En Riosucio despidieron a La Abuela y a Tano

LA PATRIA | Riosucio 

Dos carros fúnebres llegaron ayer, a las 8:30 de la noche, de Pereira al cementerio El Carmen de Riosucio con los cuerpos de Oliden de Jesús Hernández Reyes, de 50 años, y Adrían Arley León Uchima, de 35 años, dos de los 15 mineros que fallecieron el pasado 13 de mayo en las minas de El Playón. 

El sacerdote Joaquín Elías Franco, del templo de La Candelaria, ofició la eucaristía de despedida a la entrada del cementerio. 

El llanto de una pequeña se escuchó todo el tiempo, al pie de un féretro, mientras centenares de personas esperaban la bendición final. 

Ambos mineros, conocidos como La Abuela y Tano, eran de la comunidad de San Pablo, zona rural de Supía,pero como es costumbre, cuando alguien de allí muere, es sepultado en Riosucio. 

"Por fin descansamos de éste sufrimiento y ahora nuestros seres queridos también descansan en paz", dijo una señora, mientras los ataúdes eran bajados al fondo de la cavidad. 

Familiares,amigos y vecinos, con miradas tristes, se fueron alejando del lugar. La solidaridad con las familias de los dos mineros, siempre fue una constante y así se notó durante el sepelio.