Siguiendo con mi compromiso de contarles sobre las cosas que pasan en Manizales y en Caldas que son muy valiosas, empiezo hoy con el Índice Departamental de Competitividad. Caldas ocupó el cuarto lugar en dicho escalafón. Esta buena noticia la recibimos con la primera medición realizada en 2013 por el Consejo Privado de Competitividad.

En 2006 se creó el Sistema Nacional de Competitividad, un importante avance para coordinar los esfuerzos relacionados con la competitividad y la productividad en el país con énfasis en las regiones. El Sistema busca integrar los actores públicos y privados encargados de estos temas y establecer roles claros y precisos, así como definir el conjunto de reglas que rigen su interacción.

Ese mismo año se creó, por iniciativa de un grupo de empresarios acompañados de la academia, el Consejo Privado de Competitividad (CPC), una organización de carácter privado, sin ánimo de lucro, cuyo objeto es contribuir de manera directa en la articulación de estrategias, que permitan lograr mejoras significativas en la competitividad del país. Desde el 2007 el CPC publica el Informe Nacional de Competitividad que ha sido un gran insumo para la toma de decisiones y para la medición de la evolución de las diferentes acciones. En 2013, por primera vez se realizó el índice Departamental, con el apoyo del Centro de Pensamiento en Estrategias Competitivas de la Universidad del Rosario. En esta primera versión, Caldas ocupó el cuarto lugar después de Bogotá DC, Antioquia y Santander, entre 22 departamentos estudiados.

El índice mide el desempeño de los departamentos en diez pilares fundamentales: instituciones, infraestructura, tamaño del mercado, educación básica y media, salud, medio ambiente, educación superior, eficiencia de los mercados, sofisticación y diversificación e innovación y dinámica empresarial.

La ubicación lograda por Caldas fue jalonada por el pilar Instituciones, en el cual obtuvo un puntaje de 10 sobre 10 en las siguientes subdivisiones: la facilidad para hacer negocios, el buen cumplimiento de contratos y la facilidad para registrar propiedades. En el pilar Educación las fortalezas fueron: los buenos puntajes en las pruebas Saber Pro y la calidad de los docentes oficiales. Otros buenos desempeños estuvieron en el alto nivel de formalidad, en Infraestructura, por la calidad de los servicios públicos, las vías pavimentadas, la conectividad y la cobertura en educación básica y media, entre otras.

No nos va bien en Salud, cuyas subdivisiones Inversión en salud pública, prevención y atención de desastres, protección integral a la primera infancia, tasa global de participación en el mercado laboral y cobertura de la vacuna triple viral, requieren atención urgente.

Para las personas que tuvimos la oportunidad de estar en la entrega del informe, fue muy honroso recibir ese cuarto puesto. No es un secreto para nadie que hacemos esfuerzos locales muy grandes; es claro que en competitividad cada quien tiene un rol, las instituciones facilitamos, capacitamos y gestionamos para que los empresarios puedan ser más productivos, pero es a ellos a quienes les toca competir. Sin embargo, ahí no terminan las responsabilidades; los gobiernos locales y el nacional deben generar las condiciones para que se geste la competitividad, con reglas de juego claras, infraestructura adecuada, políticas públicas que la promuevan, entre otras; y yo me pregunto ¿en qué lugar estaríamos si además de los esfuerzos locales contáramos con el apoyo decidido del Gobierno Nacional, por ejemplo en temas de infraestructura? Pero bueno, también habla bien de nosotros el no estar solo esperando la actuación del Gobierno Nacional y que realicemos esfuerzos locales que nos acerquen al propósito de ser una región competitiva y con calidad de vida; aunque el rol del Gobierno Nacional es de vital importancia e irremplazable.

Otra de las cosas buenas que ha pasado en Manizales es la convocatoria que recibió el manizaleño Mauricio Salazar Velásquez para hacer parte del equipo Dakar Café de Colombia 2015, que por estos días se encuentra en Marruecos entrenando. ¡En Manizales y Caldas sí pasan muchas cosas… y muy buenas!