¿Votar o botar?
Señor Director:
Dos vocablos con diferentes ortografías, pero, ¡qué gran diferencia de significados! Votar, es elegir. Desde luego, que esa actitud, exige cierto grado de reflexión, de análisis, de conciencia, de confrontación, de comparación, de selección, de madurez política.
Es elegir lo mejor, pero no para satisfacer intereses personales, sino para un colectivo que recibe la influencia o consecuencia del desempeño de quien es elegido.
Votar, es un acto de responsabilidad, de compromiso, de saber lo que se está haciendo. Como dicen nuestros empíricos sabios, es actuar con los cinco sentidos.
Votar, es tomar decisiones con plena autonomía, pensando en el país, sintiendo que en cualquiera no se puede depositar nuestra confianza, que en cualquiera no se pueden delegar nuestros intereses, mas cuando son de índole superior y de tanta trascendencia.
Votar, es un derecho consagrado en nuestra Constitución Nacional, pero ese derecho hay que ejercerlo eligiendo a la persona más idónea, más capaz, más transparente, con más credibilidad, pero no por su capacidad de demagogia, ni de manipulación, sino por su impoluta hoja de vida, por su trayectoria reconocida, por sus ejecutorias, por sus propuestas viables, por su mesura, su sensatez, y respeto no solo por sus electores, sino por sus opositores. Que tenga y demuestre una sensibilidad a toda prueba.
Votar, es saber que la política, es un arma superpoderosa que no puede ser ejercida con mañas, con trampas, con sectarismos, con pasiones, con venganzas, con vindictas.
Votar, es tener en cuenta que se le entrega al gobernante la chequera de todos los colombianos para que sea invertida en la solución de las necesidades sociales que son las que tienen mayor impacto en el desarrollo y bienestar colectivo.
Botar, es hacerle juego a la politiquería, eligiendo a los más ineptos, más deshonestos, más voraces, ineficientes, inmorales e insensibles socialmente.
Botar, es designar a quienes con su perorata y retahíla de siempre, engañan y engañan prometiendo lo mismo sin intenciones de cumplir.
Botar, es no examinar con la lupa de la conciencia quién es el mentiroso y quién procura decir la verdad, aprovechándose de su procacidad y ventajas maliciosas.
Botar, es darle continuidad a quienes sabemos que hacen mal uso de los impuestos que pagamos los colombianos aprovechándolos en su propio beneficio.
Botar, es dejarnos manipular por quienes están investidos de algún cargo para elegir a quienes están atornillados al poder y consideran que son los defensores de las grandes causas sociales, abusando del poder como mercaderes del clientelismo.
Botar, es no tener la independencia para concluir quiénes merecen ser nuestros timoneles del Estado.
Botar, es tirar a la basura nuestro voto sin pensar que Colombia, merece lo mejor.
Usted decide con V o B.
Cordialmente,
Elceario de J. Arias Aristizábal
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