy especial a las personas que lo vivieron.

2019 estuvo en estado de adormecimiento por un tiempo y este semillero hizo un esfuerzo por recuperarlo y, gracias a ello, en 2010 este proceso se reactivó y se renombró como Estoy Con Manizales. Para mí un nombre que invita no solo a la acción, sino también a cada uno de nosotros a hacer parte de lo queremos que pase. "Construcción colectiva que requiere del aporte de cada uno".

En esta segunda etapa, el proceso empezó por poner de acuerdo a un grupo de ciudadanos en torno a una visión de ciudad que terminó siendo un poderoso e incluyente ejercicio que hasta ahora ha generado gran empatía. Luego continuó con un juicioso trabajo de diagnóstico de la ciudad que se plasmó en un diagrama sistémico, que incluye, como en todo lo que hace el grupo, las brechas y por supuesto también lo que tenemos para llegar a donde se sueña.

Posteriormente, se crearon unas mesas temáticas para trabajar de manera focalizada y fluida con voluntarios más expertos en los principales retos transformadores. El proceso es realmente apasionante y, como siempre, lo que me interesa con esta columna es contarle que esta maravilla existe en nuestra ciudad e invitarle a que lo conozca más y ojalá participe. Para tal fin, le comparto la página web www.estoyconmanizales.com

Esta iniciativa siempre le ha dado significativa importancia a la Educación como la base, no solo para el avance de los territorios, sino también para el bienestar de los ciudadanos, para el desarrollo de su sentido crítico y hasta para su felicidad. De allí que la mesa de Desarrollo Económico desee proponerle a la ciudad un Modelo de Desarrollo que se fundamenta en el concepto de que un territorio del conocimiento genera riqueza, bienestar y calidad de vida a través del conocimiento, de la innovación y del aprendizaje, soportado en la articulación Universidad, empresa, estado y ciudadanos.

Para lograrlo tenemos cosas ya conquistadas que debemos valorar como lo es el hecho de contar en la región con Universidades de excelente nivel que trabajan cada vez mejor y más unidas, centros de investigación, capital humano con elevado nivel educativo, industrias de alta intensidad tecnológica y científica, desarrollo de nuevos sectores con mayor nivel de sofisticación como las TIC´s, entre otras. En todas ellas, requerimos avanzar y evolucionar pero no estamos en cero. Reconocemos que aún nos faltan grandes retos por emprender y particularmente nuevos focos por establecer, pero vamos por la senda correcta.

Si alguna vez usted ha pensado que Manizales no sabe para donde va, lo invito para que conozca más de este proceso, a lo mejor se siente identificado y quiera participar.

Se reconoce por propios y ajenos que aquí hay un gran capital social, esto Porque ¡En Manizales si pasan muchas cosas… y muy buenas!