Hecho histórico para la mujer
Señor Director:
Con el mayor desprendimiento consideramos que el día de la Convención Conservadora donde se ungió como candidata presidencial del partido a Marta Lucía Ramírez fue y será un hecho histórico para la mujer. ¡Para la mujer colombiana! Lo es porque es como ubicarnos en el punto exacto en el que se nos habilitó para ejercer el derecho a votar y por lo tanto a protagonizar con los varones el desarrollo democrático de nuestro país, y separarnos para siempre de la odiosa discriminación y el desprecio a los atributos de la mujer como tal.
La mujer de cualquier región del país, sin clasificaciones que menoscaban su dignidad y su presencia, ha demostrado hasta la saciedad su afecto, dulzura, cariño, consagración y empeño en todo cuanto se le encomienda. Toda actividad o responsabilidad en manos de la mujer, asegura ecuanimidad, limpieza, decoro y cumplimiento. Su acción es garantía de éxito ya que por naturaleza y hasta un “sexto sentido” descubre con facilidad si conviene o no, llevar a efecto un proyecto o un plan. Su capacidad ejecutiva y de gestión es un ejemplo nacional, no solo en el sector financiero, soporte de la economía de una sociedad, sino en cualquier campo donde quede involucrado el bienestar general de la comunidad. Con la mujer es diciendo y haciendo sin límite de tiempo, cuando se trata de la familia, de las organizaciones empresariales, de las entidades comunitarias y aún las especializadas en ramas como la salud, la educación, la investigación, el derecho, de los estudios de altos alcances. Nada le queda pequeño o inaccesible a la mujer.
Con todos los sentimientos de consideración y aprecio por los valores y atributos de la mujer, convocamos a ese ¡gran ejército de mujeres inconformes y marginadas! y las preparadas en universidades y con diplomas de idoneidad, la chapoleras sencillas, campesinas, de delantal y pañuelo; las mujeres indígenas -bendiciones de nuestras etnias- madres cabeza de familia, madres solteras y casadas; consagradas a la espiritualidad; las de los barrios populares y obreras de las actividades de producción; a aquellas que tienen poder económico y social; que es dirigente, como también a la mujer estudiante y pensante de nuestro querido país para que en nombre justamente de la mujer, llevemos a la Presidencia a Marta Lucía Ramírez, para imprimirle sentido y contenido a la dignidad, el valor, y la capacidad que nos asiste de darle a Colombia entera un nuevo rumbo y un nuevo destino, o mejor dicho, una nueva esperanza de vida. Con respeto y admiración.
Stella Villa Hoyos
Olga Rivas de Echeverri
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015