Alejandro Samper
LA PATRIA | CARTAGENA
El Teatro Adolfo Mejía de Cartagena estaba lleno para el primer conversatorio que abría el Hay Festival 2013. Abajo, en la luneta, la gente sacaba sus tabletas, teléfonos inteligentes y cámaras para tomar fotos, no del invitado, el director de cine español Alex de la Iglesia, sino de la farándula nacional que allí estaba.
En uno de los palcos estaba la familia Santos, en otra el embajador de Colombia en Inglaterra, Mauricio Rodríguez. ¿O era Diego Trujillo, el actor de ¿Dónde carajos está Umaña? Por allí también estaba Poncho Rentería y el infaltable Salvo Basile, porque todo evento en La Heroica debe contar con su ruidosa presencia.
Dos señoras bogotanas que son benefactoras del Hay Festival - o sea, donaron $2 millones 500 mil - señalaban desde su balcón a quienes conocían. "Ese es un otorrino que escribió un libro malito, pero el tipo es muy querido", "Allá está Rodrigo (Pardo), ¡Cómo lo tiene de acabado el noticiero (RCN)!", y así se la pasaron hasta que salieron al escenario el director del periódico El Tiempo Roberto Pombo y el irreverente director de películas como El día de la bestia y Balada triste de Trompeta.
El chismorreo se calma y De la Iglesia dispara frases que arrancan risas a la misma gente que él critica y cuestiona.
Acción mutante
En España le dicen frikis a los tipos como Alex de la Iglesia. Amante de los cómics (ese día llevaba una camiseta con el rostro de La Mole estampada en el pecho) y de las cosas raras, el español habló de sus inseguridades y de cómo usa el humor para desarmar a los poderosos. Lo hizo con Pedro Almodóvar y logró que financiara su primer proyecto Mirindas Asesinas, de 1991.
Llevaba un blazer y vestía completamente de negro excepto por sus botas marrón. Un mutante en medio de tanta guayabera y colores tropicales. "A través del insulto te defines en la vida", dijo, mientras contaba anécdotas sobre cómo supo quién era - "un director español de mierda", "un maldito vasco" - escuchando los comentarios negativos que hacían sobre él y su trabajo. "Tu mamá cree más en lo que digan los diarios de ti, que en lo que tu le puedas enseñar". Como la mayoría de sus películas: tragedias cargadas de humor negro.
Habló sobre cómo sus personajes son grotescos, "porque rodar lo bello es imposible", y sobre cómo le vendería el alma al diablo con tal de que le garantizara una vida como, la que siempre ha soñado, pero sabe que en su negocio fáustico saldría estafado.
"¡Lo adoro! Me encanta su irreverencia y que es tan raro", dijo una de las benefactoras al final de la actividad. Ella llevaba el pelo alborotado y teñido a un color naranja Postobón, mientras se juntaba con otras mutantes para posar para la cámara de un fotógrafo de una revista del jet set criollo.
¿Qué más Hay?
El Hay Festival nació en Colombia hace ocho años, al hermanarse con el Hay Festival de Gales (por el pueblo de Hay-on-Way) que se gestó en 1988, y que es considerado como "el Woodstock de la mente".
Allí, en estos festivales que ya se realizan en diez lugares diferentes del mundo, se reúne lo más variopinto de la cultura. Por ejemplo, este año a Cartagena vienen los premios Nobel de literatura Mario Vargas Llosa y Herta Müller, la cantante Susana Baca, la cocinera Narda Lepes y la guionista Juana Uribe para hablar de las "narconovelas".
Pero también está lo más graneado de la fauna nacional cultural: desde los esnobistas benefactores que van para hacerse la foto en el cóctel con Vargas Llosa, hasta el bohemio de pantalón de pana (¡a 32 grados centígrados!) que va para hacerse la foto junto al escritor peruano, antes e entrar al cóctel. Y no paga boleta de entrada a los eventos porque los ve por las pantallas que ponen afuera del recinto.
Temas y conferencistas hay para todos los gustos. El jueves, Daniel Samper Ospina (editor de la revista Soho), el peruano Daniel Titinger (director del diario Depor), y el argentino Eduardo Sacheri (autor de La pregunta de sus ojos, llevada al cine como El secreto de sus ojos), hablaron de fútbol, literatura y humor. También se habló sobre periodismo de investigación y se escucharon las opiniones de María Teresa Ronderos (que destacó el trabajo de La Patria), Juanita León, Rodrigo Pardo (ojeroso por su trabajo en Noticias RCN, como lo hicieron notar las benefactoras), Jaime Abello y Daniel Samper Pizano.
"Tal vez nosotros la tenemos más fácil (para investigar y publicar los hallazgos) por pertenecer a la oligarquía", dijo Samper, quien incluso se atrevió a bromear sobre el "elefante", haciendo referencia a su hermano y el escándalo del Proceso 8.000.
Temas serios, temas profundos, temas banales. Temas sin sentido y conversaciones que se desvían de la pregunta preparada por el entrevistador. Público serio, público gocetas, público indignado (porque o se ven reflejados en los conferencistas), público mutante (así no se den cuenta que ellos son los bichos raros, como las benefactoras). En el Hay 2013 hay de todo. Incluso Dania Londoño está asistiendo a algunas de las actividades.
La frase
"Cuando cuentas una historia no tienes por qué entenderla". Alex de la Iglesia.
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