DUVÁN ZULUAGA
LA PATRIA | ARAUCA (PALESTINA)
Los comerciantes de Arauca (Palestina) que ocuparon por cerca de 50 años el Parque de Bolívar para vender sus frutas, verduras y carnes gozan desde el martes pasado de un nuevo espacio en la sede que se construyó con recursos de la Alcaldía y de Acción Social.
En la obra se invirtieron cerca de mil millones de pesos, de los cuales $650 millones son de la agencia presidencial, hoy Departamento para la Prosperidad Social (DPS), y $350 millones de la administración local.
La obra se inició en el 2004, tiempo en que los araucanos ya dudaban de su ejecución porque los retrasos comenzaron a notarse pronto. La terminaron en el 2010, pero no la entregaron debido a conflictos por fisuras y humedades, así como con los propios comerciantes. Los carniceros fueron los más reacios porque se veían obligados a adquirir refrigeradores y querían el primer nivel, no el tercero, como finalmente quedó establecido.
La concertación para que todos ocuparan voluntariamente las nuevas instalaciones estuvo a cargo de la actual administración, que logró un acuerdo con ellos desde mayo pasado, luego de los múltiples tropiezos.
Sin embargo, fueron necesarias más adecuaciones y el compromiso del alcalde Carlos Alberto Piedrahíta para gestionar recursos adicionales que garanticen la prestación de un servicio eficiente y de calidad.
Lo positivo también es que se recuperan espacios para la gente y se le da una nueva imagen al corregimiento, pues las vetustas construcciones que había en el parque serán cosas del pasado.
El alcalde tratará de gestionar $400 millones con el DPS para reestructurar el Parque de Bolívar del corregimiento, donde se aspira construir una media torta para eventos culturales, así como sembrar árboles que hagan más agradable el entorno.
Lo bueno y lo malo
Luis Alfonso Herrera Giraldo, comerciante de frutas y verduras le dijo a LA PATRIA que la reubicación tiene ventajas y desventajas. Lo positivo es que estará bajo techo, habrá más higiene y mejorará la comodidad para los comerciantes y los clientes.
Lo negativo, agregó, es que se rompe una tradición de medio siglo, se pierde la venta al transeúnte y permanecerán más encerrados.
Él confía en que las autoridades controlen el espacio público y no permitan la invasión de vendedores ambulantes o estacionarios, y que el parque permanezca siempre despejado. También pidió que se prohíba la apertura de negocios similares porque eso les representaría la quiebra total de sus negocios.
Sobre el cambio
José Luis Vásquez Giraldo, líder comunitario
En un principio no creía que los comerciantes aceptaran la reubicación. Pensaba que Arauca era el único corregimiento que carecía de Parque porque siempre permanecía invadido. El cambio me parece espectacular porque se le da un nuevo aire al pueblo.
Carlos Andrés Urrea Cardona, sacristán
Me parece excelente. Así se ve más organización y los turistas podrán venir y disfrutar de un buen ambiente. Dudaba que se diera apertura a la nueva plaza, pero gracias a Dios se hizo realidad.
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