Luisa Fernanda Mahecha B/Q'HUBO
"Bendita locura". Así dice un mural, frente al Hospital Infantil Rafael Henao Toro. "Sin mente", dicen algunos grafitis en otros puntos de la ciudad. Y sin mente, y con locura, parece que están los hinchas que matan por un equipo de fútbol. Una de sus víctimas, en abril, fue Daniel Eduardo Suárez, de 20 años, a quien está dedicado el mural "Bendita Locura", porque así se llama su canción favorita, del grupo de metal Non Servium.
"Alguien me dijo un día "mira hacia delante" / Y piensa que jamás seras igual que esos payasos, / Que pasan sus días intentando encajar y ver cómo se escapa el líquido tesoro. / Juventud preciada, ansiada, mágicos momentos que solo unos pocos elegidos hemos vivido unidos", dice la canción. "Bendita locura la que te llevó hasta ahí"
Algo bueno
Lo que le pasó a Daniel fue fuente de inspiración para Fernán Mejía, uno de sus amigos y estudiante de Artes de la Universidad de Caldas, que, manos a la obra, quiso marcar la ciudad y recordar a Daniel de una manera diferente. "Hace dos meses (en abril 15) mi amigo murió en una pelea de barras bravas (en Chinchiná). Aproveché la situación que solo era de estar mal y triste para recordarlo de otra manera. Así que, junto con otros amigos, recolectamos pinturas y materiales y dirigí la realización del mural. El rostro es el de Daniel", contó Fernán.
De un triste episodio Fernán sacó algo bonito, y puso a la ciudad a ver un mural que le cambió la cara la Avenida Santander entre carreras 51 y 49.
Sin embargo, no se sabe cuánto durará la intervención del lugar, que ya antes ha tenido otros murales o grafitis. "Ese muro es de propiedad privada, pero generalmente en el mundo de los murales urbanos no se solicita permiso. Nosotros ni siquiera sabemos quién es el propietario, pero ese muro ha tenido antes otros dibujos, y estaba olvidado, con estragos del tiempo y del clima, así que lo limpiamos y lo usamos", comenta Fernán.
Escogió ese lugar en particular, dice Fernán, porque era grande, amplio, visible y le "puede generar una dinámica a la Avenida Santander".
"Maldigo la hora en que se engendro,/ A esos ladrones de personas, destructores de sueños, /Familias unidas esperando el momento de que el hijo arrebatado regrese con ellos./ Ahora es momento de sacarte ¿preso? y pensar que aquí fuera Todos están contigo sufriendo este castigo, que simples muros no podrán frenar la Lealtad / que siempre nos tendremos ¡juntos hasta el infierno!"
Menos violencia, mas arte
Muchos otros murales urbanos tratan de tener un significado especial. En el barrio Solferino, por ejemplo, el grupo juvenil Huellas de Vida ha intentado cambiar el estigma de violencia que tiene el sector y resignificar lugares a través del arte urbano, de murales, hechos por jóvenes y niños.
Han hecho cinco en una estrategia que empezó hace unos cinco años, con recursos propios.
El coordinador del grupo juvenil, Andrés Felipe Marín, explicó que son 44 chicos, entre los 13 y los 33 años, los que conforman el grupo, y que semanalmente colaboran con 500 pesos, fondo del cual han salido las pinturas y los elementos para pintar el barrio.
"Lo hemos hecho en esquinas de casas que hacen parte del barrio, en propiedad privada. Si uno lo hace en un muro del municipio es muy probable que lo borren, y si uno pide el permiso es todo un trámite para que lo den. Por eso hemos pedido permiso a los propietarios de los inmuebles para intervenirlos", comentó Marín.
Se trata de un proyecto que busca resignificar espacios, es decir, darle un nuevo significado, uso y referente a lugares que han sido catalogados como violentos, inseguros, o feos.
"Por ejemplo, el mural de los rostros de los niños está en una calle que es ruta principal del barrio, por donde tienen que transitar con heridos. La idea es pensar que los niños son el futuro y que hay que generar vida y alegría, y no violencia", explicó.
Otro de sus murales es una pistola que en vez de balas tiene lápices. "Ojalá que los niños no se alejen de la educación, porque la violencia y la guerra los obliga a abandonar la escuela", opina Andrés Felipe.
Cada que hacen un mural, la pintada se convierte en fiesta de barrio. Actualmente tiene listo un proyecto para pintar 20 murales más, pero espera el apoyo ya sea de la empresa privada o del gobierno local. "Tenemos también las 20 personas, e incluso más, que quieren que pintemos los muros externos de sus casas", informó el coordinador del grupo juvenil.
¿QUÉ ES UN MURAL URBANO?
Realmente, el término mural urbano no es común, sino que se refieren a este tipo de expresión artística como arte urbano, e incluye grafitis y pinturas en los muros, y generalmente se hace sin permiso del propietario del inmueble.
Sin embargo, la expresión artística muchas veces no hace parte de las expresiones literales de las paredes: por ejemplo, las que quedan después de una manifestación estudiantil, o las que quedaron después del paro cafetero.
Acción poética
"Acción poética" es la firma de un grupo de grafiteros que hay en la ciudad, y que se han dedicado a poner frases con sentido en algunos muros de la ciudad. No recurren tanto a la técnica del dibujo sino a las letras.
NO OLVIDE
Los murales se vuelven parte del paisaje urbano porque con el tiempo pierden 'brillo' o color, pero muchos de ellos expresan los sentimientos hacia la política, la situación social o el rechazo a la violencia.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015