Medio siglo como concejal de Chinchiná

Julián García

LA PATRIA | CHINCHINÁ

Un golpe de suerte le devolvió la curul en el Concejo de Chinchiná a Jaír Arenas Ruiz, del Partido de la U, quien perdió en las elecciones pasadas de octubre por 41 votos. Sacó 408. Su amigo de lucha y concejal Óscar Gallego Castrillón, también del Partido de la U, con 14 años en la corporación, renunció la semana pasada para asumir un puesto en Gensa y el siguiente en la lista era Jaír.

Es considerado uno de los ediles con más antigüedad en el país y espera en diciembre celebrar los 50 años en este cargo. En noviembre pasado cumplió 83 años, en Chinchiná lo distinguen como el concejal del pueblo. Camina por las calles del centro, toma tinto en los cafés, hace mandados y se saluda con todos.

Anda apoyado en un bordón, dos caídas le afectaron parte de la movilidad. “Vea, ya camino bien, no he faltado a las sesiones en estos 49 años. Guardé la esperanza de regresar al Concejo, la política es cambiante”, dijo entre risas.

A lo largo de su trayectoria política ha sido partícipe de cientos de proyectos de acuerdo, la construcción del acueducto local, la compra de la primera máquina de bomberos, pavimentación de calles, mejoras de vías, construcción de barrios y generación de empleo.

Los contradictores le reprochan: “Jaír, retírese del Concejo y deje participar a otros”. Él les contesta: “Toca continuar luchando por el bienestar de mi pueblo”.

A pulso

Contó que solo estudió hasta quinto de primaria, en la Escuela Santander, de Chinchiná, y que es el único de siete hermanos, cuatro hombres y tres mujeres, que se inclinó por la política.

“Hice de todo en la vida, menos lustrar calzado, andaba a pie limpio, vendí helados, cargué maletas, fui ayudante, expendedor de carnes y hasta director de un equipo de fútbol”, recordó.

militó en el Movimiento Revolucionario Liberal (MRL), en 1960, y llegó al Concejo de Chinchiná en 1970, por el Partido Liberal, con el que estuvo 35 años. "Fui el segundo en lista de partido del exnotario Quinto de Manizales, José Wesner Molina Usma, me trataron mal en el liberalismo y por eso me retiré, el año pasado cumplí 15 años en las toldas del Partido de la U”.

Lucha

Ha sido ocho veces presidente del Concejo de Chinchiná. “Unos alcaldes son buenos, otros regulares, me toca de todo, he jugado a favor y en contra”, comentó. Lleva 45 años casado con Rud Dery Ríos López, con quien tuvo a Lina María y a Luis Carlos, quienes no le siguieron los pasos políticos.

Reconoció que lo atropella la tecnología, no tiene correo electrónico, mucho menos sabe cómo manejar un computador o un celular de los nuevos, usa un celular flecha.

“Es un honor ser concejal, claro que los honorarios no son los mejores", reconoció que la manera de hacer política no ha cambiado mucho en estos 50 años. "La gente no dejan de pedir el bulto de cemento, el puesto, la teja y algo de plata, trato de ayudar”.

En la Navidad pasada repartió 3.500 regalos y tiene listas 70 cajas con cuadernos para regalar, los recoge entre conocidos.

Como concejal quiere revivir la integración entre Chinchiná y Pereira, impulsada en la Alcaldía de Sergio López Arias. “La considero benéfica para ambos municipios. Podemos pertenecer al Área Metropolitana de Caldas y aliarnos con el Risaralda, hay mucho en común con Pereira, el comercio y el estudio”, agregó.

La semana pasada se posesionó en el recinto del Concejo del tercer piso de la Alcaldía, en medio de aplausos y felicitaciones. “No compré estrén, tengo mucha ropa", carcajadas.

El Concejo de Chinchiná tendrá Jair para otros cuatro años más.

Exhibe en su casa 56 reconocimientos, entre ellos de la Federación Nacional de Concejos (Fenacon) y la Medalla de Oro del Congreso de la República.