Todos a una con el Once
Señor Director:
Molesto su atención para manifestarle que la preocupación que en días pasados le expuse acerca del Once Caldas debe ser la de todos los manizaleños y, entre todos, podemos encontrarle soluciones a una crisis que como bola de nieve aumenta con el pasar de los días.
Sí, Señor Director. Véase si no: la deuda del equipo con la DIAN, es cercana a los 14 mil millones de pesos, lo que causa en intereses la media bicoca de unos 100 millones de pesos mensuales, dinero que se escurre como agua entre las manos y cada día endeuda al equipo en cifras más altas.
Desde luego que, ante tamaño problema, solo queda un camino; camino que hay que afrontar de inmediato y consiste en declarar el equipo en cesación de pagos, con el fin de iniciar el proceso de arreglo con los acreedores, que si bien no es una cura, sí es el medio para poner esa deuda con el Estado en términos pagables en el tiempo, así sea de largo plazo. Con los demás acreedores, el arreglo podrá hacerse de muchas maneras, buscando no crearles perjuicios exagerados, pero siempre contando con que el Estado lo permita.
Paralelamente, es imperioso devolverle la tranquilidad y la confianza a la administración del equipo, dado lo demostrado frente al proceso futbolístico y de disciplina de la institución, y los pasos de ciego que se han dado en lo económico. Sí, Señor Director: el equipo requiere de una gerencia que genere confianza en todos los aspectos. Así, con total claridad y sin peleas.
Creo que los directivos de hoy están dispuestos a permitir una salida para el equipo, no necesariamente retirándose de la junta como quiera que sus acciones les dan derecho a estar allí, pero sí permitiendo que otros ingresen a ella y así, entre todos, se encuentren los caminos para salir de la crisis. De tal manera que podemos conformar un gran ejército ciudadano que, aportando dinero, le entregue un tanto de liquidez al equipo. Esto, mediante una emisión de acciones que pueda ser adquirida por cuantos creemos que el equipo es parte del patrimonio cívico de Manizales, seamos seguidores del fútbol o no.
Así, creo que nuestras Barras del Norte, que son unos 4 ó 5 mil ciudadanos, pueden comprometerse a adquirir 1.000 pesos semanales en acciones. En el año nos da un total de 250 millones de pesos. De los asistentes a las tribunas de oriente y occidente, que son unos 2 mil, a la mitad comprometerlos con 25 a 50 mil pesos por mes durante diez meses. Obtenemos cerca de 500 millones de pesos. A los otros 1.000, comprometerlos con 100 mil pesos mensuales durante diez meses. Se obtendrían 1.000 millones de pesos. Conseguir unas 20 empresas que sacrifiquen 10 millones de pesos cada una, en cuotas mensuales de 1 millón durante 12 meses, nos darían 240 millones. Infimanizales también puede aportar unos pesos, digamos 50 ó 100 millones. Así las cosas, y sumando, tenemos ya más de 2.000 millones de pesos en acciones, que pueden ser emitidas por la sociedad anónima y financiadas sin costo a los adquirientes. Nadie se habrá quebrado al aportar esos pesos. Nadie se habrá quedado sin mercado por causa del aporte semanal o mensual, recolección en la que pueden contribuir eficientemente las casas de chance que se encuentran en cada esquina y en donde los ciudadanos podremos pagar las acciones que nos comprometamos a comprar.
Desde luego que esto es, en sí, un gran reto, que requiere de liderazgo, y de publicidad, y de entusiasmo, y de civismo, y de amor por lo nuestro. Ese liderazgo les cabe muy bien a nuestro Alcalde y a nuestro Gobernador. Para eso no necesitan plata; solo ganas, y tendrán en su haber una obra en favor de la ciudad y de sus gentes; del deporte y de los procesos lúdicos sociales.
Personalmente creo que los integrantes de la junta directiva del Once necesitan de la ayuda de la sociedad toda. Igualmente creo que facilitarán lo que se encuentre a su alcance para que la confianza de las gentes renazca y este proceso pueda darse. De todo esto estoy seguro.
Finalmente, queda una misión para los senadores y representantes nuestros. Misión consistente en hacer de estos afanes de nuestro equipo, causa común para otros equipos que pasan por las mismas. Afanes derivados de los impuestos adeudados por causas similares a las del Once u otras, en los que no hubo interés en evadir impuestos o cosa parecida, dado que eran instituciones sin ánimo de lucro, que incurrieron en un error de interpretación de la ley y fueron drásticamente sancionadas. A todos estos equipos, puede liberárseles de estas cargas mediante una ley que les obligue a una contraprestación cualquiera en favor del deporte, como complemento a la que los llevó a constituirse en sociedades anónimas. Ellos, los políticos, tendrán el encargo de ser creativos y de concitar voluntades en el Congreso de la República para lograr este objetivo. Esa será su labor prioritaria.
Todos a una, como en Fuenteovejuna, Señor Director. Ah, y sin peleas, todos jalando para el mismo lado.
Hernando Arango Monedero
P.S.: En Pereira pueden hacer lo mismo, su equipo hace falta en la región.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015