¿Prosperidad?
Señor Director:
La reciente cumbre de Jefes de Estado de América fue un sonado fracaso; la promoción de la candidatura del Vicepresidente Garzón a la dirección de la OIT fue otra frustración para el presidente Santos, y ambas cobraron sus millones. El Euro tiende a anularse con su diaria devaluación agravada por las crisis económicas de Grecia y España, más el endeudamiento preocupante de Italia, Francia e Inglaterra y Alemania que ya no soporta pagando los platos rotos de la Unión Europea. Los EE.UU., no muestran pasos seguros de rehabilitación y el dólar sigue debilitándose. China entró en receso de importaciones, que parecía ser una ilusoria esperanza. Las bolsas del mundo siguen cayendo y en Colombia la revaluación del peso detiene las exportaciones, mientras el gobierno Santos ofrece regalar viviendas que costarán sus billones. Las bonanzas minera y petrolera están siendo una vaga ilusión, pues ya vemos el petróleo bajando en picada y el auge minero muy publicitado es solo para donarle las regalías a las Trasnacionales como lo afirma el senador Robledo Castillo del Polo, quien ha venido observando los ricos socavones de Marmato por citar un solo caso. Se proponen reformas y más reformas a la Constitución Nacional: la reforma para el marco jurídico de la Paz, que ha sido un caso insular lo dijeron los politólogos Rangel y Gómez Buendía, pues, es la única en el mundo que entregará por anticipado y sin negociar con los rebeldes armados generosas concesiones, y sin exigir siquiera la entrega de las armas, mientras las Farc disfrutan haciendo incursiones armadas desde Venezuela causando bajas lamentables al Ejército colombiano con la presunta colaboración de las milicias chavistas. Se requiere con urgencia reformas viables y sostenibles de la salud, (sobre esto editorializó recientemente LA PATRIA con sólidos argumentos), que sigue en grave crisis después de las alegres promesas del señor Presidente. Así mismo se esperan las de la justicia, la educación, etc., sin dejar de mencionar la peligrosa bomba de las pensiones. Podrá creerse que estemos caminando por una senda de prosperidad? Todavía podemos adicionar a este crudo panorama que la devolución y reconocimiento de propiedad de centenares de fundos agropecuarios usurpados por guerrillas, paramilitares y narcos, exigen erogaciones de billones de pesos, que la reciente ley que estatuye como enfermedad la drogadicción y esto exige que este alto número de ciudadanos sean tratados gratuitamente en clínicas y hospitales con un sistema de salud casi quebrado, más las decenas de procesos contra el Estado por indemnizaciones de víctimas del conflicto que se tasa en billones, y como remate la pésima cosecha cafetera y la rebaja de su cotización obligando a los exportadores a importar café de Brasil, Ecuador y Perú, (¡qué bella ironía!), para poder atender la demanda extranjera.
Cordialmente,
Rogelio Marulanda G.
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