La siguiente carta, editada conservando la esencia, les fue enviada hace cuatro meses a 26 personas entre las cuales se encontraban gobernantes, directivos de la educación superior y de la asistencia en salud.
Líderes universitarios y de la salud:
Con el debido respeto y consideración que me merece cada una de sus instituciones y ustedes en particular, me permito hacerles llegar una reflexión sobre la necesidad de todos ustedes, que tienen relaciones con el sector educativo en el área de la salud y con el sector asistencial, de congregarse alrededor de la tesis sobre la necesidad de un hospital universitario para Manizales, Ciudad Universitaria, desde hace 70 años.
Manizales y el Departamento necesitan de un hospital universitario y en ello hay plena convicción por parte de quienes han trasegado de manera intensa ambos sectores. No es la construcción de un nuevo hospital, proyecto que podrá ser realidad en un futuro con dineros de la nación o mixtos. Han existido y existen falsas interpretaciones. Por el momento es simplemente que se establezcan alianzas entre una, dos o varias instituciones de atención en salud y educativas, que tengan sede en Manizales y que puedan completar los requerimientos actuales de la Ley 1438 del 2011, en su artículo 100 sobre hospitales universitarios.
Es por ello que es necesario que entre ustedes surja quien o quienes deben liderar la idea de hacer realidad un Hospital Universitario para Manizales y que pueda ser aprovechado por todas las entidades educativas que tienen estudios superiores en salud. Los caldenses se lo merecen.
Para la comunidad es la culminación de un permanente deseo de una atención integral y de inigualable calidad. Este es el primer objetivo de un hospital universitario en donde desde todos los ángulos, incluyendo el concepto científico multidisciplinar, para beneficio de los pacientes y sus familias.
A muchos les preocupan los costos, o mejor dicho las inversiones en salud. Hay que diseñar modelos y tener direcciones colegiadas entre salud y educación que permitan que el gerente o director tengan líneas definidas de administración actual y de proyección.
Hay muchos ejemplos: el Hospital San Vicente de Paúl Fundación de Medellín, el Hospital San José de Popayán, el Hospital Evaristo García de Cali, el Hospital Ramón González Valencia de Bucaramanga y el Hospital de Cartagena para mencionar los estatales y hospitales privados como el San José, el San Ignacio y la Fundación Santa Fe de Bogotá. Todos tienen una misión fundamental que hace que los estudios en salud tengan un elevado y calificado respaldo asistencial y conviertan los estudios superiores en verdaderas escuelas, que es a lo que se debe llegar en Manizales.
Caldas y Manizales deben y pueden contar con un hospital universitario, solo se necesita la intención política, en el buen sentido de la palabra, la intención académica y la intención asistencial. Invito de nuevo a que entre ustedes estudien y si lo tienen a bien, se congreguen para asumir la nueva responsabilidad social que les compete frente a sus instituciones y a la sociedad caldense.
Escribo solo con el afán de que surja definitivamente un proyecto, que es plausible y posible para convertir a una o más entidades asistenciales en Manizales en verdaderos hospital o clínica universitaria.
Con sentimientos de inmenso aprecio para cada institución y para cada uno de los receptores de este mensaje.
Se recibieron respuestas del señor Alcalde de Manizales, de su secretario de Salud Pública a nombre de varios funcionarios y el comentario personal del maestro Antonio Duque Quintero, decano de Ciencias de la Salud de la Universidad de Manizales. Sin embargo, el destinatario de las respuestas, cualesquiera, no debe ser el remitente.
Finalmente, la intención era una convocatoria para que entre los receptores del mensaje que tenían o tienen responsabilidades, frente a la necesidad de contar en Manizales con una verdadera institución asistencial de carácter universitario, no simplemente publicidad, se integraran y definieran las líneas a seguir. A lo mejor, pocos consideran oportuno tener un Centro Asistencial Universitario. ¡Qué lástima! ¡Que regresen los ancestros, porque fueron capaces!
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