29 meses saboreando la paz en La Merced

JUAN DAVID CASTAÑO
LA PATRIA | MANIZALES

Aquí, hace 29 meses no matan a nadie. El sepulturero, por la falta de trabajo ahora le ayuda al padre a pintar la parroquia. Los funcionarios de la morgue del hospital hace tiempo que no practican un levantamiento a alguien que haya sido asesinado.
La tranquilidad es el factor común en La Merced, población del norte de Caldas. Los niños caminan por el parque, el alcalde va en un campero a otro municipio sin necesidad de escoltas y en la Estación de Policía solo hay dos uniformados para atender los casos que se presenten durante su turno.
Atrás y vueltos leyenda quedaron aquellos años en que guerrilleros, primero, y paramilitares, después, se paseaban por la población armados hasta los dientes y sembrando el terror. Como un cuento viejo está la vez en que los bomberos, con una bandera blanca, tuvieron que acudir a apagar una finca que estaba en llamas y allí encontraron a todos los trabajadores ahorcados en un árbol.
Óscar Darío Castaño, de 30 años y tez trigueña, es el sepulturero de este municipio. Recuerda que el último entierro de una persona asesinada fue en abril de 2010, en ese mes mataron a Daniel Fernando Suárez, joven que días antes había expulsado de un establecimiento a un hombre, debido a que este fumaba. El hombre días después le disparó a Suárez por la espalda.
Suárez fue la última víctima por asesinato en La Merced, así lo confirman dos libros: el acta de defunciones de la Parroquia y la minuta del Cuerpo de Bomberos. Ahora descansa en el cementerio en donde su familia puso en su tumba: "Solo Dios sabe porque lo quiso así, siempre vivirás en nuestros corazones: Recuerdo de padres, familia y amigos".

Dos entierros al mes
Óscar Darío heredó hace cinco años el oficio de sepulturero de su hermano Héctor Fredy Castaño, quien cansado de sepultar cuerpos dejó el trabajo y se fue a laborar a una emisora. "A él si le tocó duro, toda la época de la violencia, había mucho trabajo y por eso dejó esto", comenta.
Según el acta de defunciones de la Parroquia, en agosto pasado murieron dos personas en La Merced, las dos por causas naturales. De los 31 días del mes pasado tan solo dos Óscar Darío ofició como sepulturero, los otros días se dedicó a estucar y pintar la parroquia, labor que le encargó el padre.
Carlos Quintero, comandante del Cuerpo de Bomberos, recuerda que en la época de presencia de los paramilitares encontraban de dos a tres cuerpos con señas de muerte violenta en el río Cauca. "Ahora, sin fenómeno paramilitar ya no pasa eso y hace más de dos años que no se atiende un homicidio en la población".
El cementerio, al cual se accede por una pequeña puerta, está solo. En él ya no hay mujeres llorando a esposos e hijos. Las calles también están solas. El único movimiento que se ve es en el Parque de Bolívar en donde un hombre grita ¡Varsovia - Filadelfia! otros hombres ven un partido de fútbol del Real Madrid con Millonarios y como españoles celebran cada uno de los ocho goles que le hicieron al equipo bogotano.

El lastre
"Aquí aterrizaba alias Ernesto Baéz en helicóptero, el aparato llegaba a la cancha de fútbol. Luego él pasaba en carros por las calles y hasta se bajaba a saludar a la gente. Detrás de él iban 50 o 70 hombres, todos armados", comenta un habitante de La Merced.
Va más allá y se atreve a decir: "Las negociaciones de paz entre las AUC y el Gobierno comenzaron en La Merced, acá en el 2003 estuvo el entonces comisionado de paz Luis Carlos Restrepo y se reunió con Baéz en la vereda El Tambor, donde también él se reunía con políticos. Luego ya vino el acuerdo de Santa Fe de Ralito (Córdoba), pero ese tema se tocó primero aquí".
Esas reuniones con políticos sucedieron en la vereda El Tambor, cuando Báez y Ferney Tapasco González se reunieron para elegir una lista de integrantes del Partido Liberal a la Cámara. Allí acudieron Juan Pablo Sánchez, fallecido, Enrique Emilio Ángel Barco y Jairo Alberto Llano.
El ciudadano, natural de La Merced, recuerda que el último homicidio que conmocionó a la población fue el del campesino Ángel María García Soto, a quien ultimaron en la vereda El Limón en junio del 2009. Primero las autoridades encontraron la pierna izquierda enterrada, más adelante hallaron el cuerpo enterrado de cabeza y con cuatro heridas de arma cortopunzante.
"Ese fue el último sangriento, de resto La Merced carga un lastre de reconocimiento por la violencia, pero eso no fue así, porque el municipio era el sitio de descanso de los paramilitares, si ellos mataban a alguien lo hacían pero arrojaban los cuerpos en otros lados", expresa el ciudadano.

A la baja
El 2007 fue el último año que La Merced tuvo una cifra alta en homicidios, ese año mataron a nueve personas. En el 2008 fueron dos víctimas, las mismas en el 2009. El 2010 dejó tres muertes, incluida la de el joven Daniel Fernando Suárez. El año pasado no se presentó ninguna y hasta el pasado viernes este año también va en cero.
Rubén Darío Castaño Londoño, alcalde del municipio, destaca el comportamiento de la población y el trabajo que se ha hecho desde la Secretaría de Gobierno, extendiendo los planes de seguridad en el casco urbano y zona rural, en donde han encontrado armas sin el permiso de tenencia. Todas han sido decomisadas.
Olga Lucia Corrales Ramírez, gerente del Hospital La Merced, expresa que la última vez que la sala de urgencias del centro hospitalario tuvo congestión de trabajo fue en abril pasado cuando dos hombres se accidentaron en un carro y perdieron la vida. De resto, no recuerda que un fin de semana lleguen a la sala heridos por arma de fuego o cortopunzante.
El pasado martes la dirección de la Policía Nacional dio a conocer los departamentos y municipios del país sin homicidios. De Caldas aprecian en la lista La Merced, Marulanda, Salamina, Pácora y Marquetalia. LA PATRIA constató sus balances de homicidios que publica cada mes y en Pácora se presentó un asesinato en enero, en Marquetalia asesinaron a un hombre la semana pasada.
Durante 2011, este diario registró 260 asesinatos en Caldas. En 2010 fueron 343. La Merced fue destacada el año pasado por no sumar homicidios. El municipio ahora está lleno de tranquilidad, libre de grupos armados, tiene seis uniformados que se dividen en turnos y hacen ronda por las calles.
Tanto el alcalde, policías, sepulturero, secretarias de la Parroquia y el comandante de Bomberos comparten la idea de que aquí hace 29 meses no matan a nadie y que La Merced es un remanso de paz.

El dato
En el 2011 no presentaron muertes violentas en Marulanda, Norcasia, Filadelfia y La Merced.

Con la comunidad
¿Cómo percibe la seguridad en el municipio?

Jhon Edier Marín
Está bien, se ve venta de vicio y algunos robos pequeños, pero de resto bien.

Paula Andrea Zapata
Ha estado buena porque hace años que no matan a nadie. Preocupa la venta de drogas a los jóvenes.

Mariela Herrera
Bien, uno ve que no se presentan problemas en la gente y no matan a nadie.

Luz Janeth Castaño
Aunque no hay homicidios la Policía si debe estar más pendiente con las rondas y con los que venden drogas.