Diego Fernando Hidalgo
LA PATRIA | MANIZALES
Tiempo seco es sinónimo de plagas y de escasez de agua, asegura Dorancé Pineda Correa, administrador de una finca en la vereda Aguacatal, de Neira. Por eso, para él es vitar mantener unos buenos estanques que permitirán sufragar la ausencia de líquido durante esta época.
Contrario a los dos años anteriores, de fuertes lluvias por esta época, el 2012 tendrá un junio especialmente seco, según le explicó a LA PATRIA el pasado martes Fernando Mejía, investigador del Instituto de Estudios Ambientales de la Universidad Nacional, sede Manizales.
Según la experiencia, en la ciudad las temperaturas podrían llegar a alcanzar de 29 a 30 grados centígrados en el casco urbano, lo que puede ser bien visto por cultivadores de café y por las autoridades porque se reduce el riesgo de deslizamientos; pero no es tan aceptable entre otros cultivadores y por la reducción en las fuentes naturales de agua.
Qué hacer
"Hay que contar, mínimo, como 5 o 6 tanques de 2 mil litros. La cifra puede aumentar si hay que fumigar, mantener aseada la casa y cuidar los animales", indicó el agricultor de Neira. En el caso de los cafetales, aseguró que deben estar preparados con abono fertilizante, pues eso los refresca y evita el daño del café.
Otra de las indicaciones que entrega es conservar las cuencas. Por eso sugiere vigilar que los trabajadores de la finca no les vayan a quitar sombra. "Lo ideal es sembrar quiebrabarriga, matarratón y guineo por la parte de encima de la cuenca y respetar una distancia de seis metros para proteger el nacimiento".
En cuanto a las fumigaciones, deben adelantarse cada dos meses, pues si se viene el verano, se vienen las plagas. Aclaró que en temporada seca merma la mano de obra porque ya no hay tanta maleza. "Los trabajadores que queden se deben dedicar a preservar los montes, secar los sembrados, recolectar cosecha, fumigar contra la roya especialmente, porque aparece en esta época. Hay que aplicar fertilizantes de buena calidad".
Por último, explicó que la construcción de un tanque de 50 mil litros no cuesta más de $150 mil, pues se usan dos bultos de cemento y máximo 200 bloques. Se tendrá agua suficiente en caso de escasez.
Otras recomendaciones
1. Ensilar y henificar, clave en ganado
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Las manifestaciones más claras son la escasez de pastos, producida por las pocas lluvias y las altas temperaturas. Con el ánimo de contrarrestar los efectos nocivos de este panorama se recomienda evitar las quemas, las cuales pueden salirse de control y crear daños graves, dada la baja humedad y la deshidratación presente en los forrajes.
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No es recomendable establecer ni sembrar praderas en esta época, ya que los índices de germinación son mínimos por las condiciones climáticas. Así mismo, abstenerse de realizar arados, ya que esto hace exponer la tierra al sol y perder la poca humedad retenida.
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Cuando no se haya entrado en la parte más aguda de la temporada seca, se recomienda, de ser posible, cosechar la pastura disponible o excedente para realizar silo o heno y poder almacenarla para ofrecerla cuando se vaya requiriendo.
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Se pueden establecer cercas vivas que reporten alimentación, sombra y humedad en las praderas. Es fundamental también proteger las fuentes de agua del acceso directo del ganado, el cual destruye el bosque húmedo y contamina las aguas con el pisoteo.
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Para ello se requiere ubicar bebederos artificiales por fuera de las fuentes de agua.
2. En las plantaciones
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No hacer quemas de residuos de cosechas, ni rastrojos.
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Las ureas pueden producir quemazón en las plantas.
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No aplicar herbicidas, pues el suelo se reseca mucho más.
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En lo posible, haga incorporaciones de materia orgánica para proporcionar un poco de humedad y de nutrientes al suelo.
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Haga monitoreo constante de los cultivos para detectar cualquier problema por plagas o enfermedades y así poder hacer manejo a tiempo.
3. Generales
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Aplicar métodos de riego de precisión y bajo consumo de agua (goteo, aspersión y microaspersión), evitar riego por gravedad.
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Evitar regar en horas donde se presenten las temperaturas más altas para evitar pérdidas por evaporación y evapotranspiración.
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Adecuar y/o construir reservorios para almacenar agua (preferiblemente cubiertos) o tanques para suministrar riego en épocas críticas de los cultivos.
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Utilizar labranza mínima cuando el suelo no está compactado o labranza con cincel para evitar voltear el suelo y mejorar las condiciones de retención de humedad.
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Priorizar los cultivos más susceptibles a la sequía.
4. Por cultivos
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-En cacao
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No es conveniente hacer semilleros ni realizar siembras.
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No efectuar podas fuertes.
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Si es necesario, hacerla en horas de menor temperatura.
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La reducción de humedad acentúa el "mal de machete". Se recomienda erradicar los árboles enfermos y desinfectar las herramientas.
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Evaluar la humedad del suelo antes de fertilizar.
En café
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No se recomiendan nuevas siembras en esta época.
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Para cultivos que estén en el primer año, considerada fase crítica, se recomienda adicionar en el plato coberturas muertas provenientes de desyerbas y podas, o cualquier material orgánico que conserve la humedad del suelo.
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En los germinadores y almácigos establecidos y planificados para sembrar a comienzos de año se recomienda el uso de umbráculos (toldos) para disminuir la radiación solar y aplicación de riego. Se deben llevar al campo los materiales que no pasen de 5 o 6 meses de edad.
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Captar y almacenar el agua lluvia desde los techos de las construcciones de la finca y hacer uso racional del agua.
-En caña panelera
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Abstenerse de hacer nuevas siembras, pues el bajo contenido de humedad en el suelo afecta la germinación y el macollamiento.
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Aplicar adecuadamente materia orgánica a los cultivos para mejorar la capacidad de retención de agua en los suelos.
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Mantener el terreno cubierto con hojas y residuos de caña para evitar los efectos de la evaporación del agua.
Lo que debe saber
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Apio, calabaza, cohombro, coliflor, espinaca, lechuga y repollo: necesitan mucha agua durante los picos de desarrollo.
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Arveja, maíz y papa: necesitan agua en momentos críticos del desarrollo.
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Brócoli, cebolla, chirivía, remolacha, repollita de brusela, tomate y zanahoria: no necesitan riego frecuente.