Un perfil para el rector de la U. de Caldas
Señor Director:
A propósito de la consulta a la comunidad universitaria hoy jueves 24 de abril para la elección del nuevo rector de la Universidad de Caldas, en mi calidad de abogado egresado de dicha alma máter, me permito presentar una sana reflexión sobre el perfil necesario de cualidades esperadas en el nuevo rector.
Para quienes seguimos de cerca el desarrollo Institucional de la Universidad de Caldas, no es un secreto que existen grandes retos y una creciente problemática referente a la planta de personal docente, la contratación de ocasionales y catedráticos, el fortalecimiento de los programas de bienestar universitario, la calidad y pertinencia de los programas en pregrado y posgrado, la resignificación del Proyecto Educativo Institucional (PEI, el cual está desactualizado desde el año 2010), la investigación básica o aplicada como componente esencial y necesario de la universidad actual, la defensa de la autonomía y financiación de la universidad pública como un derecho social, la reformulación de la educación a distancia (tecnologías) que se oferta en municipios de Caldas y otras regiones, la articulación con la educación media y la educación para el trabajo y el desarrollo humano, la proyección Institucional con la Internacionalización de currículos y convenios; una mayor presencia en el desarrollo regional con un aporte real y efectivo que trascienda en la solución de los problemas socioeconómicos del departamento y del país; uno de los mayores retos es generar un ambiente institucional de confianza y diálogo que congregue a todos los estamentos en un propósito común para dinamizar y hacer efectivos los procesos institucionales que impacten la región; puesto que la anterior rectoría ocasionó la ruptura del diálogo y la concertación, esperamos que se regrese al trabajo conjunto con posiciones propositivas respetando las diferencias y la diversidad dentro de un diálogo sincero y objetivo que conlleve acuerdos favorables para la Institución y la sociedad caldense.
La gestión de recursos es otro gran reto que debe asumir el nuevo rector, para tratar de fortalecer financieramente la Universidad y le permita desarrollar sus responsabilidades en educación, investigación y proyección.
No es suficiente para garantizar una exitosa rectoría que los aspirantes, todos muy respetables, emerjan de las entrañas de la Universidad de Caldas, y sean docentes con experiencia de décadas o lustros, los requerimientos van más allá de lo obvio, la Universidad exige un rector que necesariamente debe ser un entusiasta defensor de la universidad pública, un creativo e incansable gestor de recursos, un conocedor cercano de la administración universitaria en temas académicos e investigación, financieros, de planeación, de recursos humanos, de proyección, de integración con las diferentes fuerzas sociales, un hombre respetuoso de las ideas y las diferencias, un experimentado conciliador y manejador de conflictos, un ser humano que genere confianza, diálogo y decisiones colegiadas en lo posible.
La Universidad de Caldas es un bien público, un patrimonio de la región, con la cual todos tenemos el deber moral de protegerla y participar en sus decisiones. Esperamos que los electores en la consulta y el Consejo Superior en su designación tengan la sabiduría y objetividad para elegir al mejor.
Cordialmente,
Jorge Henry Arcila Buitrago
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