Decenas de titulares de prensa han expuesto el carácter histórico del nuevo Congreso. Una etiqueta fiel a la realidad que vive el país y el cual, como nunca antes, experimenta movimientos en su estructura ejecutiva y legislativa, los cuales en su mayoría están mediados por el denominado proceso de paz.
Un proceso que requiere dos elementos trascendentales: reconocimiento real a las víctimas de las Farc y una plataforma jurídica que propenda por sentar las bases fundamentales de un escenario de postconflicto absolutamente centrado en "pasar de la igualdad retórica ante la ley, a la igualdad real ante la vida", frase célebre de Jorge Eliécer Gaitán.
Esta igualdad debe reflejarse en un Estado que reserve garantías para las regiones, toda vez que son los departamentos y municipios la raíz que nutre el escenario político colombiano. Sin embargo cada vez se ven más sometidos a una agudización del centralismo y un menosprecio por la llamada territorialidad.
En este orden de ideas es voluntad colectiva del Partido Liberal ser protagonista de una fuerza democrática y social que no solo apoye el actual proceso de Paz -sentando posición vehemente ante las actuales intimidaciones y ataques a la población civil que van desgastando la paciencia de la opinión pública- sino que también se sume a tareas constructivas de equidad y convivencia.
Este Congreso, que ya ha mostrado intenciones de personalizarse entre quienes se proclaman como la nueva derecha del país y los que enarbolan las banderas de la izquierda; no puede caer en el unanimismo que seguramente dará sombra a las reales y pertinentes propuestas legislativas que reclama la ciudadanía.
Como vocero de la bancada Liberal en la Cámara de Representantes daremos impulso a proyectos propios como la ley que permitirá el mínimo vital para los servicios públicos, la disminución del costo de los combustibles, la ley del último empleo y la reforma a la ley de infancia, adolescencia y juventud para darle herramientas a las autoridades frente al aumento de menores cometiendo delitos de alto impacto.
Le daremos voto positivo; previo análisis de su eficacia y pertinencia, a las ya anunciadas reformas que radicará el ejecutivo sobre el re-equilibrio de poderes, la reforma a la salud, reforma electoral y una reforma al sistema educativo.
Desde el trabajo en la comisión cuarta constitucional de presupuesto será propósito agilizar ante el Gobierno central la inclusión de las partidas necesarias para el avance de los sonados proyectos de infraestructura en Caldas. El gobierno Santos II debe pasar de las promesas de campaña al cumplimiento de los acuerdos con los caldenses. Seremos agudos veedores.
Y por último; no menos importante, los pasos renovadores del Partido Liberal en Caldas seguirán siendo incluyentes. No se trata de tierra arrasada. Una oposición interna salvaje no encontrará eco en nuestro propósito de brindar garantías partidistas a quienes queremos un partido electoralmente fuerte y con amplia capacidad de decisión y gobierno.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015